《Que estresante es tener que mudarse》 eso pensaba Valery mientras le decía a las personas de la mudanza donde poner todo.
Apenas hacía unas semanas que se habían graduado de la preparatoria, y ahora se encontraba en Daegu instalándose junto con Suga en la gran casa de él.
Su madre también había venido con ellos, no para vivir ahí, solamente para ayudarlos a instalarse y saber con exactitud dónde y cómo era el lugar donde su hija iba a vivir.
Ella sin ningún problema había aceptado que estuvieran juntos y vivieran juntos después de la graduación. Después de todo ya eran mayores de edad y podían tomar sus propias decisiones.
Suga por su lado estaba igual (incluso más) estresado que la joven. La casa había estado en reparación por un tiempo, y aunque aún le faltaba poco, la decisión de ya vivir ahí era segura.
Con el rostro malhumorado, se encontraba hablando con el arquitecto y sus trabajadores sobre lo que le faltaba a la casa, y es que era una casa verdaderamente inmensa, una mansión mejor dicho, llena de habitación y detalles muy complejos.
Valery desde lejos observó lo molesto que parecía Suga con esos hombres que estaban asiendo todo su esfuerzo, pero así era él, ya estaba más que acostumbrada a su carácter.
— no parece contento —habló la mamá de la muchacha observando al pálido a lo lejos— quizás los trabajadores no están asiendo el trabajo que esperaba
— no mamá, él es así... ya se le pasará, solo necesita alejarse del trabajo un poco
— tal vez si come algo se relaje —mencionó la madre de la joven con una sonrisa— iré en el auto a comprar algo de comida, tú quédate aquí... no me tardo nada.
Valery vio como su madre se daba la vuelta y entraba en el auto para marcharse, luego volvió a girar su cabeza hacia donde estaba Suga y lo encontró ahora sólo, con las manos cruzadas y un rostro frustrado.
La joven no dudo en acercarse, y sin que él se diera cuenta lo abrazó por detrás rodeando sus brazos por la delgada cintura del muchacho. El dio un pequeño salto al sentir a su amada, pero no dijo nada, solo relajo su cuerpo dejándose tocar por ella.
— ¿todo bien? —Le susurró la muchacha por detrás, con una voz suave que lo calmó al instante.
— bien... no te preocupes... me aseguraremos de que todo sea perfecto para ambos
— ya es perfecto Yoongi... no te esfuerces mucho ¿si?
— bien...
Yoongi se giró y sin esperar a que ella dijera algo más la beso. En un beso profundo y apasionada que hizo sentir a la muchacha un cosquilleo dentro, más una corriente eléctrica pasar por todo su cuerpo.
Desde que todos los problemas de Suga habían terminado, su actitud de igual manera lo había echo. Sí, a veces seguía siendo un muchacho bastante malhumorado y serio, pero con ella era todo lo contrario, apasionado, atrevido, pervertido, cariñoso, y muy sonriente. Eso hacía que la joven se enamorara de él cada día más.
Con discreción, mientras la abrazaba, Yoongi metió su mano por debajo de la falda de la muchacha y acarició su trasero con sensualidad. La joven dio un pequeño salto al sentirlo, y trató de alejarse de él sin tener éxito.
— ¿que estas asiendo?... hay gente por todos lado... nos van a ver...
— no me importa... me siento estresado... déjame aunque sea tocarte por favor... o quieres que nos encerremos en una habitación y...
— ¡no! —interrumpió la joven, sintiendo el calor subir a sus mejillas— mi mamá no tratara, dijo que solo iría por algo de comida y volvería
— mmh... ¿no quieres entonces?
— aquí no...
No es como que ella no se hubiera entregado ya a él antes. Incluso lo habían hecho aquella primera noche que habían pasó juntos en el departamento de Yoongi. Y es que haber reprimido sus sentimientos por tanto tiempo los había hecho llegar al límite, no pudiéndose aguantar a sus deseos de tenerse y entregarse hasta lo más profundo.
