CAPITULO 621-640

Capítulo 621

Albert miró a Edrick con una mirada sombría, "Realmente es hora de que vengas".

Janice estacionó la silla de ruedas de Edrick frente a Albert, e Ayla inmediatamente apareció rápidamente detrás de él.

Esta acción parece un pájaro joven que busca la bendición de un águila.

Janice miró a Ayla con un odio de hierro y acero, y le susurró: "Problemas del espíritu".

Ayla le sonrió brillantemente.

Janice estaba un poco sorprendida, esta mujer era tan arrogante con la gente en el recinto de Wutong, era como un molusco sin huesos para ella. ¿Por qué es esto?

Janice dijo algo incorrecto, y la gente en Wutong Compound inmediatamente malinterpretó que Edrick había venido a reclamar el crimen al anciano.

Incluso Albert piensa que sí, con un rostro viejo y arrogante y una postura elevada, le encanta responderle a Edrick.

Esperando a que Edrick se disculpe con él.

Edrick se quedó en silencio durante mucho tiempo, sus delgados labios ligeramente abiertos. "Papá, ¿qué hizo ella mal, quieres ordenar que la maten?"

Aunque la voz es suave, revela un toque de frialdad, dando a la gente un elemento disuasorio irresistible.

Albert originalmente pensó que, si Edrick no inclinaba la cabeza y se disculpaba con él, nunca le daría a Ayla a la ligera.

Pero nunca pensó que Edrick se tragaría el poder maligno de los que venían.

"Edrick, tu gente corrió a mi recinto de Wutong para causar problemas, ¿no debería castigarla?" Albert contuvo la ira en su pecho y apenas mantuvo el rostro amoroso de su padre.

Edrick todavía habló en un tono suave: "Si ella realmente te falta el respeto, entonces castígala, ¡no tengo ninguna objeción!"

Ayla se quedó estupefacta.

¿Es este chico demasiado malo con ella?

Albert suspiró, "Eres bastante sensato".

Luego levantó la mano y una vez más ordenó a su sirviente: “Hazlo”.

Ayla abrazó el muslo de Edrick y suplicó: “Presidente, no puede salvarme. soy tuyo...”

"¿Que es mío?" Había una mirada de expectativa en los ojos de Edrick.

"Tu empleado". Ayla no se atrevió a decir su identidad.

El rostro de Edrick de repente se volvió frío: "Si tienes el coraje de causar problemas, ¿tienes miedo de ser castigado?"

Ayla lloró y pió: “No, presidente, mi cara es tan cara, ¿qué debo hacer si me la rompen?”.

Tres mil en el ojo de águila de la guerra fría.

Está bien que ella no mencione la cirugía plástica, él se enoja cuando ella menciona la cirugía plástica.

Albert no podía esperar para limpiar a Ayla, "¿Qué estás tratando de hacer todavía? Hazlo".

El grupo de matones inmediatamente arrastró a Ayla.

"¡Presidente, ayuda!" Ayla estaba irritada por la actitud indiferente de Edrick. En este momento, solo quiero probar su verdadero corazón por ella.

“Presidente, lo admiro mucho. Eres mi ídolo desde niño. Soy muy leal a ti. Déjame. soy muy util Puedo romper las baldosas cuando voy a la casa y puedo vencer al hámster cuando voy al suelo. Marido y mujer, los mejores para calentar la cama...

Las cejas de Edrick se torcieron violentamente.

A otros se les puso la piel de gallina.

Janice sacudió los brazos, "Hermano mayor, ¿cómo puedes soportar a esta mujer tan capaz?"

Después de que los matones de Albert arrastraron a Ayla, Ayla obviamente podía defenderse, pero decidió quedarse quieta. Abrazando su cabeza y poniéndose en cuclillas, miró en secreto a Edrick.

“Espera…”

La voz de Edrick sonó apresuradamente con deliberada moderación.

Ayla saltó de alegría: “Presidente, sé que no moriré”.

Edrick miró su cara de villano, su hermoso rostro estaba oscuro.

Pensó que ella se defendería, pero no esperaba que ella insistiera hasta el final y no tuviera planes de disparar. Sólo para esperar a que él la salvara.

Capítulo 622

La cara de Albert estaba fría. “Edrick. No te arrepentirás, ¿verdad? Por qué, no puedo soportar a esta chica.

Edrick dijo: “Ella es irrespetuosa con papá, papá quiere matar o cortar, y su hijo no obstruirá. Sin embargo, mi hijo también tiene una petición…

Albert, se congelo, "dijo".

“El hijo se llevará a Silvia”.

Albert estaba furioso, "Ni lo pienses".

Edrick levantó la cabeza, “Ella es irrespetuosa con su hijo, y su hijo no tiene motivos para perdonarlo. Es como: papá no tiene motivos para perdonar a mi enfermera”.

La cara de Albert era como una botella volcada de cinco sabores, brillante.