Capítulo 71 (corregido)

El Charibdys aterrizó justo frente a ellos, con su mandíbula abierta y su lengua babeando.
 —¡A...llen!
Titán fue el primero que atacó al Charibdys, usando sus puños. Del cuerpo de Titán salía humo blanco mientras que su piel estaba roja y emanaba un inmenso calor, derritiendo el asfalto que pisaba mientras tomaba su Forma Gigante..
 —¡Di otra cosa bicho raro!
El puñetazo que le dio Titán al Charibdys le giró la parte superior del cuerpo 180 grados. Al ver la sangre negra que salía de su cuerpo, Titán vio como el Charibdys desaparecía, reapareciendo a unos metros de distancia.
Titán chasqueó la lengua y volvió a correr hacia el Charibdys con su puño cerrado. Sin embargo, el estómago del Charibdys se abrió, tomando una altura total de tres metros y la boca que había en su estómago se hizo lo suficientemente grande como para devorar a Titán.
Tim detuvo a Titán con sus hilos mientras que Shinobi formaba en toda la ciudad un bosque hecho de electricidad y Sombra se volvía intangible, fundiéndose con su propia sombra.
 —¡Etapa Especial Dos, Hoja Chispeante del Ronin!
Shinobi envolvió su ninjato en electricidad, dándole forma de katana, y saltó hacia el Charibdys, cortándole el brazo izquierdo.
En ese momento, Megan se fundió en agua y se movió hacia el Charibdys, apareciendo detrás de él y sujetando su brazo derecho.
 —Abrazo de Lorelei.
Megan junto al Charibdys se congelaron en un enorme bloque de hielo. Tim dejó de retener a Titán y lo impulsó uniendo hilos entre Titán y el Charibdys.
 —¡Puño del León de Nemea Propulsado!
Titán golpeó con toda su fuerza el bloque de hielo, rompiéndolo en miles de trozos.
Megan disolvió el hielo y volvió a tener forma humana, sin embargo, no había rastros de los trozos del Charibdys.
 —¡Estás de coña! ¡Es imposible que sobreviva a eso!
 —Os lo estoy diciendo, no se puede matar al Charibdys.
 —¡Dilo de nuevo traidor asqueroso y cumpliré yo mismo con tu sentencia!
Allen escuchaba a Titán discutir con Serval mientras sus ojos miraban a Shinobi respirar irregularmente, obviamente, mantener dos de sus técnicas le estaba pasando factura. Luego miró a Leid, que con sus ojos miraba a todas partes, Vicky y Helen que estaban apoyadas una contra la otra, Megan que respiraba por la boca expulsando el frío de su cuerpo, Tim usaba los hilos de sus dedos explorando el área, y Sombra viajaba entre los puntos ciegos de cada uno buscando al Charibdys.
 —Algo se me escapa... si me quiere muerto... entonces ¿dónde es el único sitio que nuestras vistas no pueden alcanzar?
Al hacer esa pregunta, Allen llegó a dos conclusiones. Una de ellas es que podía estar en el cielo, y la otra bajo tierra, al pensar que podía estar bajo tierra su rostro se volvió blanco.
Fue en ese momento que el Charibdys atravesó la tierra y golpeó a Allen en el mentón.
 —¡¡¡A...llen!!!
De los labios de Allen salió un hilo de sangre antes de que pudiera agarrar su otro brazo y girar sobre sí mismo, lanzándolo un par de metros de distancia. Ahora Allen pudo crear un tridente y un florete en sus manos y se lanzó contra el Charibdys.
El tridente lo clavó sobre su cuello, mientras que el florete perforó el lugar donde se encontraba Allen creía que se encontraba su corazón. El Charibdys hizo lo mismo, desapareció dejando un mal sabor de boca en Allen.
 —Esa cosa tiene que tener un punto débil.
 —No tiene ninguno Megan.
Al escuchar la protesta de Serval, Leid que había visto como atravesaba Allen el pecho del Charibdys con su florete sonrió al ver a Allen tranquilo pese al hecho de que volvería a aparecer.
Allen miró a Leid y señaló su cabeza, sonriendo.
 —Serval, si no tiene un punto débil, entonces los genes evolutivos en mi sangre buscarán la manera de que lo tenga. Solo dame tiempo.
Al escuchar a Allen, Serval se calló y miró al suelo, había olvidado por completo que Allen había usado el gen evolutivo del Umbralux para modificar toda su estructura genética.
 —Leid, si nos basamos en la categorización de monstruos actual. ¿En qué categoría estaría el Charibdys Temporalis?
Leid pensó unos momentos y respondió a Allen.
 —Debido al hecho de que tiene solo dos habilidades sería un categoría 2. Sin embargo, debido a que los monstruos con más de una habilidad son mutaciones creadas por el miasma que emerge de la grieta dimensional hacia el mundo negativo y su poder se reduce enormemente, diría que el Charibdys Temporalis es una categoría 7, o incluso una categoría 8 en el peor de los casos.
Allen pensó unos segundos y miró a Leid.
 —¿Y si el Charibdys no hubiera sido afectado por el miasma?
 —Entonces eso lo convertiría en un categoría 9, o en otras palabras, un monstruo capaz de destruir planetas.
Al escuchar las palabras de Leid, todos se callaron. Incluso Shinobi miró a Allen con sus ojos estupefactos.
 —¿Estamos enfrentando a un monstruo capaz de borrar el planeta de la existencia?
 —Correcto Shinobi. Leid explicará después los detalles de la nueva categorización de monstruos.
Que Allen hablara con tanta confianza sobre lo que harían una vez vencieran al Charibdys, un monstruo que podría destruir la Tierra, relajó en gran medida el peso que sentían al enfrentarse contra un categoría 9.
En ese momento, una idea brilló en la mente de Allen e hizo aparecer el florete en sus manos.
Allen fijó sus ojos en el broche situado en el mango del florete y sonrió. 
Justo cuando iba a tocar el broche, el Charibdys apareció detrás de Allen, golpeándolo en la nuca y enviándolo hacia un edificio.
 —¡A...llen... de...bes... mo...rir!
El Charibdys, al no escuchar la voz de Allen, miró al resto de héroes con una sonrisa en su vientre reluciendo sus afiliados dientes.
 —¡Lo... ma...té!
Shinobi, Titán, Sombra, todos estaban estupefactos por la repentina aparición del Charibdys y el golpe que le dió a Allen, a excepción de uno, Serval, que miraba al Charibdys indiferentemente.