En todo el tiempo en que Valery había sido novia de Jackson, jamás habían tenido sexo, ni siquiera llegado cerca de eso, pero con Yoongi había sido todo lo contrario, lo rápido que lo había hecho aún le sorprendía, pero valla que no se arrepentía de nada, incluso era ella quien a veces lo provocaba. La vida sexual que compartían era demaciado activa, así como había demaciado amor entre ambos, también habia demaciado contacto físico.
Yoongi le regaló una mirada profunda y seria a la joven luego de escuchar su respuesta. Sabia que ella también lo deseaba, ya la conocía, pero toda esa gente a su alrededor les estorbaba. Ahora estaba mucho más molesto que antes.
— recibirás tu castigo cuando estemos solos pequeña —le señaló el pálido con una mirada penetrante. Ella como si nada le sonrió y lo abrazó por el cuello, susurrandole su respuesta.
— no puedo estar más ansiosa por eso...
Y fue entonces que Suga explotó. Estaba tratando de contenerse, pero la manera en la que ella le había respondido lo hizo perder la razón.
De manera ágil, tomó a su amada de la cintura y la cargó en su hombro como saco de papas, de esa manera la llevó hasta el interior de la casa, encerrándose en una de las tantas habitaciones que tenía.
— Yoon... no —le señaló la joven, pero él la ignoro— te dije que ahorita no
— tú te lo buscaste, así que no te quejes...
Cuando el pelimenta se aseguró que la puerta estuviera bien cerrada, bajo a la joven y la acorraló contra la pared para besarla apasionadamente en los labios.
Ella le correspondió, olvidándose de toda la gente que se encontraba afuera de ellos. Su mente decía no, pero todo su cuerpo sí, y eso ganaba por mucho.
Sin perder el tiempo, Suga volvió a meter la mano por debajo de la falda de la joven, comenzando a tocarla en esa zona sensible que tanto le gustaba, y con su otras mano descubrió uno de sus pechos para comenzar a jugar con él entre su boca. Ambos estaban perdidos en la pasión de sus besos y sus caricias deseando más y más a cada segundo, pero ese momento no duró mucho, ya que el sonido de la puerta los interrumpió.
Valery enseguida reaccionó y trató de alejarse, pero Yoongi aún estaba perdido en la excitación.
— Yoon... están... tocando la puerta —habló la joven con la voz entre cortada, sintiendo los labios de Yoongi devorar su cuello, ignorandola completamente— Yoongi... por favor... puede ser mi mamá
Con algo de molestia y frustración, el muchacho dejó de tocarla y besarla. Le ayudo a acomodarse la ropa y dejando un último beso en su frente se alejó de ella con un suspiro profundo.
— tienes razón... este no es el momento —el joven le dio un corto beso en los labios a la muchacha y luego continuó— esperare a que estemos solos
Suga se acercó a la puerta para abrirla, notando a uno de los muchos hombres que estaban trabajando en la inmensa casa. Con una mirada seria el pálido lo observó sin decir nada, solamente esperando a que hablase.
— hay unos jóvenes en la entrada buscándolo, no los deje entrar sin avisarle así como me lo pidió joven Min —mencionó el hombre sin más. Suga seguía mirándolo con seriedad.
— de acuerdo... iré a ahora mismo
Y así lo hizo, el muchacho de cabellos mentolados se dirijio hasta las rejas de la casa, notando a todos sus amigos del otro lado de estas. Al parecer todos habían llegado a Daegu para ver como iba el avance de la casa, la cual estaba ya casi terminada.
— ¡¡¡¡Suga!!!!... —gritó su escandaloso amigo de sonrisa cuadrada por el otro lado de las rejas, mostrando su emoción por verlo luego de casi tres semanas.
