Pov. Ana Stone.
Estaba sentada en mi oficina; revisando el expediente de la mujer que nos daría pistas cuando recibí una llamada a mi teléfono celular.
-Stone…
-Ana tenemos un problema.
-¿Qué pasa?
-La señora Polo… está muerta.
-¿Cómo que está muerta?
-Cuando llegamos estaba colgada de la lámpara de la casa y dejo una nota despidiéndose.
-Maldita sea.
-Estamos trasladando el cuerpo.
-Avisaremos a sus hijos.
-Mañana quiero una reunión con ellos avísales.
***
-No lo entiendo, ¿Por qué mi madre se mataría? esto es una estupidez.
-Ha dejado una carta, debe entregármela luego porque debo hablar con sus hermanos y esto es parte de evidencia.
-¿Cómo? O sea que ¿La mataron?
-Eso es lo que tratare de investigar, su madre fue parte de la vida de un asesino serial y aparte de que uno de los pacientes se escapo hace dos noches justamente su madre fue encontrada muerta anoche con aproximadamente un día de muerta o sea que hay probabilidades de que esto sea un asesinato.
-Debe encontrar a ese maldito y hacerlo pagar, no quiero ser yo la que se encargue de hacer su trabajo agente.
-Mantenga la calma señorita esto se va a resolver.
Pov. Fred Willars.
-Ana- ella se había cansado de repetirme que no la tuteara, pero, no le sirvió absolutamente de nada decírmelo un millón de veces yo lo seguía haciendo.
-Supongo que ya está enterado de la muerte de la señora Polo- como olvidar su cara de terror-Fred…
-¿Hmm?
-¿Estaba enterado?
-No tenía idea- mentí.
-Pues así es, fue asesinada.
-¿Quién querría matarla?
-Eso es lo que estoy averiguando.
-¿Y yo que tengo que ver?
-Mucho más de lo que se imagina Fred.
-¿Ah sí? ¿Por qué?
-Ella fue la que lo llevo a la policía la noche que mataron a sus padres, usted escapo de su casa.
-Veo que ha estado haciendo su trabajo.
-Siempre hago mi trabajo Fred.
-Antes no me parecía eso.
-Son cosas que usted siendo tan mediocre no entiende- para Ana y para mi ya era una costumbre insultarnos.
-Bueno y ¿Qué le gustaría saber?
-Todo.
-No podemos saber todo, Ana a veces hay cosas que debemos mantener ocultas.
-Lástima que usted ni siquiera se haya guardado todo, estoy segura de que todo lo que usted tiene guardado está escrito en las famosas cartas que nombra.
-Está usted totalmente en lo correcto.
- He empezado a comprender su juego Fred, y eso es algo que yo también puedo jugar.
-Veamos quien sale victorioso, Ana.