Thani observo a su prima dar vueltas por todo su cuarto, buscando en todos los cajones, probándose una y otra cosa para volver a la misma ropa de un inicio – sabes, no has comido y ya va van a ser las 10 – le dijo.
Itza observo las cosas en sus manos y se empezó a cambiar. Adal le dijo que pasaría por ella a las 10, lo cual quería decir 9:30 pues él ya se encontraba abajo, pero Itza no lo sabía. Y si lo hubiera sabido, igual la iba a tener que esperar.
Itza se quedó quieta por un momento y sonrió – puede ser – le respondió.
Thani le arrojo una almohada que la golpeo en el brazo, logrando que malograra el poco maquillaje que estaba comenzando a ponerse – te gusta, nunca antes te vi así por nadie.
Itza se limpió y empezó otra vez – antes no estabas mucho tiempo conmigo.
Itza tuvo cuatro enamorados en total, pero había algo en común entre ellos que no existe con Adal, y era que ellos se lo pidieron y ella acepto, pero no por gusto o cariño, sino porque no sabía cómo negarse
Cuando estaba en la segundaria, tenía un compañero que hablaba mucho con ella. Ambos se ayudaban con las tareas y practicaban matemática, pues Itza apestaba en matemática. Luego, ese chico se le declaro con tanta ilusión que Itza no pudo decirle que no. Pero cuando empezaron a andar, Itza lo seguía tratando como amigo y no dejaba que el otro avance, así que Kari ayudo a romper su incomoda y corta relación.
El segundo novio fue igual, se saludaban, ella no volvió a darle confianza a nadie más para evitar malos entendido, hablaban pocas veces. Pero no sabe en qué momento, el chico llego a pensar que era muy del agrado de Itza, así que le pidió ser enamorados en medio del patio y bajo la mirada de todos. Lo cual la dejo acorralada, aparte de avergonzada, y sin saber cómo negarse sin hacerlo sentir mal… así que acepto. Lo cual también termino gracias a Kari.
La tercera fue algo más raro. Había un chico que era muy estudioso en la universidad cuando recién estaba empezando, lo que todos llaman nerd. No hacía ejercicio, no fiestas, no juegos y menos amigos. No lo molestaban, pero tampoco se le acercaban. Este chico solía darle papeles con fórmulas cuando la veía, le dejaba resúmenes de algún curso en su carpeta y le preguntaba sobre algunas cosas de inglés para que lo ayude. Todo fue relativamente normal, hasta que el chico se le acerco en medio del pasillo y le pidió ser enamorados, bajo el asombro de todos y la burla de muchos. Así que ella pensó en negarse, para no volver al mismo cuento que los anteriores, pero alguien dijo, “ella no perdería el tiempo contigo, eres un desadaptado”, y eso la molesto, porque se dio cuenta que todos pensaban que ella era superficial solo por verse bien… así que termino aceptando. Pero esta vez le dijo al chico el por qué lo hizo y que lo mejor era esperar un tiempo para terminar.
Esa fue la única relación que Kari no rompió… todos se imaginan por qué. Y la última relación empezó diferente a las demás, conocerse, ser amigos y terminar encontrando cosas en común que los volvía más unidos, pero no llego a sentir nada intenso. Además de que termino igual que casi todos los anteriores, como todos saben, Kari.
Así que Itza se puso a pensar que, si de verdad se estaba enamorando, esta sería la primera vez. Y si esta relación termina como las demás, por Kari, le iba a doler en el alma como a su mamá cuando la dejo su padre.
Thani la vio salir y sacudió la cabeza, tenía una idea de lo que estaba pensando y lo único que podía hacer era darle un consejo cuando se lo pida.
Itza llego al primer piso y se quitó todo de la cabeza. Hoy iba a divertirse, luego pensaría en lo demás, si es que existían algo más.
Adal la vio salir y sonrió mientras bajaba del auto – creí que te habías olvidado – le dijo.
Itza solo sonrió y se encogió de hombros – pero está haciendo calor, no creo que llueva – le dijo, rezando porque así sea. En verdad se olvidó la casaca y el paraguas, pero no lo diría.
Llegaron al acuario, como Itza había dicho antes. Dentro había muchos niños pequeños corriendo de un lado a otro mientras observaban a los peces con asombro.
Itza los observo con una sonrisa y tomo a Adal del brazo como si se fuera a perder en medio de tantos niños – son tan pequeños, me dan ternura.
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Editado: 24.05.2022