El diez colas fue agigantando la esfera de chakra con su boca, pero tanto Naruto como Bee junto al ocho colas y al Kyuubi lo atacaron en un desesperado intento por detenerlo.
Sin embargo a ambos les faltaba potencia y sus ataques resultaron ser más que inútiles, no le dañaron ni las pestañas al diez colas.
Sasuke y los demás se prepararon para lo peor, aquello no estaba nada bien. Naruto y Bee no podían detener esa cosa.
Pero cuando el Jobi les lanzó la esfera de chakra gigantesca, ésta se devió sin rozarlo pasando por a lado de todos ellos.
¿Falló el tiro? Imposible ya que el diez colas había apuntado bien. Los cinco quedaron anonadados, pero la respuesta llegó pronto.
Ino siendo sostenida por Hinata quien tenía activado el Baykugan junto a Shikamaru, Choji, Kiba sobre Akamaru y muchos ninjas más hacían su aparición.
Sasuke, Itachi y los otros no daban crédito a lo que sucedió. Fue un verdadero milagro. Naruto sonrió sin voltear ya que recordó un poco más.
— Era hora de que llegaran chicos — comentó el rubio más relajado. — Más justo imposible.
— Suerte que Hinata pudo verlos y que Ino utilizó su técnica de transferencia de alma para desviar ese peligroso ataque — contestó Shikamaru.
— Ya estamos aquí chicos presente — Dijo Kiba.
— ¡Igual nosotros! — dijo Lee llegando junto con Gay, Sai, Neji y otro grupo de ninjas.
Inmediatamente llegaron el escuadrón de ninjas medicos encabezado por Sakura y Shizume. Seguidos por Temari y todos los demás ninjas, hasta el escuadrón de samuray se hacía presente.
Toda la alianza ninja estaba allí, incluyendolos a los cinco Kages. Naruto sonrió tras verlos a todos.
Como se había ocupado de Madara para que no sea revivido, era de esperar que los cinco Kages no se encuentren malheridos.
Obito no lo podía creer, aquello era en verdad inaudito para él. ¿Cómo era posible que todos se hayan juntado formando así una alianza?
"De nada les servirá esa estúpida alianza. Cuando hayan caído en mi técnica fatal sabrán lo inútil que es rebelarse y resistirse"
Estos pensamientos pasaban por la mente de Obito mientras contemplaba a sus mortales enemigos. El recuerdo de su amada Rin volvía a él una vez más, destrozando su poca humanidad.
El contra-ataque dió inicio y como la vez anterior, pareció que la alianza iba a ganar en aquel ataque tras lanzarse al Jobi que se encontraba en el pozo de tierra.
Pero la realidad los volvió a golpear con su dureza como la vez anterior. El diez colas los atacó a todos con su desbastador poder provocando varias bajas.
Así se fue desarrollando la batalla donde Naruto volvía a ser el alma de la alianza junto con Kurama y Sasuke.
Obito intentaba desmoralizarlo con sus palabras una y otra vez, los ataques psicológicos que el rubio recibía eran mucho más desvastadores que en el pasado.
Pero Naruto era alguien que no se dejaba amedrentar y por ende seguía luchando poniendo su alma en esa batalla. En ésta ocasión contaba con Sasuke como aliado, eso lo motivaba más que la vez anterior.
El emo no comprendía por qué Obito se había ensañado con Naruto ni qué quería probar. Pero no le permitiría destruirlo.
— Naruto, tú y yo somos iguales y por ende acabarás como yo — le decía Obito.
Naruto se enfurecía con esa lógica tan retorcida del enemigo.
—¡Ya te dije que tú y yo no tenemos nada en común! ¡No soy como tú maldita sea!
En un determinado momento Obito se ensañó tanto con Naruto que se centró en él, haciendo que el diez colas le lance toda clase de ataques. Pero Sasuke junto a Itachi y Kakashi lo ayudaban contrarrestando aquello.
Cuando Obito vió que pese a sus esfuerzos éste seguía en pie, se centró en lanzar esferas de chakra hechas por el Jobi a blancos lejanos, desconcertando a todos.
Pero cuando Naruto lo recordó fue demasiado tarde. Nada pudo hacer, ya que ante sus ojos y los de los demás, el lugar donde se encontraba la base de operaciones volaba en mil pedazos por el desvastador poder del Jobi.
Ino derramó lágrimas de pesar y Shikamaru se sintió desvastado, debido a que sus padres murieron en la explosión.
Pero ambos sabían que estaban en medio de una guerra por lo tanto no podían deprimirse o morirían más personas.
La furia de Naruto fue notoria por no haber podido evitar esas muertes.
—¿Así que vienes del futuro eh...Naruto? — dijo Obito y Naruto supo lo que vendría a continuación.
—¡No! — gritó el rubio
— Evita ésto entonces— Obito utilizó el poder del diez colas para lanzas lanzas del tamaño de aproximadamente un metro de largo a los ninjas.
— ¡Sasuke! ¡Itachi! ¡Cubranse y protejan a los mas que puedan! — rugio Naruto.
Varias lanzas fueron creadas y lanzadas a los ninjas de la alianza pero ninguno cayó gracias al inmendo poder de Naruto y el Kyuubi junto a los hermanos Uchiha y la descomunal fuerza de Sakura, que junto al clan Hyuuga protegieron al resto.
Obito centró todos sus ataques en Naruto desgastandolo. Kurama acumulaba chakra, por ende Naruto volvía a quedar solo con su propio chakra.
El rubio respiraba entrecortado. Sasuke estaba lejos de él cuando el Jobi le lanzó tres gruesas lanzas. Naruto no podía moverse debido al agotamiento extremo y la falta de chakra.
El recuerdo de Neji muerto lo invadió desesperándolo. Para su desolación vió cómo Neji se colocaba entre su persona y el ataque.
"Neji, no dejaré que mueras. Ésta vez te salvaré amigo".
Pensando aquello, utilizó su voluntad para empujar a Neji lejos del peligroso y mortal ataque.
Itachi fue en su ayuda, usando a Susano para envolver a Naruto protegiendolo así del ataque del diez colas, desintegrando de esa manera las tres lanzas. Nadie resultó muerto en esa ocasión, pese al impresionante ataque recibido.
Nadie había muerto para alegría de todos. Naruto, al ser liberado, corrió junto a Neji.
—¡Neji! ¡¿Estás bien amigo?!
— Si...gracias Naruto