Nattiel
Me sentía inquieto con todo esto, pero aun así sabía que era lo mejor a pesar de que Aysel me quitara el habla, me detuve en seco al verla se veía hermosa, su mirada de curiosidad, sorpresa me gustaba verla así, me recosté del marco de la puerta ella era perfecta, como su cabello le caía sobre los hombros; reaccione de ese trance, me llene de valor, camine hacia ella y me senté a su lado.
-Hola- bajo el libro con disgusto y hablo.
-Hola, ¿necesitas algo? – negué – entonces me voy- Aysel comenzó a recoger sus cosas y antes de que pudiera irse me coloque en frente de ella.
-Espera- Aysel volcó los ojos algo muy características de ella -Quería saber ¿Cómo estabas? – la castaña frunció ligeramente el entrecejo, luego simplemente respondió.
-Estoy bien- tenía una sonrisa en su cara, cosa que me extraño porque ella nunca suele sonreír y menos cuando le hago una pregunta normal y básica, con eso no sabía si decirle que fuéramos al lugar que habíamos quedado con los chicos.
-Bueno, ¿Tienes esta hora libre? – Aysel asintió - ¿Quieres ir a dar un paseo? – Aysel puso esa mirada de curiosidad y después de pensarlo unos segundos aceptos estaba sorprendido de que hubiera aceptado, por el simple de hecho de que al principio ni siquiera quería verme y ahora acepto dar un paseo conmigo, pero no tenía tiempo de averiguar su bipolaridad, y antes de que pudiera preguntar cualquier otra cosa Aysel se levantó y empezó a caminar, recogí mis cosas y la alcance hasta ponerme a su lado el silencio reinaba entre los dos.
- ¿Cómo estás? – se me hizo extraño el hecho de que Aysel me preguntara algo así a pesar de eso respondí.
-Bien, aunque hoy tenemos clase de defensa- hice una mueca de dolor recordando las anteriores clases; si fuera un mortal mi cuerpo tuviera cicatrices y posiblemente moretones, no es como si me ganaran, pero si pegan fuerte.
-Y ¿es muy dolorosa, esa clase? – Aysel parecía asustada, nos detuvimos y la miré y sonreí, solo que no creo que no fue una sonrisa cálida, sino una escalofriante y fría.
-A veces, pero no te preocupes yo estoy aquí- Nos miramos a los ojos, me di cuenta de que sus ojos tenían un brillo algo distinto oscuro, pero a la vez tierno y bueno esos ojos marrones claros, tenían algo atrayente y su cabello castaño claro combinaban perfectamente con todo su ser, tome un mechón de su cabello con delicadeza y lo coloque detrás de su oreja, Aysel parecía nerviosa por la situación.
-Bueno vamos- Aysel suspiro aliviada y continuamos caminando al llegar al jardín todo era lo mismo de siempre los chicos hablando entre ellos, las Zayas cambiando el color de las rosas mientras caminábamos un grupo de chicas me saludaron y yo les sonreí, llegamos a la plataforma Aysel veía la plataforma en todos los ángulos -Y... ¿Qué hacemos aquí? – Comencé a buscar a los chicos a mi alrededor, pero no los llegue a ver.
-Bueno...- justo cuando iba a comenzar a hablar Luke llego junto con los demás, me sentí un poco extraño olía a muerte, sentía el frio, no le preste mucha atención hace un tiempo atrás ya había sentido esta sensación como la vez que James creía que Aysel había bebido algo porque ella menciono haber visto a un chico que no existe, ese día le dije a James que dejara de decir tonterías que podía haber sido cualquier cosa igual nada en este mundo es normal, bueno aquel día en su habitación había sentido la misma vibra extraña de muerte y lo raro era que la sentía cuando Aysel estaba cerca, no me había dado cuenta de que Aysel se había ido mire a los chicos quienes estaban con la boca abierta.
-Ella lo sabía- Katherina estaba anonadada con la situación y aun no entendía por qué.
- ¿Qué se supone que ella sabía? - Luke estaba inexpresivo, no estaba molesto solo sorprendido.
-Nat, lo sabía todo; sabía lo del demonio, sabía lo de pelirroja todo Nat, pero si pensamos lo tomo mejor de lo que esperaba- Luke se recostó de la pilastra satisfecho de sí mismo.
-No, el problema es que no se lo dijimos ella ya lo sabía y ¿Cómo lo descubrió? Nadie había platicado del tema hasta ayer en la noche- todos se pusieron serios al instante mire James quien tenía una mirada de astucia como cuando está a punto de resolver un acertijo o como si tratara de resolver un rompecabezas.
- ¿Y si nos escuchó? - todos negamos a la vez -Bueno Aysel no es tonta, es muy inteligente y muy astuta, bueno es solo una suposición- James termino y se encogió de hombros, una parte de mí no quería creer en ello, pero otra ponía todo en duda.
-Bueno, hay que ir a clases vamos- Luke nos sacó a todos de aquella tención y nos dirigimos al gimnasio.
Nadie se había atrevido a hablarle a Aysel, yo quería explicarle o en todo caso preguntarle cómo se enteró de todo, pero según Katherina era una pésima idea, todo era muy difícil Gema ni Katherina podían leer los sentimientos de Aysel, aunque nadie se explicaba por qué se supone que las Zayas pueden leer los sentimientos de cualquier persona, animal o lo que sea excepto el de un salvaje claro eso sería un caos, de cualquier forma, tuvimos que dejar de intentar porque teníamos clase de defensa, el entrenador hablaba, pero yo no ponía la más mínima atención a ello aun pensaba en lo que había pasado en el jardín, además de todo tenía un fuerte dolor de cabeza gracias a aquella cosa que estaba sintiendo aquel frio pesado de la muerte, pase la mano por mi cabello estresado por aquella sensación.
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Editado: 23.09.2021