9 de Septiembre, 2020.
Hace varios días que no me he pasado por aquí, ¿verdad? Es solo que no he sabido cómo continuar.
No sé qué nos está pasando, no sé las personas en las que nos hemos convertido. Si lo pienso a profundidad, no soy absolutamente ni la mitad de lo que era cuando te conocí. Quiero saber, ¿que pasó? Me queda claro que mejoraste en muchos sentidos, mi vida, sin embargo, aún no sé si es totalmente bueno o absolutamente malo.
Sé que has aportado muchísimo a mis sonrisas y sé que es bueno, pero, ¿y en estos días? No sonrío a menudo, a menos que escuche tu voz en esos viejos audios que solías enviarme, en los que decías lo mucho que me querías, ahora, ahora ni por asomo podrías decirlo.
Sigues diciendo que me quieres, sin embargo, tus acciones no me dejan nada claro, de hecho, me hacen dudar aún más de tus palabras. No sé si eres tú o soy yo que me acostumbré a ciertas atenciones que ahora no tienes más.
Sé que no eres el único que debe luchar por esto, (si es que hay algo), pero, estoy muy perdida, no sé cómo hacer las cosas para volverte a enamorar. Estoy tan ensimismada en las cosas que planeo hacer a tu lado, que se me está olvidando que ni siquiera sé si te tengo.
Dijiste que podríamos comenzar nuevamente, que tratariamos como amigos, pero oye, ¿que clase de amigos somos? Yo lo suelo entregarle mis besos a mis amigos, no suelo estar celosa de las niñas con las que mis amigos salen, no me interesa pasar mi tiempo y mis noches en vela, con otro amigo más que contigo.
¿Y si no funciona que? ¿Quien va a perder más? ¿Tú o yo? Dime porque estoy cansada de perder todo el tiempo y por primera vez en mi vida, realmente quiero ganar, quiero ganar contigo y que funcione por mucho tiempo.
Pero, iluminame. Iluminame y no me dejes caer.