— gracias por venir hasta acá —les señaló el pálido dejandolos entrar, se sentía contento por verlos de nuevo.
— Woo!!!... esta casa en más grande que la mía, incluso más grande la de Namjoon —señalo Jin viendo la enorme mansión de arriba abajo, notando lo hermosa que era— Valery se sentirá muy contenta en esta casa tan bonita
— por cierto ¿dónde está Val? —Preguntó el castaño esperando una respuesta por parte de Suga, pero antes de que hablase, la silueta de la joven a lo lejos dio la respuesta.
— ¡ey!... ¡¡muchachos!!... ¡que gusto me da verlos! —Gritó la joven acercándose a ellos con emoción.
Taehyung no espero y corrió hasta ella para abrazarla con fuerza. La extrañaba mucho, le hacía mucha falta, sin su mejor amiga las cosas no eran igual.
— te e extrañado mucho Valery...
— y yo a ti Tae —le señaló ella correspondiendo el abrazo de la misma manera. Ella también lo extrañaba demaciado.
Suga por su lado, se quedó observando la escena desde su lugar, tratando de controlar esos celos que desde siempre le tenía a Taehyung. Claro que entendía que la relación de ellos jamás iba a cambiar, eran mejores amigos, se había criado prácticamente como hermanos, pero eso no cambiaba el hecho de que sintiera celos cada que la abrazaba o tenían algún tipo de cercanía, por supuesto que siempre lo ocultaba para no parecer un loco manipulador posesivo.
— en el camino vimos a la madre de Valery, dijo que nos traería comida —habló Hoseok al notar que Suga no hacía más que ver la emotiva escena de Valery y Taehyung felices. Al escucharlo el pálido se giró y lo observó.
— si... mejor entremos a la casa a esperarla
Todos siguieron las órdenes del pelimenta y entraron a la casa.
Para asegurarse de que Valery se mantendría a su lado, él pálido la tomó de la mano y caminó junto con ella sin soltarse ni un segundo.
— ¿se quedarán por unos días? —Preguntó la muchacha cuando todos se encontraban reunidos en la enorme cocina.
— si —respondió Jungkook con una sonrisa— es lo que planeamos
— no sabemos hasta cuándo podremos volver a venir —continuó Jimin— será difícil reunirnos de ahora en adelante
Y así iba a ser. Su vida de adultos iba comenzando, algunos tenían planeado continuar con sus estudios en otros lugares del país, incluso fuera éste. Sus caminos iba a tomar rumbos completamente distintos, y sí, iba a ser sumamente difícil que volvieran a reunirse, pero eso no indicaba que su amistad se iba a perder. Obviamente intentarían mantener el contacto de alguna u otra manera. Ni la distancia, ni sus diferencias los iba a separar nunca. Eran una familia.
— organicemos una parrillada nocturna —sugirió Jin con emoción— y mañana nos podemos ir a un viaje de pesca todos juntos, estamos cerca de ulsan, podemos ir en auto al muelle, rentar un bote y pasar todo el día en el mar
— solo lo dices porque a ti te gusta pescar —le señaló Jimin haciendo mala cara.
— a mi me parece una muy bonita idea —habló la joven. Nunca había ido de pesca y le sonaba emocionante— si nadie quiere ir, yo te acompaño Jin
— yo también voy —continuó Yoongi. El iría a cualquier lugar donde fuera su amada— me gusta pescar
Por debajo de la mesa, el muchacho acarició una de las piernas de la rubia para llamar su atención. Ella saltó un poco al sentirlo, y al dirigir su mirada hacia él, se dio cuenta que sólo lo había dicho para no dejarla ir sola con Jin. Valery solamente le respondió con una sonrisa y le tomó la mano con fuerza. Ya estaba acostumbra a esa actitud posesiva que a veces solía tener el pálido.
