Cadenas de oro

Capitulo 14

Después de una rápida despedida con sus “amigos” se dedicaron a comer. Erek y Víctor ayudaron al pelirrojo a sentarse en el suelo, mientras Killari servía la comida, le dio los platos hechos de madera a cada uno junto con una cuchara del mismo material, sin duda, Jasón pareció sorprendido ante eso, jamás había comido con objetos tan poco lujosos, además era una comida bastante simple, una sopa con apenas una pieza de pollo y un vaso de agua, ¿Donde estaba toda la vajilla? ¿Y el resto de la comida? Miro a los demás comiendo bastante satisfechos la comida.

—Vaya, en verdad has mejorado mucho en cocinar…Collete—Al pelinegro aun se le hacía completamente extraño hablarle así a su amiga.

—Gracias cariño—La morena parecía orgullosa de su hazaña.

—Señor en verdad tendría que haber visto sus primeras comidas, siempre quemaba todo—Erek parecía feliz de tener alguien más con quien hablar.

— ¿Es así?—Probó un bocado de la comida, si bien no era la mejor que había probado en su vida tampoco era tan terrible.

—En serio ¿Verdad?—Miro al rubio, quien solo asintió de acuerdo—Por cierto, ¿Cuál es su nombre?

—Yo soy Jasón, y tú ¿Cómo te llamas?

—Erek, es un placer conocerlo.

—Es un niño muy educado, debería estar orgullosa—Miro a la morena quien solo asintió algo incómoda, luego el ojiazul miró al rubio— ¿Y tu niño?

—Tristán—No dijo nada más y siguió comiendo.

—Un hombre de pocas palabras, entiendo—Jasón sonrío—Entonces ¿De verdad van por todo el reino vendiendo sus remedios?—Todos asintieron—Eso es genial, ¿Por qué lo hacen?

—No teníamos para comer y a mi esposo se le ocurrió la idea de vender mis remedios caseros, prosperamos un poco y decidimos ayudar a otros pueblos, por eso empezamos con nuestro viaje, así conocimos a Erek y Tristán.

—Entonces la gente no se confunde al llamarlos Ángeles, aunque solo hablan de 3 de ustedes—Fingía no entender eso.

—Alex prefiere hacer otros trabajos cuando llegamos a algunos pueblos, la gente solo habla con nosotros 3—Víctor habló sereno— ¿Cómo se lastimó?

—Estaba cazando.

—Entiendo, muchos hombres salen a cazar para alimentar a sus familias, la economía del reino ha ido de mal en peor—Dejó el plato de madera sobre el piso— Cada pueblo que visitamos tiene hambre—El rubio no se sentía culpable por lo que decía.

—Es verdad, mucha gente pasa hambre y tiene necesidades—Erek estaba completamente de acuerdo— ¿Pero qué hace el Rey por ellos? Nada, en el reino vecino cuando pasaron por la gran sequía, los reyes dieron comida y ayuda para su pueblo. Aquí tenemos hambre y además debemos pagar impuestos, los precios suben pero los nobles siguen con su vida como si nada—En verdad estaba molesto, antes vivía en un mundo pequeño donde solo eran su abuelo y él, después de su pérdida, logro ver la realidad, la gente tenía hambre, estaban enfermos, los robos ocurrían como pan de cada día, esa realidad lo sorprendió pero tenía que aprender a vivir en ella y tal vez hacer un pequeño cambio con sus acciones—¿Señor Jasón usted qué opina?.

—Em. yo—El pelinegro lo miraba ansioso esperando su respuesta mientras que el rubio lo miraba con burla.

—Niños ya basta, no molesten al joven—Tomó los platos de cada uno—Mejor prepárense, V-Tristán, me ayudaras a hacer algunos encargos y Erek tu puedes descansar, has hecho mucho hoy.

— ¿Por qué él puede descansar? Debería empezar a aprender a hacer las recetas.

—Es porque soy su favorito.

— ¡Eso es mentira! ¿Verdad?—El rubio parecía algo frustrado.

—Es suficiente, vamos a hacer las cosas.

El pelirrojo por un momento dudo, en verdad parecían una familia de verdad, es como si en cualquier momento aquel supuesto esposo apareciese y la familia quedaría completa, pero no, eso era imposible, podía recordar claramente la voz de la chica y el retrato de su hermana junto con la imagen que recordaba eran igual a esta mujer. Ella estaba fingiendo porque los seguía un caza recompensas sabía todo eso, por eso decidió seguirle el juego por el momento.

La tarde pasó lentamente, Erek estuvo la mayor parte del tiempo a su lado, hablando de todo y nada, a veces se iba para atender a algún cliente pero luego volvía, desde donde estaban sentados se podía ver claramente a la morena y al rubio trabajando, la chica llevaba el pelo levantado en un rodete, del cual caían algunos mechones, Jacob solo podía pensar que se veía como una amapola, dejando ver todo su resplandor por la mañana pero por la noche cerraba sus pétalos, casi como su personalidad. Por ratos podía ver las miradas molestas del rubio dirigidas a él.

—Creo que no le agrado a tu amigo—Le susurro a Erek.

—A él no le agrada nadie que se acerque a Collete—No le tomo importancia era normal verlo así cuando alguien no le agradaba—Nosotros la apreciamos mucho, ha sido una madre para nosotros, por eso él la cuida tanto, aunque deberías ver las cantidades de propuestas de matrimonio que tiene—Lo que contó era una verdad y mentira al mismo tiempo, para él Killari era la figura materna más cercana que tuvo, sus padres murieron por una gripe cuando él aún era un bebe.

—Tiene muchos pretendientes entonces, y ¿A su esposo no se molesta?—El más joven parecía ser el que menos entendía sobre todo este acto, así que intentaría sacarle información.

—Muchos es poco, las señoras de todos los pueblos donde vamos la buscan para que se case con sus hijos, es decir, ella es hermosa, ¿A quién no le gustaría?—Hizo un cuadrado con sus manos, enmarcando la figura de la pelinegra—No lo sé, pero los dos se ven felices juntos y a él parece no molestarle—Sin querer lentamente cambió su vista al rubio, cuando se dio cuenta de eso volvió su vista al chico mayor—Lo que intento decir es, no te metas con ella—Dijo esas últimas palabras para volver a irse junto con una gran sonrisa para recibir a una mujer algo mayor

Su plan no había funcionado pero al menos tenía una hermosa vista de la morena, claro, hasta que el rubio se interpuso en su camino. La noche se estaba por hacer presente, y tanto Killari como Víctor habían terminado de preparar todos los encargos, la noche era algo calurosa, los pájaros habían dejado de cantar hace algunas horas, las 4 personas estaban en un silencio un poco incomodo, habían comido hace al menos 2 horas, pero aun no se iban a dormir, comúnmente hacían cosas hasta tarde, y se turnaban para hacer guardia.




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