INSERTIDUMBRE

Afuera el viento era helado pero Sasuke no prestaba atención a eso ya que su mente estaba impregnada con la imagen de Naruto muerto y él a su lado luchando por no perder la cordura. Aquello era ilógico y no le prestaría atención de no ser por ese terrible sentimiento de vacío que partía su alma en dos.

Eso y los enigmáticos poderes que empezaron a aparecer en su persona de la nada. Desconocía esas habilidades pero sentía lo poderosas que eran. ¿Qué debia hacer? ¿Buscar a Naruto o a Itachi? Su sed de venganza le llevó a la segunda opción pero ese hueco en su pecho se agigantó resultandole insoportable. Repentinamente sus fuerzas desaparecieron y cayó de rodillas al suelo respirando entrecortado. Se sujetó su pecho en un inútil intento por evitar el dolor.

- Naruto - murmuró como un lamento. Cerró sus ojos y volvió a verlo muerto. De la impotencia golpeó el suelo abriendo sus ojos. Aquello ¿Sería el futuro? Una misteriosa voz retumbó en su mente :

"Cambia el destino de Naruto o no tendrás futuro. Tú estás unido a él por un lazo mucho más fuerte y sólido que la sangre"

-¿Quién...eres?
Pero nadie respondió. No sabía nada, solo.actuaba por instinto. La furia lo invadió ya que él nuevamente se interponía en su venganza. Qué molestia resultó ser en verdad. Pero esa furia desapareció velozmente para que el vacío y ese intenso dolor regresasen. Los sentimientos suelen ser ilógicos e irracionales ya que carecen de toda explicación. Había momentos en los que se debía dejar llevar por ellos dejando de lado la mente racional. Pero qué complicado resultaba esto para quien se hubo dejado llevar por la razón intentando enterrar todos sus sentimientos. El viento era tan helado como su oscura confusión.

Estaba en una tormenta de la cual no podía escapar. 
No podía ignorar a Itachi así de simple. Directamente no podía ya que si lo hacía ¿Para qué había abandonado Konoha dándole la espalda a todos? ¿De qué sirvió haber entrenado tanto con Orochimaru si lo dejaría todo? Volvía a mirar el sol tatuado de su palma derecha sintiendo que le quemaba y a su vez lo llamaba.

Las palabras de esa voz retumbaron en su mente otra vez: "Cambia el destino de Naruto o no tendrás futuro".

Cerró la mano con tanta fuerza que le sangró. La furia volvía a nacer en él equilibrando la balanza. Demasiado molesto era ese sentimiento de vacío intenso en su alma. ¿Por qué había aparecido tan de repente? ¿Por qué todo lo que respecta a su persona tenía que afectarlo a él? Era su vida, su venganza ¿O no? ¿Por qué entonces...sentía que se estaba equivocando estrepitosamente?

- Naruto - volvió a susurrar colocándose de pie. Empezó a caminar alejándose de allí pero sin rumbo fijo en su mente. Ya no sabía qué hacer ni en qué creer. Si seguía su objetivo inicial sentía que estaba tomando la peor de las decisiones llevando a una muerte segura a Naruto, echo que subditamente lo afectaba más que cualquier otra cosa en este mundo. Pero si desistía de su objetivo inicial sentía que esos años junto a Orochimaru fueron en vano. Además... ¿Ignoraría a todo su clan que fue exterminado cuando todo éste tiempo solo quiso vengarlo y hacerlo resurgir?

No podía darle la espalda a ninguna de las dos cosas. Era lo único que tenía en claro. Debia encontrarse con Itachi y arreglar lo que tenía pendiente con él pero a su vez tenía que buscar a Naruto y...Se miró la mano derecha una vez más. Debía devolverle su poder. Ya no se preguntaba de dónde saco aquella respuesta, solo lo sabía. Empezó a apurar el paso hasta correr por el bosque saltando de rama en rama. En ese caso iría primero por Naruto y luego se lo llevaría con él para que lo ayudara a buscar a Itachi. 
- Naruto - un nuevo e intenso sentimiento nacía en su ser, un sentimiento que lo descolocaba al punto de confundirlo más de lo que ya estaba. - Cambiaré tu maldito destino y tú me ayudarás a cambiar el mío. Tsk, siempre causas problemas ¿Eh?

EN OTRO SECTOR DEL BOSQUE

Dos figuras con túnicas y capuchas rojas estaban caminando por entre el bosque como si buscasen algo o a alguien. Uno media un 1,60m y era delgado. El otro media 1,80m y era un poco más relleno. Se podía divisar bajo la túnica que tenía desarrollado sus músculos. No sé les veía el rostro, tenían un andar cansino como si dispusieran de todo el tiempo necesario.

Repentinamente se detuvieron y el de baja estatura tras acuclillarse colocó su mano derecha en el suelo durante un par de minutos antes de decir:
- Está lejos pero se puso en marcha - su voz carecía se emoción alguna. - ¿Lo seguimos? 
- No, aún no. Dejemos que se prepare y crea que tiene algun tipo de ventaja. 
- Como prefieras ¿Qué planes tienes entonces? 
- Indaguemos más este lugar. Parece interesante 
El que estaba acuclillado se incorporó y ambos siguieron caminando alejándose del bosque.

EN LA DIMENSIÓN SIN TIEMPO NI ESPACIO

Naruto vagaba en aquella solitaria, lúgubre y fría dimensión sintiendo intensos dolores como si estuviese quemándose vivo al tiempo que un millar de agujas perforasen su cuerpo que ya no existía. No podía contemplarse así mismo siquiera. Frío intenso y dolorosa oscuridad era lo único que sentía allí. Peor que cualquier experiencia vivida. Kurama estaba con él, podía sentirlo pero no verlo ni oírlo.

¿Cuánto tiempo había estado allí? No le sabía. ¿Acabaría aquel martirio? Por supuesto. Sasuke se había comprometido a ayudarlo a cambiar su horroroso destino. Pero...empezaba a desesperarse por los dolores y el frío congelante del lugar. Temía que si seguía allí más tiempo enloquecería. No podía escapar ni evitar sentir esos dolores.

- Ayúdame...Sasuke

En ese preciso instante Sasuke se detuvo en una de las ramas de un árbol. Había escuchado la voz de Naruto con toda claridad pidiéndole ayuda. Miró hacia todas direcciones pero no lo encontró. Obviamente no estaba allí, él mejor que nadie sabía que estaba lejos pero...entonces ¿Qué fue eso?