Capítulo 1

Al amanecer, llamó a Kim Sun-Hee, su mejor amiga y asistente en la academia de música donde trabajaba. Ella, siempre dispuesta a ayudar, llegó al apartamento con un café en una mano y su tablet en la otra.

—¿Estás segura de que esto no es solo tu imaginación? —preguntó la chica mientras inspeccionaba el piano.

—Sé lo que sentí. Este piano tiene algo… algo extraño —respondió la pianista con firmeza.

—De acuerdo, veamos. ¿Hay alguna inscripción o marca que pueda darnos una pista? —comenzó a examinar el instrumento, buscando algo fuera de lo común.

En la parte interior de la tapa del piano encontró grabadas unas iniciales y una fecha: H.J.K. - 1928. Sun-Hee tomó una foto y comenzó a buscar en internet.

Mientras tanto, Eun-Ji, incapaz de resistirse, volvió a sentarse frente al piano. Esta vez, tocó una simple escala. A medida que avanzaba, las notas parecían despertar algo más que música. Una corriente de aire frío recorrió la habitación y el sonido de un leve susurro pareció venir de ninguna parte.

—Eun-Ji, para un momento —le dijo su amiga de repente, mirando su pantalla con el ceño fruncido.

La aludida apartó las manos de las teclas y se volvió hacia la chica para preguntar:

—¿Qué has encontrado?

—El piano perteneció a un compositor llamado Han Joon-Kyung. Era conocido por su música, pero también por… su muerte trágica. Según esto, murió en circunstancias misteriosas, y algunos dicen que su espíritu quedó atrapado en su piano. Se rumorea que cualquiera que toque su música podría atraer su ira.

La joven sintió un escalofrío recorrer su cuerpo.

—¿Crees que estoy en peligro? —quiso saber la pianista.

—No lo sé, pero si esto es cierto, deberías tener cuidado. Quizás deberíamos deshacernos de él —sugirió su amiga.

—No puedo. Este piano tiene algo que necesito entender. Además… siento que hay algo que quiere decirme.

—Prométeme que no lo tocarás a solas —suspiró, con resignación.

En los días siguientes, Sun-Hee profundizó en su investigación, visitando bibliotecas y consultando archivos digitales sobre Han Joon-Kyung. Descubrió más detalles sobre su vida: había sido un prodigio desde muy joven, componiendo obras maestras antes de los veinte años. Sin embargo, su ascenso a la fama estuvo marcado por tragedias personales, incluyendo la muerte de su esposa en un incendio y la pérdida de un hijo no nacido.

También encontró referencias a sus composiciones más famosas, conocidas como “Notas del Alma”. Según los críticos de la época, estas piezas contenían un nivel de emoción tan visceral que escuchar su interpretación en vivo era una experiencia casi sobrenatural. Curiosamente, estas composiciones no se habían vuelto a interpretar después de su muerte; se decía que las partituras originales habían desaparecido junto con su piano.

Cuando Sun-Hee compartió esta información con su amiga, la pianista se sintió aún más intrigada.

Esa noche, decidió tocar una improvisación en el piano antiguo, guiada por las emociones que sentía cada vez que lo tocaba. A medida que sus dedos se movían por las teclas, la melodía que emergió parecía diferente a todo lo que había tocado antes: un lamento profundo, cargado de anhelo y desesperación.

Mientras tocaba, tuvo otra visión fugaz: esta vez, un incendio, el sonido de gritos y la figura de un hombre arrodillado frente al piano, llorando. Las imágenes desaparecieron tan rápido como llegaron, dejando a Eun-Ji jadeando y con lágrimas en los ojos.

—No puedo seguir ignorando esto, Sun-Hee. Este piano tiene algo que quiere decirme —dijo con voz temblorosa.

Su amiga, aunque preocupada, comprendió la determinación de la chica.

—Si quieres llegar al fondo de esto, lo haremos juntas. Pero debemos ser cuidadosas. No sabemos a dónde nos llevará esta historia —le propuso intentando camuflar su preocupación.

Esa misma semana, Sun-Hee encontró un contacto que podría proporcionar más respuestas: un coleccionista de instrumentos antiguos que había escrito varios artículos sobre pianos históricos. Según sus registros, el piano de Han Joon-Kyung había sido rastreado hasta un pequeño taller en Busan, donde un restaurador lo había reparado hacía décadas antes de que desapareciera de nuevo.

Con este nuevo dato, Eun-Ji y su amiga comenzaron a planear un viaje para descubrir más sobre el misterioso piano. Mientras tanto, el instrumento permanecía en el estudio. silencioso pero imponente, como si esperara el momento adecuado para revelar todos sus secretos.

En el aire flotaba una sensación de expectación, como si las notas que habían quedado atrapadas en el pasado estuvieran a punto de ser liberadas, cambiando para siempre la vida de quienes se atrevieran a escucharlas.