Carta de un escritor

Capítulo III

Thomas va tras bastidores con intención de ver a Eco. 
– lo harás muy bien Eco- dice Thomas acariciando el rostro de la joven. Devolviéndole la caricia, Eco le responde:- si a las personas no les agrada el papel que me has hecho interpretar, y en vez de aplaudir empiezan a abuchear, vas a llevarme lejos de aquí- 
-te llevaré lejos de todas formas- responde Thomas, este se acerca bastante de los labios de Eco, pero Rafael interrumpe el momento: - ya casi va a empezar la obra, joven Thomas ya se va a abrír el telón, debe de salir- 
El gran telón rojo se abre, y empieza la maravillosa obra, todos quedan fascinados, se escuchan aplausos estrepitosos, y el telón vuelve a bajar. 
El joven Thomas vuleve tras bastidores, con el propósito de encontrarse a Eco. Y ahí estába ella, sentanda frente a un espejo desmaquillandose. -te has visto radiante- dice Thomas frotando los hombros de Eco. -¿Enserio lo he hecho bien? Pregunta Eco levantándose de su  silla, y postrandose frente a Thomas. 
Thomas pasa sus manos sobre el hermoso cabello de Eco, la mira fijamente y después la abraza tan fuerte, que a Eco se le complica el respirar. -no me sostengan tan fuerte- dice Eco. -ah, lo siento.me emocioné- 
En este momento David entra al camerino, y dice con voz altanera: -¿Qué está pasando aquí? -Thomas voltea a mirar a David y le contesta: -vine a ver a Eco, ¿Algún problema? -no, para nada- dice David tomando la mano de Eco. 
La joven forzejea para librar su mano de David. Diciendole: -¡¿Que te pasa David!? Sabes que Thomas es mi amigo- -me pareció ver algo más que una amistad aquí- -¡¿Y si así fuese que!?- interrumpe Thomas. David responde: -tu no te metas- 
Las voces se escuchan hacia afuera, atrayendo jente al lugar. Entran Victor, los padres de Eco y Rafael. -¿Que son esos gritos?-pregunta Rafael al mismo tiempo que entra. -no pasa nada, yo ya me me iba- dice Thomas. 
Eco se retira con su familia, pero Rafael y Victor van tras Thomas. 
El escritor está lleno de furia, tanto que golpea la pared con su puño tan fuerte que empieza a sangrar, pero Thomas no parece sentír nada. 
-joven Thomas ¿que le pasa?- pregúnta Rafael totalmente indignado. -no es nada, Rafael, ¿cree usted que yo pueda actuar en mi próxima obra? Pregunta Thomas. A lo que Rafael responde: -porsupuesto, pero ¿pero por que?- -tranquilo Rafael, yo me entiendo, vamonos victor- 
Thomas y victor se retiran. -¿que pretendes hacer Thomas?- -escribiré una nueva historia. 
El joven Thomas llega a su casa, como siempre pensando en la joven Eco. Y preparado no solo para escribir una nueva historia, si no tambien para protagonizarla.  
En un pequeño pueblo, una joven pareja de enamorados adolescences vivían su perfecta historia de amor. Todo era miel sobre ojuelas, hasta que un día los padres del muchacho, desiden iniciar una nueva vida mudandose del pueblo. Al momento de ida, los dos enamorados dan su despedida. El joven, sosteniendo el cabello de su enamorada, te prometo que volveré, volveré por tí, porque una vida sin no es digna de vivir.  
Los jovenes Eco y Thomas ya actuaban la obra, todos estupefactos en los asientos. Rafael confundido ya que Thomas se acerca bastante a Eco, escena que no estába planeada. Sus rostros se encuentran unidos. Los labios de los protagonistas se empiezan a cruzar. Todos quedan elados del asombro, en algunas caras como la de Megan se refleja satifacción. Pero el joven David aprieta sus mandíbulas, puesto los celos consumen arduamente su alma. 
Despues del apasionado beso improvisado, el joven Thomas dice; - si en esta vida el tiempo no se me he suficiente para encontrarte, prometo volver en la otra para buscarte. 
La confusión invade la mente de Eco, y con las manos puestas sobre el rostro de Thomas, una vez baja el telón, esta se levanta de puntillas para besarlo nuevamente. -¿Por te has tardado tanto Thomas-? Pregunta Eco después del segundo beso. 
Thomas vuelve a besarla y le dice: -¡Vámonos de aquí!- -¿a dónde? -a un mágico lugar responde Thomas- 
Mientras caminan tomados de la mano llegan al lado dónde antes Thomas había escríto el poema para Eco.  
-este es un lugar muy bonito- dice Eco admirando la belleza de las aguas. Thomas suelta el cabello de Eco que estába envuelto y este se deja caer hasta donde la espalda pierde su nombre. 
-eres tan perfecta- le susurra a su oído al mismo tiempo que sube las manos pasando por su cintura y besando su cuello. Eco cierra los ojos y lame sus labios con rostro de placer. -¿No cres que ya hay que aparecer?-  
Thomas le da vuelta a Eco para quedar frente a ella:- tranquila, todo está bien. Nadie nos está esperando- dice al mismo tiempo que la besa. 
Se recuestan en el piso, el cual está cubierto por una verde y hermosa grama. -¿Y ahora qué? Pregunta Eco. -ahora eres mía- responde Thomas. 
Eco postra su rostro frente al de Thomas, en su mirada se refleja su duda, y pregunta: -¿Vas a ser me fiel?- 
Thomas la mira fijamente, frunce el ceño. ¿Cómo podía preguntarle eso? Parece que Eco no está consciente del fundamenta papel que ella desempeña en la vida de Thomas. -Eco, solo un imbecil renunciaría a tenerte en sus brazos- Eco le regala un breve sonrisa a Thomas, y vuelve a recostar la cabeza en su pecho.  
 




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