bien dicen que el ser humano no pide vivir, pero cuando está vivo morir no quiere. Mi diferencia con el resto del mundo es que he planeado mi muerte desde que tengo uso de razón.
Me trajeron a la vida un 1 de marzo de 199, mi nombre Sofía, la hermana mayor de 3 hermanas más, se imaginarán el gran peso que llevo sobre mis hombros al tener que ser el ejemplo a seguir; aunque he fracasado en el intento.
los recuerdos más vividos que tengo de mi infancia son cuando estaba en la escuela primaria, recuerdo casi vividamente como le rogaba a mi madre que no me mandará a estudiar. Odiaba esa escuela, había un grupo de niñas que realmente eran muy malas conmigo; y por más que rogar a siempre me mandaban.
Pero fue allí donde aprendi que el ser humano es despreciable incluso siendo niño y esto sólo sirvió para decidirme a ver la vida de otra manera. Sólo estuve en esa escuela un año pero fue suficiente para marcarme la vida.