Día de la boda
Por fin está aquí, el día que más he estado esperando por más de dos años, el día de mi boda. El día en donde por fin uniré mi vida a la de Dereck.
Tengo los nervios a flor de piel, mis manos tiemblan y siento un revoltijo en mi estómago, tal vez sea porque no he probado comida en todo lo que llevo preparándome, que prácticamente es toda la mañana.
— Te ves hermosa hija — dice papá entrando a mi habitación.
Me volteo hacía él, se ve muy bien con su esmoquin y cuando veo su rostro noto que tiene los ojos cristalizados.
— Oh papá — me acerco a abrazarlo — no llores, sabes que siempre estaré para ti.
— No lloro por eso hija — se separa de mí — estoy muy emocionado por ti, aún no puedo creer que la niñita que siempre estuvo para mí en mis peores momentos está a punto de casarse.
— Oh papá — sollozo.
— Es que hija, es increíble la manera en como siempre nos ayudaste, aun poniendo nuestra felicidad por encima de la tuya. Nunca se hizo justo, pero nunca te dije nada y lo siento tanto por eso — baja la mirada con lágrimas en los ojos.
Me acerco a él con fieles ganas de abrazarlo, y lo hago. Amo a papá y si siempre los ayudaba es porque los amo.
— Te amo — susurro.
Cuando menos me doy cuenta, comienzo a llorar al igual que papá, haciendo que los dos al ver nuestras caras, riamos.
Mi maquillista llega y me riñe por haber corrido un poco mi maquillaje cuando abracé a papá, el mencionado se queda en la habitación intentando ayudar un poco, sintiéndose un poco mal.
Unos minutos después llega mamá y aunque la situación con mis papás aún es un poco tensa, ya no es incómoda, un día se dieron cuenta de que no podían seguir comportándose como unos niños, por mí y por mi hermana.
— Puedes irte Tomlinson — le dice a mi papá — yo me encargaré de mi hija, ve a ayudar al pobre muchacho que está que se lo lleva el diablo de lo nervioso que está.
Papá niega con la cabeza y suspira, estoy segura de que ya sabía que Dereck se iba a poner así y ¿Quién más para ayudarlo a poner los pies en la tierra que un hombre duro y directo? Ese hombre es mi padre.
— Le dije a ese muchacho que se quedara quieto por unos momentos — susurra por lo bajo.
— Pues no te hizo caso, porque ahora mismo está acabando con todo el banquete que hay en el bar — dice mamá rodando los ojos.
Río muy fuerte, porque así es Dereck, lo conozco bien para saber que lo que dice mamá es cierto.
Llevamos viviendo juntos tres años, pero aún se pone nervioso por firmar un papel, que oficialmente nos hará esposos y una sola familia.
Bueno, yo no digo mucho, porque creo que estoy igual o peor, considero que la segunda. Siento que mi cuerpo está sudando mucho, también siento que voy a arruinar el vestido por lo nerviosa que estoy y por caminar por toda la habitación.
— Calma — me dice ahora mamá a mí — es solo un papel.
Intento respirar con normalidad no quiero arruinar nada de mi maquillaje, costó mucho hacerlo.
— Si mamá — susurro — es mejor que me calme, he estado esperando por mucho tiempo. No puedo arruinarlo por unos simples nervios — suelto una risita que da a entender que no estoy para nada calmada.
Luego de un par de minutos más, por parte de mamá intentando calmarme y yo dando vueltas por todas partes, es hora de salir.
Mi hermana me espera junto a papá en las escaleras, ambos se ven muy guapos.
— Te ves hermosa hermana — me dice mi hermana.
— Gracias — digo con la voz entrecortada.
Una vez termino de bajar las escaleras, tomo la mano de papá, quien me conduce hasta la entrada donde se llevará a cabo la ceremonia.
Ambos decidimos que lo mejor sería una celebración por lo civil y así se hizo.
Al las puertas abrirse, no puedo evitar sentirme maravillada por como quedó todo, un montón de flores decoran el lugar, las sillas de los invitados están cubiertos por una cinta dorada, en el altar donde me espera Dereck hay un montón de luces. Y justo a su lado hay una canasta con todas las cartas que le escribí.
Sin dudas un gran detalle.
De la mano de papá camino hacia Dereck, no puedo evitar ver como mi futuro esposo tiene los ojos cristalinos, eso me conmueve, mi maquillista me va a matar.
Cunado llego a su lado papá le entrega mi mano y Dereck la toma con gusto.
— Cuídala, porque ella es única — le dice papá.
Unas lágrimas salen de mis ojos, de nuevo. Estoy siendo muy llorona.
Dereck asiente y ambos miramos hacia el frente cuando el abogado comienza a hablar.
— Dereck Lander ¿Aceptas a Saray Tomlinson como esposa, para amarla y respetarla hasta el resto de tus días? — cita el abogado.
— Acepto — dice Dereck sin reparos.
— Y tú Saray Tomlinson ¿Aceptas a Dereck Lander como esposo, para amarlo y respetarlo hasta que la muerte los separe?
Voy a dar mi respuesta hasta que escucho un grito al final del patio.
— Yo me opongo — dice una persona.
Todos nos sorprendemos al ver a Noah, quien luego de un rao comienza a reír.
— Lo siento, lo siento — dice mientras, literalmente se muere de risa — siempre quise estar en una boda donde pueda decir eso — se sienta aún riendo — pueden seguir.
Dereck rueda los ojos con una sonrisa.
— Saray, esperamos tu respuesta.
— Acepto — digo con una sonrisa.
Nathalie se acerca a nosotros con los anillos, Dereck toma uno y comienza a decir sus votos.
— Saray Tomlinson, te tomo a ti como mi esposa, para estar siempre contigo, en las buenas y en las malas, para leer tus locuras y reír contigo, porque cuando tú estás en mi vida todo se vuelve más colorido. Prometo siempre tener un sobre a la mano y tinta para que ambos podamos seguir escribiendo nuestra historia.
Para este punto mi maquillaje debe ser un desastre y no me importa.