Carta 2

Buenas noches cariño, hace dos mañanas atrás debería haberte llegado mi carta, de la cual no hubo respuesta, aunque ya me acostumbre a eso. ¿Cómo estas nena? Me gustaría que respondieras aunque solo sea para decirme cómo estas. En dos semanas será tu cumpleaños y yo no podré estar ahí. Me arrepiento de tanto querida, de no haber estado en cada fecha especial, de haber dejado que esto interfiera entre nosotros... 
Duele el hecho de saber que tú ya no me esperas, y que estás con alguien más, me lo ha dicho mi hermana cuando llamó, pero... ¿Es lo que quería que hicieras, no? Quiero que seas feliz, aunque no sea yo la razón, quiero que sonrías, aunque no sea yo la razón, quiero que tengas amor, aunque no sea yo el que te lo brinde, quiero que formes una familia, aunque no sea yo el que este a tu lado. Aunque trata de que sea alguien que valga la pena Mary, que no sea alguien que vaya a lastimarte. Que sea alguien que se tome el tiempo necesario para conocerte, que descubra que cuando te pones mal utilizas la cocina para distraerte, lo pacifica que te ves cuando duermes, y como sonríes al bailar, al dejar el alma en eso que es tu vida, la danza. 
Cambiando de tema, anoche no conseguí dormir nada, pensando en si realmente vale la pena seguir enviándote estas cartas, y tome una decisión, aunque no estoy completamente seguro, pero es lo mejor. No sabrás de mí, dejaré de molestar y te dejaré ser feliz junto a tu nuevo amor. Cuando vuelva, si es que lo hago, puede que vaya a buscarte ¿Sabes? No me gustaría que algún día nos crucemos por la calle y hagamos de cuenta que somos desconocidos. Hay veces que no duermo pensando en que todavía estás ahí, esperando mi regreso, luego recuerdo cómo paso todo, y sé que no es así, que tú ya no estas...

Con amor, Matt.