Un día no tan lejano, espero que alguien me vea,
que descubra en mí todo aquello que veo en los demás.
Que me describa con palabras que bailen en el aire,
como si fuese la última maravilla, un tesoro raro y precioso.
Un día me gustaría dejar de ser la poeta,
la que escribe versos y rimas con la esperanza de ser escuchada.
Y convertirme en el poema, en la obra de arte,
en la creación que alguien ha soñado y ha querido escribir.
Anhelo que alguien me escriba, que me convierta en palabras,
en un lenguaje que exprese todo lo que siento y pienso.
Que me haga sentir que soy algo más que un simple ser,
que soy una obra de arte, un poema que merece ser leído.