Después de rato la madre de la rubia llegó con comida para todos y la escena se volvió mucho más familiar. Al final todos aceptaron ir al viaje de pesca, excepto la madre de Valery, ya que ella tenía que volver a Seúl a la mañana siguiente, pero estaba contenta de poder ayudarlos en la parrillada nocturna que iba a tener.
Todo iba muy bien, carne, cerveza, soju, vegetales y muchas más comida en abundancia estaba siendo cocinada cuando llego la noche. Era una escena bastante bonita. J-Hope y Jungkook habían colocado una carpa en el patio con una hilera de luces que iluminaba todo el lugar. La madre de Valery junto con Taehyung estaba cocinando la carne en una pequeña parrilla, mientras que Jin costaba los vegetales y ayudaba a preparar algunas otras cosas más, ya que el era bueno en eso. Jimin y Namjoon aprovechaban el hermoso jardín lleno de flores y la magnífica noche para tomarse fotos. Valery de igual manera ayudaba a su mamá y a Taehyung, por lo que Yoongi se encontraba sentado en una de las sillas viéndolos atentamente con demasiados celos.
No entendía porque le pasaba eso ahora. Antes no solía ser así, le daba lo mismo si ella se la pasaba con Taehyung todo el día, si él se sentaba al lado de ella, o si simplemente la abrazaba, pero ahora era todo lo contrario, detestaba que su cercanía y su amistad de años, y el hecho que Taehyung se llevara tan bien con la madre de ella también le resultaba molesto, pues Suga aún no lograba poder acercarse mucho a la familia de Valery.
Y no, no odiaba a Taehyung, y tampoco desconfiaba de él o de Valery, simplemente le daba un poco de envidia e impotencia como ellos dos se llevaban demaciado bien, incluyendo sus familias.
Mientras cocinaba, la rubia dirigió su mirada hacia su pálido novio notando lo serio que estaba. Algo le molestaba, y ella lo conocía tan bien que sabía de que se trataba. Dejando lo que estaba asiendo, se acercó hasta el pelimenta y se sentó sobre sus piernas repentinamente.
El joven abrió las ojos hasta el tope al sentir a la joven sobre suyo, con un rostro de sorpresa reflejado en su rostro.
— ¿qué haces? —Indagó él. La cercanía de la muchacha era demaciada. Y no es que le molestara, al contrario, le gustaba, pero que hubiera tantas personas a su alrededor le incomodaba.
— solo quiero que todos sepan que somos pareja —le respondió ella, rodeando sus brazos por los hombros del muchacho— que te amo a ti y solo a ti, y que tu compañía es la que más prefiero de todas
— ¿lo dices porque...?
— por si tenías dudas... si no está claro te besare aquí sin importar que nos vean todos
Yoongi sonrió con deseo y solamente la tomó fuerte la cintura y la apegó lo más que pudo a su cuerpo. Valery se quedó completamente sorprendida, pues él no solía mostrar sus sentimientos frente a los demás, ni ser cariñoso, pero esta vez lo estaba asiendo.
— hazlo entonces... no tengo dudas pero quiero que me beses...
Las mejillas de la muchacha se tornaron totalmente Rojas al escuchar a su pálido amado, y aún más cuando notó la mirada de varios de sus amigos sobre ellos, asiendoles señas poco educadas y para nada inocentes.
— y si mejor... —comenzó hablar la joven con una voz demaciado baja, a tal punto que solo ella y Suga escuchaban— lo dejamos para cuando estemos solos... esta noche no tengo mucho sueño...
— mmh... bien... entonces me asegurare de dejarles a los muchachos las habitaciones más alejadas de la nuestra... así no los despertarás cuando grites mi nombre...
— eres un pervertido ¿lo sabias? —Indagó la joven con una sonrisa. Yoongi la apegó más a su cuerpo, escondió su cara entre el cuello de la joven.
— si —respondió con una ronca y profunda voz, rosando sus labios en la piel de la muchacha— un pervertido que te ama con todo su ser