Capítulo 22 "Lesiones..."

Estaba en lo que parecía el gimnasio de la Academia estaban todos los estudiantes de mi grado Vampiros, lobos, brujos y Zayas, el entrenador parecía que quería matar a todos, no había hablado con ninguno de los chicos, aunque me daba cuenta de que me observaban porque sentía sus miradas y porque el entrometido de Mark me decía cada una de sus acciones.

-Luke está hablando con la manada acerca de que esta vez debían ganar- a esto me refiero, volque los ojos y busque con la mirada a Luke y era cierto hablaba con la manada seguramente de lo que Mark me informo, el entrenador hizo sonar su silbato y todo el gimnasio quedo en silencio absoluto.

-Como todos saben los vampiros lideran la tabla, quienes les siguen los lobos, luego los brujos y por ultimo las Zayas- lo último lo dijo como si fuera una decepción -pero ahora esto debe cambiar quiero que sepan utilizar la fuerza a su favor, porque tener fuerza sobrenatural y no saber utilizarla entonces es ser un idiota sobrenatural- asentí entendiendo al profesor -así que vamos con algo suave un lobo voluntario y un brujo voluntario- mire a mi alrededor esperando que alguien se levantara y fuera a... pelear, pero nada ocurrió y ya el lobo estaba en la cancha al ver que nadie se postulaba hice la cosa o más estúpida o más inteligente del mundo.

-Yo- me levante y camine hasta la cancha y me subí a la colchoneta Luke estaba sorprendido, arrepentido y divertido no tenía idea de que un lobo podía sentir tanto - ¿Tienes miedo? – ahora yo me estaba divirtiendo.

-Yo, no lo creo- caminábamos en alrededor de la colchoneta ninguno de los dos atacaba y yo no iba a hacer la primera, creo - ¿Qué tal, tu? – parecía mirar más allá de lo que expresaba.

-No para nada- sonreí falsamente y justo en ese instante lance mi primer golpe, aunque no literalmente si no un hechizo que hacía que se rompiera la pierna, Luke callo y cerró los ojos del dolor, pero casi al instante tomo de mi tobillo y me hizo caer -eres un maldito- le dije mientras me levantaba.

-Lo dice la que me rompió la pierna- Luke estaba frente a mí en forma de combate, me encogí de hombros, el chico se abalanzo sobre mí y yo me puse a un lado.

-Eres muy lento, querido- me acerque a él, pero antes de que pudiera atacarlo se alejó rápidamente, susurre un hechizo de confusión que hace que las personas crean que las están llamando o alguien les habla eso medio tiempo de tomarlo del brazo y darle una vuelta haciendo que quedara con la cara sobre la colchoneta y su brazo en la parte de su espalda mientras yo lo tomaba -nunca me subestimes- le dije al oído -y no vuelvan a ocultarme un secreto- lo solté y me aleje de él, camine hacia el entrenador quien se veía muy feliz.

-Eso estuvo genial, ustedes par de cobardes no puedo creer que se dejaran vencer de una chica, sin ofender querida- el entrenador me miro y yo solo me encogí de hombros -Luke me decepcionas- Luke estaba sorprendido y molesto por el comentario se colocó a mi lado mientras movía su brazo derecho que era el que había golpeado -Bueno brujos quedan en segundo lugar con 100 puntos, ahora todos largo, fuera, esfúmense- la agresividad del entrenador me gustaba al momento de salir todos mis compañeros brujos y brujas empezaron a vitorearme todos se abrieron paso como si fuera una super estrella, di un respingo al ver que Mark estaba a mi lado saludaba a todos como un actor pasando por la alfombra roja era algo gracioso volque los ojos y seguí caminando, quería salir de ahí rápido era algo extraño, me preguntaba qué hubiera pasado si hubiera perdido me habrían lanzado una maldición o algo así; no lo sé y tampoco lo quisiera averiguar.

Dibujaba tranquilamente en mi habitación, Mark como cada noche se había ido a ver a sus padres, eso me ponía un poco melancólica el perder a tus padres y que los puedas ver, pero no poder hablarles debe ser la cosa más horrible del mundo, el solo hecho de pensarlo me daba escalofríos puede que los Carter no sean mis padres biológicos, pero los amo como si lo fueran y si eso me ocurriera, no creo que lo soportarían otra vez.

Una luz que atravesaba mi ventana me saco de mis pensamientos me acerque para cerrar las cortinas, pero la luz provenía del bosque era azul y roja, mordí mi labio inferior me aleje de la ventana tome mi chaqueta y mis botas y salí de mi habitación mire a todos lados camine hacia las escaleras baje sin hacer ningún ruido, salí en la puerta antes de salir me puse las botas camine por el camino hacia el portón coloque la clave 2544 y se abrieron de par en par mire hacia la Academia, y continúe mi camino aquella noche hacía mucho frio, estaba oscuro y solo se veía gracias a la luz de la luna llena, comencé a buscar las luces, pero ya no las veía -Porque siempre me meto en estas cosas raras- maldije en voz alta, al girarme me di cuenta de que la Academia ya no estaba mire a mi alrededor y solo era oscuridad y muchos árboles, cuanto se supone que había caminado suspire y comencé a caminar esperaba que si no llegaba a la Academia, al menos esperaba llegar a mi casa.

Tenía como veinte minutos de estar caminando y no encontraba nada, oí un crujido de tras de mi me volteé, pero no había nada y eso era una muy mala señal empecé a caminar más rápido, esta vez escuche un rugido tras de mi me gire lentamente y vi a un lobo negro con ojos marrones intensos, y grandes, muy grandes colmillos caminen lentamente hacia atrás sin hacer ningún tipo de ruido, justo cuando quebré una ramita y eso lo alerto.

-Bien es tiempo de correr- hable en voz alta el lobo gruño y empecé a correr no veía absolutamente nada aparte rama y hojas que se interponían resbale y caí al suelo comencé a arrastrarme hacia atrás ya que mi tobillo se había doblado choque contra un árbol ya no tenía a donde ir, siempre había pensado que iba a morir vieja, arrollada por un auto, o causa de un asesino serial, pero nunca pensé que iba hacer por un lobo, pero el tamaño era distinto cerré los ojos y maldije para mis adentros, hoy había luna llena y solo los de luna creciente y luna nueva se convierten cuando quieran en cambio los otros no el lobo se acercó a mi recordé un hechizo y lo recite -Sedoloro- el lobo maulló de dolor, pero creo que no hizo mucho efecto ya que me miro más furioso que antes, pensé en lanzarle fuego, pero si lo pensaba mejor creo que no, porque o el lobo me mata o el fuego me quema todos los hechizos en los que pensaba no me servían y el tiempo se estaba acabando, el lobo se abalanzo sobre mí y como instinto cerré los ojos y me cubrí con mis brazos abrí los ojos cuando vi que nada pasaba vi la sombra de un hombre y el cuerpo del lobo en la tierra, cuando el hombre se giró sus ojos destacaban en la oscuridad era un azul intenso, se acercó un poco más hasta que quedó reflejado con la luz de la luna estaba boquiabierta, Luke se acercó a mí con cuidado aun no sabía que decir reviso mi tobillo, me quito la bota; cerré los ojos del dolor me miro ahora sus ojos eran los de siempre.