Capturando el momento

1. Amor a las cámaras

1.

 

Tome la última fotografía y trate de no sonreír mientras la miraba, pero es que había quedado perfecta.

-Samy, eres la única persona que sonreiría en un momento como este.

Ka, mi mejor amiga también me regalo una pequeña sonrisa, y lo que decía no era mas que la simple verdad.

Delante de mí, la escuela Linden Hill estaba totalmente destruida y en ruinas, la gran escuela que me había acompañado toda mi vida escolar me saludaba desde los escombros. Y de nuevo tome otra fotografía mientras recordaba exactamente lo que unas horas atrás había sucedido.

Al parecer la señora tierra estaba de acuerdo en que las clases eran aburridas y un total fastidio, así que, por eso de las dos de la mañana, un gran temblor sacudió a los habitantes de Wilmington, por suerte las alarmas sonaron a tiempo y hasta ahora ninguna persona se encuentra herida o muerta en su mayor caso. Lo que si sucedió y fue mas probable que la cara de seis lados en un dado era que nuestra maravillosa escuela se derrumbara. Y digo que era lo mas obvio ya que el director apenas invertía en ella y se quedaba con el dinero de las reparaciones, mientras que nosotros trabajábamos en salones con lámparas fundidas, el se bañaba en un mar de dinero, pero en fin. Recién despertamos corrimos a ver el desafortunado destino de la escuela Linden Hill.

Por lo lejos unos alumnos ríen y otros lloran de nostalgia, y nuestro maravilloso director se revuelca en la histeria y la exasperación del momento, es tanto su enfurecimiento que apuesto que comenzara a llorar.

- ¿No es hermoso saber que no tendremos clases?

-Seria hermoso si no existiera la escuela St Elizabeth y que no estuviera dispuesta a abrirnos las puertas.

La sonrisa de mi cara se borro en ese instante mientras sentía mi cara más pálida.

-Pero en esa escuela va Voldemort, y no quiero volver a topármelo lo que resta de mi vida, agregando que esa es una escuela de niños ricos y mimados.

Ella se encogió de hombros y de nuevo observo como varias personas se acercaron y nos desalojaron del terreno. Por lo bajo rechiste, pero en verdad quería tomar mas fotos. Trabajaba en el periódico de la ciudad, así que unas buenas tomas me conseguirían un extra.

Camine todo regreso a casa, donde Ka no dejo de hablar sobre Tyler, su exnovio y la desastrosa ruptura que habían tenido. Yo por mi parte, prefería mantenerme callada, siempre ocurría lo mismo y lo mejor era esperar que se le olvidara y continuara su espectacular vida. A fin de cuentas, nunca me cansaba de decirle lo muy importante que era para mi vida y para la de su hermano mayor, a excepción de la de sus padres. Ellos se vivían de viaje en viaje, de negocio en negocio, y simplemente la dejaban votada. Por suerte yo estaba dispuesta a acogerla en mi casa y mimarla como se merecía.

Cuando regresamos a casa, -ella se estaba quedando tiempo limitado-, mi madre nos esperaba en la puerta con cara de pocos amigos.

-Me llamaron de Linden Hill, no puedo creer que se derrumbara…

Rodee los ojos ante las palabras de mamá. Ya hacía mucho tiempo había perdido la cuenta de las veces en las que le hable y trate de explicar las circunstancias de la escuela y lo que el director hacia con el dinero.

Por detrás sentí la mano de Karla en mi hombro, traté de relajarme y pensar en que solo no prestaba verdadera atención a todo lo que decía. Y es que ser abogada y mantener a una hija sola no es trabajo fácil.

-Hablé con los padres de Ka y los puse al tanto, al parecer su director ya se encargo de trasladarlos a la escuela de niños mimados, pero ya todo esta solucionado, mañana regresan y todos felices y contentos.

Beso la mejilla de Ka y se marchó, sentí un pequeño agujero en mi pecho cuando no se despidió de mí. De nuevo Ka se percató y me regalo un abrazo, yo amaba los abrazos así que eso logro subirme el animo a niveles estratosféricos.

El pequeño y costoso celular de ella sonó en ese instante, atendió la llamada y se disculpó para después salir de la casa y dejarme sola.

Aproveche ese momento para subir a mi recamara. Me deje caer como costal de papas en mi colchón y mi aroma se disperso por todo el cuarto, tenia una ligera obsesión con los olores ricos, al igual que otra mayor obsesión con las cámaras fotográficas.

Aproveche una hora de mi soledad para dormir un poco, ayer en la noche me quede un poco tarde revisando unas fotografías y la edición que quería. También otro poco tarde leyendo un nuevo libro de amor adolescente.

Cuando desperté, mi reloj de pared me saludo marcando un hermoso dos, todo dentro de mí se volvió una revolución mientras me levante de golpe, al momento de pararme, mi pie se enrollo en mi cobija logrando que cayera de golpe en el suelo.

Dejando de lado el dolor de mi mano, que recibió el impacto, me dedique a tratar de acomodar mi cabellera y limpiarme la baba de mi boca, al parecer la pequeña hora de dormir se convirtió en unas cinco. Sin pensarlo otro segundo, tome mi cámara y un sobre color manila, que tenía otras fotografías y un disquete con información valiosa.

Cuando llegue a la empresa de New Castle Business Ledger, donde el periódico de los habitantes de Wilmington salía como pan caliente, Juli me tomo de la mano y me hiso correr como loca por los pasillos. Al final llegamos con el jefe de imprenta, Mat, el cual me arrebato prácticamente de las manos el folder.



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En el texto hay: jared, samy solo sigue sus pasiones, camara

Editado: 18.04.2019

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