LA CUARTA GRAN GUERRA (I)

Los días fueron pasando sin ser sentidos por Naruto ni Sasuke debido al intenso entrenamiento de ambos.

Bee se hubo sorprendido al ver que el ninja de la hoja controlaba a la perfección al nueve colas como él lo hacía.  Pero pronto supo la verdad.

Su asombro fue inmenso al comprender que ellos venían del futuro. De pronto se sintió inútil porque no imaginaba qué podría enseñarle él a alguien que ya lo sabía todo.

No obstante Naruto le hizo comprender que no lo sabía todo. Por tal razón lo necesitaba.

Aún tenía que entrenar con Kurama quien se encontraba un poco confundido. Era él quien debía aclarar las ideas.

A medida que el entrenamiento avanzaba, también lo hacía la memoria del Kyuubi quien, a diferencia de Naruto, éste sí recordaba todo lo sucedido en la vida anterior.

Hasta la muerte del mismo Naruto y su estadía en la dimensión oscura junto a su persona.

Kurama recordó haberse comprometido a no separarse de ese humano que había llegado a querer como a un hijo.

Cuando pudo recordarlo todo, le enseñó las nuevas técnicas para poder ser mucho más fuerte y ganar la guerra en ésta ocasión con mayor facilidad.

Entrenaron juntos enfrentandose a Bee y al ocho colas sin problemas. El destello dorado envolvía a Naruto haciendolo mucho más fuerte.

Luego de eso, se hubo enfrentado a Sasuke ayudando al emo a fortalecerse también.

Además entre él y Bee colaboraron para que Sasuke desarrolle el poder de su ojo violeta con mayor facilidad.

Cuando ambos sintieron que estaban listos recién salieron del recinto. Bee sabía que no podrían retener a Naruto allí por más tiempo debido al echo de que provenía del futuro.

Por supuesto que antes de salir Bee le preguntó cómo acabaría todo, a lo que el ninja rubio le respondió con una sonrisa que ellos ganaban la guerra con muchisimas bajas. Pero que él, Naruto, moría en ella.

—No te preocupes Bee — prosiguió al ver el asombro y la tristeza — Con Sasuke fuimos enviados para cambiar las cosas y hasta el momento lo hemos logrado. Pero es fundamental que me ayudes a salir de aquí.

De esa forma los tres salieron del recinto para dirigirse al exterior. Por supuesto que los demás ninjas tenían órdenes de detenerlos, no obstante nada pudieron hacer.

Cuando salieron afuera Naruto pudo sentir el intenso dolor de todo el mundo ninja, la desolación de sus amigos, la desesperación que invadía sus corazones.

Con el modo ermitanio pudo encontrar a varios con vida y a muchos malheridos. Empleó el chakra de Kurama y tras volverse dorado al completo se alejó del lugar junto con Sasuke y Bee. No escuchó las palabras de nadie, sabía que debía llegar cuanto antes si quería acabar con esa guerra pronto.

Durante el trayecto fueron eliminando a varios enemigos, como sucedió la vez anterior. Y al igual que antes, fueron interceptados por los líderes de sus aldeas.

Naruto debía convencerlos de que le permitan seguir. Tras respirar profundo le pidió a Sasuke que no se preocupara y aguarde sin intervenir.

Repitió lo que en el pasado hizo, enfrentarse al hermano mayor de Bee para demostrarle que él podría detener todo acabando con esa absurda guerra.

Cuando lo volvió a vencer recién pudieron pasar. Naruto era guiado por Kurama ya que él no recordaba todo. El Kyuubi le iba indicando hacia dónde debían ir y a quienes enfrentarían.

Sasuke era quien motivaba al rubio a seguir avanzando sintiendo la latente esperanza de que todo saldría bien. Al tenerlo a su lado, combatiendo en su mismo bando, le renovaba las energías.

Espalda contra espalda se iban protegiendo y ayudando mutuamente a la hora de avanzar enfrentandose al enemigo.

Al igual que la otra vez, Naruto utilizó los clones de sombras para estar en todos los frentes a la vez usando el chakra de Kurama. Ésto no le gustó nada a Sasuke pero el rubio simplemente lo ignoró.

—Sasuke — dijo Naruto al sentir la angustia de su pareja debido a la preocupación por su salud — Si en verdad deseas mi bienestar, apoyame en cada decisión que tome a partir de ahora. Por favor te lo pido.

Tras respirar profundo el ninja emo accedió a ese pedido. 
— Descuida Sasuke, no pienso dejarte solo en éste mundo pero tampoco te permitiré partir y que me abandones.

Como única respuesta, Sasuke sonrió complacido. Así prosiguieron enfrentándose a los enemigos que iban encontrandose en el camino.

Cuando se toparon con Nagato quien había sido resucitado, se detuvieron. Naruto recordaba aquel enfrentamiento perfectamente, pero en ésta ocasión Itachi seguía vivo. Por lo tanto Nagato estaba solo y bajo el absoluto control de Kabuto.

En breves Naruto les contó a Sasuke y a Bee lo sucedido la vez anterior, para que estén preparados.

El enfrentamiento contra Nagato fue mucho peor de lo que se imaginaron en ésta ocsión. Pero Sasuke ya lo había enfrentado en la aldea junto a Naruto, ésto le sirvió para no ser sorprendido por ninguna técnica.

Derrotarlo de nuevo fue en extremo difícil y ésta vez Sasuke selló su alma para que Kabuto ni nadie pudiera volver a revivirlo obligándolo a atacar a sus amigos.

Acabada la batalla prosiguieron avanzando. En tanto Itachi y Kakashi fueron quienes en ésta ocasión se adentraron al escondite de Kabuto para detener la técnica de resurrección.

El enfrentamiento fue el mismo solo que en ésta ocasión Itachi logró encerrar a Kabuto en aquel círculo sin fin mucho más rápido que la vez anterior.  Finalizado aquello, ambos ninjas de la alianza respiraron aliviados.

Un enemigo menos y todo un ejército de zombies caídos al fin.  Regresaron al campo de batalla para encontrarse con Naruto y Sasuke tal como habían quedado.

La guerra iba teniendo grandes variantes en ésta ocasión y la balanza felizmente se fue inclinando en favor de la alianza.

Sin embargo aún faltaba derrotar al principal villano. Obito Uchiha y el diez colas. Para luego enfrentarse directamente a Kaguya Ootsutsuki.