"Te vi pasar por el pasillo desde aquella ventana,
no lo notaste, pero se convirtió poco a poco en lo más común.
Tu sonrisa, tu forma de caminar,
se convirtieron en algo que esperaba ver cada día.
Tu presencia se hizo habitual, como el sol que sale cada mañana,
No me di cuenta de cuándo pasó, pero un día te miré
y supe que eras parte de mí, como si siempre hubieras estado allí.
Y gracias a ti, me di cuenta que podía escribir estas cosas,
que mi corazón tenía una voz, y que mis sentimientos podían volar.
Me enseñaste a ver la belleza en lo cotidiano,
a encontrar la poesía en cada momento, en cada mirada.
Te vi pasar por el pasillo desde aquella ventana,
y sin saberlo, me cambiaste la vida para siempre."
El color de tus ojos ... Se volvió mi color favorito