Capitulo 10

Evan

—A partir de ahora las cosas van a cambiar, si llegaron hasta Mason eso significa que, o ya descubrieron nuestra ubicación, o están a punto de hacerlo.

Dice papá.

—Buscaré a ese infeliz, te lo juro. Esto no va a quedarse así.

—No lo sé, pero algo me dice que detrás de todo esto hay alguien más. No es el jaguar.

—¿De qué hablas?

—No puedo decirlo porque no estoy seguro, por lo pronto tendremos que proteger a la gente de esta casa. Y prepararnos para lo que sea.

Sé a qué se refiere, recuperar lo nuestro implicaba muchas cosas, viajar a Nueva York e implicarme con los Claire traería muchas consecuencias. Incluso, un enfrentamiento que lleva años aplazándose. Saliendo del despacho me encuentro con Aron bajando las escaleras, me sonríe y detiene antes de que cruce la puerta principal.

 —¿Puedes darme un minuto? Necesitamos hablar.

—Claro, ¿Qué pasa?

—Es sobre Ada y Elizabeth. Hace un rato me las encontré discutiendo y no me parece correcto. ¿Qué está pasando? ¿volviste con Eli?

Esta es una conversación que nunca imaginé que pasaría. Levanto las cejas y niego rápidamente.

—No, y no volveré con ella.

—Entonces habla con ella, porque yo la veo muy convencida de que ahora que no estás con Ada ustedes van a volver. No está bien que venga aquí estando Ada presente.

Me muerdo los labios y lo abrazo, mientras estamos así me pregunto cuando fue que creció tanto. Nunca creí que mi hermano menor me hablaría de esta forma, tan correcta y maduramente.

—Gracias, hablaré con Elizabeth.

Ada

En mi defensa, puedo decir y hasta sentirme orgullosa que no he necesitado de Mason en estos días para levantarme de la cama y salir a entrenar, he creado mi propia rutina y sobre todo he practicado mucho en las cosas que él me enseñó. Ha pasado una semana desde el atentado que sufrimos. Las cosas han cambiado demasiado en estos días, incrementaron la seguridad y sobre todo no me dejan salir sola, aunque solo salgo a entrenar por las mañanas y regreso aquí. A pesar de que Bethany y yo nos hemos distanciado, nuestra amistad perdura. Ella y Aron idearon un plan para poder acercarme a Evan.

Viajamos a una casa de los Taylor, a unas horas de la ciudad para pasar navidad, hay un vacío en mi corazón porque es la primera navidad que paso fuera de casa, pero estoy rodeada de maravillosas personas.

Cuando llegamos entro a la habitación que se me asigna, la casa es verdaderamente hermosa y muy grande. Hay ventanales gigantes que dejan ver el jardín, aunque me preocupa un poco la privacidad que podré tener aquí, no importa. Estoy dispuesta a recuperar a Evan, como sea. Cuelgo mi ropa dentro del closet, me doy una ducha y bajo. Aron y Mason han decidido hacer carne asada en el jardín, lo cual pienso que no es buena idea porque el clima no lo apetece, preferiría estar adentro con una taza grande de café, o chocolate caliente.

—¿Y James? —pregunto y me siento a lado de Bethany.

—No quiso venir, ya sabes, siempre encerrado en su propio mundo.

Contestó Rubí. Cierto, a veces me gustaría saber por qué es tan cerrado ese hombre, qué es lo que hará, o qué pensará. Es tan diferente a sus hermanos, es más como su papá. Que no habla, solamente piensa y asiente.

—¿Y Evan?

Se miran entre ellas y Beth carraspea.

—¿Quieren cerveza?

Se levanta de su lugar y va a la hielera. Saca dos y se hace tonta abriéndolas. Miro a Rubí pidiendo respuestas.

—¿Entonces? No va a venir ¿verdad?

—Hicimos todo lo posible para convencerlo, pero no lo logramos. Lo lamento, Evan es tan difícil.

Siento un dolor en mi pecho, pensé que quizá si estábamos los dos juntos podía surgir nuevamente algo en él. No quiero rendirme, no quiero tirar la toalla, pero soy inexperta. No sé qué hacer para recuperarlo. De pronto toda esa emoción que tenía cuando salimos de casa se convierte en mal humor, en coraje y decepción. Bethany regresa con la cerveza, pero no la agarro, me disculpo y voy adentro. Me meto en la cocina y me recargo sobre la barra apoyando las manos en la frente, quizá debería pensar en hacer otra cosa, tal vez debería dejarlo en paz de una vez. Es completamente notorio que no quiere nada de mí y me siento mal y tan incomoda porque mi presencia solo está haciendo que se aleje de su familia, porque a penas y ha puesto un pie en casa desde que dimos terminada por completo nuestra relación. No lo reprimo, por el contrario, lo entiendo. Me porté tan mal con él que merezco todo su mal trato, su ausencia, su indiferencia, pero ellos no. Yo más que nadie sé lo mucho que ama a su familia y no puedo seguir permitiendo que se aleje de ellos, es noche buena, debería estar aquí y no yo.

Por eso aquí, en este momento decido volver mañana mismo a casa. Aun me falta mucho por aprender y ahora que sé toda la verdad sé que debo aprender a defenderme, pero lo haré en casa, en mi entorno, lejos de todos los Taylor. Rubí entra a la cocina y me agarra del hombre, me siento la persona más estúpida.