La noticia de que Danzou había sido nombrado Hokage provisorio por el señor feudal hasta que la Quinta despierte se hubo propagado por toda la aldea causando diversas reacciones pero en su mayoría preocupación ya que no era aceptado por nadie. Itachi se limitó a sonreír al enterarse de ello ya que no le preocupaba Danzou. Sabía que si pasaba los límites lo mataría y ésta certeza el mismo Danzou la tenía muy clara.
Pero a Sasuke aquello le cayó como un millar de agujas sobre su piel, nada habría sido más destructivo que el hecho de que ese tipo sea el nuevo Hokage. En ese caso había dos opciones según podía ver: matarlo con sus propias manos y aceptar el echo de ser considerado un asesino a los ojos de todos los aldeanos echando así por tierra todo el esfuerzo que hizo hasta el momento para ser aceptado nuevamente o....
- Irme definitivamente de aquí - murmuró aquella fría tarde de invierno apoyado en los tablones de madera. Su expresión causaba cierto temor alejando a los demás de su persona. Cruzado de brazos clavaba sus afiliadas uñas en sus brazos de la furia que sentía. - No veo otra opción, después de todo seré rechazado por los aldeanos. -
Vió a Naruto llevando bebidas a los trabajadores que ayudaban con la reconstrucción de la aldea. Y más allá al Capitán Yamato emplear su poder de la madera para crear en menos de dos minutos cincuenta casas y diez edificios ante la asombrada mirada de varios que aplaudían felices aquel espectáculo pero el Capitán Yamato quedó sin una gota de chakra al segundo siguiente.
Sasuke respiró hondo y se fue de allí, todos en verdad se estaban esforzando por reconstruir la aldea, todos menos el actual y provisorio Hokage junto a ese grupo de viejos. Pero eran quienes disponían de la vida de los demás y eso él no podía soportarlo. Definitivamente no era como Itachi que no lo perturbaba. En esos momentos sabía que Danzou se había ido en representación de la aldea a la reunión de los cinco Kages por el tema de Akatsuki que era sabido no podían ignorar.
El viento sopló con un frío casi sobrenatural sobre la aldea y en especial sobre el ninja emo quien empezaba a sentir que debía masacrar a Danzou y al consejo de Konoha con sus propias manos. Ellos odiaban a los Uchiha y si bien sus padres como el resto del clan, a excepción de su hermano y él, quisieron hacer un golpe de estado provocando muerte y dolor a todos los aldeanos inocentes no por eso debería permitirles pisotear la dignidad de su hermano y la suya avivando rencores del pasado. El consejo miraba a los Uchiha con profundo desprecio y Danzou con intenso deseos de poder controlarlos, tanto a ellos como al Kyuubi. Por tal razón ni siquera Naruto estaba a salvó con semejante Hokage.
El problema principal era él, Naruto, que no lo tomaría a bien cualquiera sea su decisión y por supuesto no aceptaría ir con él ni proponiendoselo. Pero no podría dejarlo, ya lo hizo una vez y fue el peor de sus errores. Ya conocía la reacción de él, no podía hacerle eso por segunda vez..lo mataría...en verdad en esta ocasión él... moriría. Sasuke miró las oscuras nubes agolparse en el cielo oliendo el aire a tierra mojada. La desesperación amenazó con asfixiarlo, necesitaba desahogarse. Se aproximaba una tormenta eléctrica, perfecto. Con la oscuridad reflejándose en su mirada llamó al rayo que comenzó a circular por todo su cuerpo.
Repentinamente saltó por varios edificios y casas en plena construcción sorprendiendo a los trabajadores hasta llegar a la montaña de los rostros donde sacó su espada y apuntando al cielo lanzó el más poderoso de sus ataques rugiendo:
- ¡Chidori! - el sonido de un millar de pájaros se oyó por toda la aldea seguido de potentes rayos que se elevaron varios metros hacia arriba. Luego clavó la espada en la tierra y extendió los brazos hacia ambos costados justo a tiempo para recibir el poderoso rayo que cayó segundos antes de que la tormenta se desate.
Los aldeanos vieron aquello horrorizados sin lograr comprender qué le pasaba a Sasuke o por qué hizo aquello. Itachi frunció el ceño al ver aquel espectáculo que su hermano estaba haciendo ya que sabía de qué iba y en verdad le preocupaba Sasuke.
- ¿Qué sucede con él? - le preguntó Kakashi
- No acepta a Danzou como Hokage ni al consejo. Está turbado
- Vaya problema - comentó Kakashi.
Naruto al ver aquello se preocupó al extremo de empalidecer y gritar:
- ¡Sasuke!
Sin preguntar nada ni aguardar a nadie corrió a él saltando entre las construcciones así llegó segundos después de que Sasuke recibiera el rayo de la tormenta. Al estar lo suficientemente cerca pudo ver su rostro con la máscara del odio.
- Sasuke - él podía sentir su dolor
- ¡Alejate Naruto! - le espetó - No es seguro para ti ni para nadie estar cerca de mí en estos momentos.
Naruto sentía su dolor, veía detrás de su máscara su tristeza. Los rayos envolvian al ninja emo como pequeñas serpientes danzando en todo su cuerpo. Con su mano derecha acumuló chakra reuniendo allí la mayor cantidad de rayos.
- ¿Qué pasa Sasuke? ¡Dime!
- Mataré a Danzou - le dijo - Ya lo decidí
- ¡¿Qué?! ¡¿Estás loco?!
- ¡No aceptaré que sea el nuevo Hokage esa basura! Además es un peligro no solo para mi hermano y para mí...
-¡Sasuke!
- ¡También es un peligro para ti! ¡Él va tras de tí también!
- ¡Reacciona Sasuke!
- ¡Está ciego de poder esa basura!
- ¡Y tú estás ciego de deseo de venganza! Sasuke...¿Acaso ya lo olvidaste?
- Naruto, tú vendrás conmigo a donde sea que yo vaya. Nunca te dejaré. Así que ambos mataremos a esa basura
- No...lo lamento pero no te seguiré en esto ¡Pero tampoco permitiré que hagas tamaña locura! ¡¿Acaso lo olvidaste?! ¡Ya transitaste ese camino! ¡Sasuke recuerdalo!
Tanto el ninja emo como Itachi, Kakashi, Sakura y Neji que habían llegado hasta ese lugar oyeron eso último. Sasuke miró desconcertado a Naruto porque en esos momentos en verdad no recordaba nada de nada, tenía la mente en blanco total. El dolor de su alma amenazaba con devorarlo pero la presencia de Naruto lo mantenia en pie, igual el Chidori estaba peligrosamente cerca de estallar encima de cualquiera en cuestión de minutos.