Esa mañana fue a la biblioteca a investigar aquellas ruinas, buscó en antigüos escritos al respecto y encontró datos interesantes.
"El Castillo Del Conde Cuervo", así se lo llamaba ya que su dueño era amante de esas aves tan extrañas y su propio comportamiento se asemejaba a ellas. Tomaba lo que deseaba arrebatándole lo a los demás sin problemas. Así fue agrandando su poderío y tierras; se hizo temer por los aldeanos que continuamente permanecían subyugados a él.
Era posesivo y muy vengativo, jamás aceptó las derrotas. Así fue el Oscuro Conde Cuervo durante su vida, y se lo conocía también por las artes oscuras.
Un día conoció a una hermosa mujer, una princesa de tierras lejanas. Tuvo la idea de raptarla y convertirla en su esclava. Así lo hizo y negó todo pacto con los familiares de la jóven por su rescate.
Conservaría a la bella princesa hasta que se canse y luego la vendería al mejor postor.
Pero jamás contó con la valentía de un aldeano que tras conocer a la bella esclava se enamoró perdidamente de ella y decidió liberarla.
Este joven aldeano era el único que no sentía temor alguno por el cruel Conde. Frecuentaba a la jóven a escondidas, de esa forma fue preparando el gran escape. No obstante subestimaron al Conde ya que no se imaginaron que esté poseía una gran y cruel astucia. Tras descubrir el romance de ambos jóvenes, planeó el peor de castigos para ellos...
El padre de la Diana interrumpió su apasionante lectura tras entrar a la biblioteca. Ella lo recibió con un fuerte abrazo y tras ir a almorzar juntos, ella sacó el tema del Conde Cuervo.
- ¿Por qué deseas saber aquella historia? - fue la pregunta de su padre quien empalideció - Es mejor ignorar ciertas historias hija
- Quiero saberlo padre ¿Quién fue realmente? ¿Acaso hay algo que me estás ocultando? ¿Algo que debería saber?
- Podría decirse que si
- ¿Es algo malo?
- En efecto, si. Muy malo
- Dímelo padre, sabes que lo descubriré tarde o temprano
Resignado el padre optó por decirle la verdad a su hija
- Es una mancha que pesa sobre nuestra familia ya que el Conde Cuervo fue nuestro antepasado
- ¿Somos sus descendientes?
- Así es, pero no es algo de lo que debamos enorgullecernos. Todo lo contrario más bien
- ¿Por qué?
- Su crueldad es legendaria, además se trataba de un brujo oscuro y lleno de maldad. Las ruinas esas que ves desde aquí son su legado y tanto mi padre como yo hemos intentado borrar aquella mancha y redimirnos con los aldeanos
- ¿Qué ocurrió en esas ruinas?
- Se dice que el Conde Cuervo enloqueció por el amor de una esclava pero tras descubrir que ella amaba a otro hombre, un campesino y más aún planeaban huir juntos...los hechizó. Castigo al joven amarrando lo al interior del castillo con un poderoso hechizó que hizo añicos la arquitectura del mismo. Luego se llevó a la esclava y la mató él mismo, descuartizando la él mismo. Sin embargo antes de que ella muera la maldijo.
- ¿Cómo?
- Le arrebató de su mente todo recuerdo de su amado. Pero él si la recordaría siempre solo que no podría decirle nada a nadie. Cuentan que él sigue atrapado en las ruinas ya que no podrá envejecer ni morir mientras el conjuro exista.
– ¿Cómo podrá destruirse el hechizo?
- Solo la jóven esclava tiene el poder para hacerlo hija. Dicen que cuando ella regrese tendrá la oportunidad de liberarlo con tan solo recordarlo. Pero la maldición del oscuro Conde pesa con fuerza.
-¿Y alguien vió al campesino hechizado?
- No, nadie lo ha visto jamás. También suelen afirmar que este solo se presentaría ante los ojos de su amada.
- ¿Y sabes cómo se llamaban?
- Solo se que ella llevaba tu mismo nombre...Diana.
- ¿Y él? ¿Cómo se llamaba él?
- Nunca supe su nombre. Pero ¿Por qué te interesa tanto esa historia?
- Simple curiosidad, además es bueno conocer la historia familiar ¿No lo crees?
Cómo única respuesta su padre forzó una sonrisa. Luego se fue a seguir trabajando con la ayuda de su hija quién era más sagaz que él mismo en los negocios familiares.
Pero a la noche, Diana se dispuso a regresar a las ruinas antiguas junto a su misterioso enamorado de ensueños.