¡cartas Para Nora!

Capítulo 5 "gracias"

Capítulo 5 "gracias"

Agradecimiento

“Siempre es imposible, hasta que alguien llaga y lo hace posible”

DMLD…

Tan solo un momento me hiciste date las gracias...

Te quiero dar las gracias por haberme apoyado en los malos momentos, incluso cuando ambas sabíamos que seguíamos juntas por la costumbre de querernos. Siempre fuiste cortés leal y quería agradecerte tu honestidad, valor.

Gracias por enseñarme cuánto se puede llegar a amar a alguien y lo poderoso que puede llegar a ser el sentimiento amoroso. Contigo aprendí a besar el alma del que quieres y a comprender. Entendí que para quererte a ti tanto, antes tenía que aprender a amarme y tú me ayudaste a ello.
Gracias porque tras esta relación de amistad mi forma de entender el amor ha cambiado casi tanto como he crecido yo durante la relación.

A pesar de esto, salgo reforzada de lo nuestro:

Con más confianza en mí misma y más ganas de comerme el mundo. De siempre ver un mañana... Espero que a ti te haya ocurrido lo mismo.

Porque, a pesar de todo, te deseo lo mejor.
Siempre me dejaste esto en claro:

Nora: No dudes de las decisiones tomadas, recuérdalo ya lo pensaste y no hay marcha atrás...

Una vez más, me gustaría agradecerte tu compañía a mi lado, todo lo que me has enseñado, hemos aprendido y descubierto juntas. No ha habido día en el que no he agradecido el poder encontrarte en mi camino y conocerte.
Por enseñarme el valor de un mañana. Así somos ante los problemas hasta "tu" a pesar que no lo creas de los cuales ha demás preferimos no oír para que no nos salpiquen. Supongo que podría llamarse "supervivencia"

Te disfrazadas de mí y me disfrazó de ti…

Siendo honesta nunca te vi con ojos de amiga y a pesar de todo nunca pide sentir confianza contigo

Siempre he pensado que soy afortunada de haberte encontrado, no tengo idea de cómo habría salido adelante cada vez que la vida me daba sorpresas desagradables.

No importa cuántos años pasen, ni si tomamos un rumbo distinto. Dicen que los lazos verdaderos de amistad, no pueden romperse bajo ninguna circunstancia. Sé que a pesar de todo, seguiremos apoyándonos la una a la otra como hemos hecho hasta ahora, siempre leales, siempre alegres. Pero aún con todo, voy a procurar ir siempre con la cabeza en alto como me has enseñado tú. Porque si algo he aprendido durante este tiempo en el que me has convertido y hemos convivido la una con la otra, es que nunca debo darme por vencida.

Gracias por hacerme comprender que siempre se puede sacar lo mejor de cada situación. Gracias por estar ahí sin fallar ni una sola vez. Jamás dejarán de estar en mi corazón. Tengo la certeza de que no que nos mantiene unidas, va mucho más allá de los intereses que tenemos en común y de las virtudes que vemos en cada uno de nosotras. Se trata de soportarnos cuando nos comportamos como idiotas, de aceptarnos con todas nuestras cosas positivas y aun así, mantener la confianza intacta. Es el hecho de saber que no importa cuánto miedo se sienta, o la impotencia que se puede apoderar a veces de nosotras.

Es acerca de saber que nuestra amistad, puede superar todo eso y más. Sé que en varias ocasiones hemos llegado a tener nuestras diferencias; yo mismo he llegado a portarme con inconsciencia, al igual que ustedes a veces.

Pero eso no tiene importancia alguna. Los buenos recuerdos todo el tiempo terminan ganando. Y hemos tenido tantos de esos; sí que los hemos tenido.

Muchas aventuras, bastantes charlas en las que nos reímos, en las que lloramos y nos enfrentamos entre nosotras. Debo decirte que no pude ser más feliz, con amigos como lo son ustedes. Nunca he dudado que puedo contar con su apoyo bajo cualquier circunstancia, y espero que tengan la misma percepción de mí, porque haría lo que fuera por ayudarlos.

Te quiero, por lo que me has brindado. Por favor, nunca perdamos esta amistad que nos une.

El camino es bastante largo y hasta ahora, no ha sido del todo fácil. Si lo sabré yo, con la cantidad de problemas que conlleva el crecer. Madurar sin embargo, habría sido más doloroso sin tu ayuda. Cada día que estuviste ahí, en las buenas y las malas. No importaba cuan complicado fuera el problema en el que estuviera metida, jamás te apartaste de mi lado.

Hoy no sé cómo podría agradecerte. Sé que no todo el mundo tiene la suerte de conocer la persona que es excelente, como lo eres tú. Nunca he expresado esto en voz alta, pero admiro cada rasgo de tu personalidad, la manera en que me motivas a mirar siempre adelante y la forma que tienen, para hacer que deje atrás cualquiera de mis temores. Nunca quisiera perder tu amistad, ni aunque pasen cien no mil años.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.