Capítulo 07

18 horas antes de la boda.

Elizabeth

No volvimos a tocar el tema de Michael, no desde que colapse en la cafetería. Las únicas que sabían sobre eso eran Cora y Michi, y preferí que se mantuviera así, no quería más problemas para mi familia.

—¡Es injusto que ellos puedan salir, y nosotras no! —escucho la queja de Michi, también amiga de mi infancia y de Cora.

—Michelle, ustedes son menores de edad —dice papá.

Estaba sentada en el sofá con John al lado, quién esperaba a Chris para salir a una “tranquila” noche de despedida de soltero. Y Michi y Cora, se quedarían conmigo a pasar la noche, ya que, al no tener mayoría de edad, no nos dejan entrar a ningún bar.

—No te molesta, ¿verdad? —me pregunta John.

—Claro que no... —niego divertida.

—¿En serio?

—Solo...no te atrevas a engañarme con la primera mujer que veas. —bromeo, y terminamos riendo.

Ding dong.

—¿Por qué nos reunimos aquí? —pregunta un Alex confundido -mi otro hermano-, cuando entra junto a Chris.

—Porque tengo que hacer algo. —refuta John.

—¡Viejo, estás muy elegante! ¿Quién es la afortunada de esta noche?

—Alex, respeta a tu padre.

Todos volteamos a ver a mamá, y wow, se veía hermosa.

—Mamá, te ves... —Alex, no digas nada estúpido, no digas nada estúpido. —¡Muy ardiente!

Abrí la boca perpleja, ¿En serio acaba de decir eso? Papá le da un zape en la nuca.

—¡Auch!

—Cariño, estás bellísima. —los ojos de papá brillaban al mirarla.

—Gracias... —sus mejillas se tornan de un rojo pálido.

—Eh, Chris, John, se está haciendo tarde.

—Ustedes...vayan subiendo al auto, ahora los alcanzo.

—¡Oye, agradece que estas aquí, se supone el novio no puede ver a la novia antes de casarse!

—Alex, deja de ser dramático... —Chris toma a Alex del brazo, y lo saca de la casa. Voltea a mirar a John. —Te esperamos en el auto.

Papá le extiende el brazo a mamá, estos también decidieron salir, para dejar un tiempo con mis amigas.

—Llegaremos en eso de las 12:00 AM, no se duerman tarde, recuerden que mañana nos levantamos temprano. —dice mamá, y después sale junto a papá.

—Nosotras iremos a preparar todo.

Cora y Michi se van al piso de arriba. Y solo quedamos John y yo en la sala.

Miro a John esperando algo.

—Yo...realmente, escribí lo que iba a decir... —se le veía muy nervioso. —Sé que no nos conocimos de la mejor manera, ni tampoco somos tan cercanos para dar el paso que nos están obligando a dar. Quiero que confíes en mi, que puedas ver un amigo en mi, así como yo también, quiero que, seas mi amiga.

» No solo la chica con la que me están obligando a casarme... —saca una pequeña caja de terciopelo color lila, mi corazón hace un boom. —Este anillo estuvo por generaciones en mi familia, quiero dártelo de la manera correcta, no quiero esto comience con el pie izquierdo. —pone la rodilla izquierda en el piso, abriendo la cajita, dejando ver un anillo de oro sencillo. Alza un poco la mano quedando el anillo en medio de los dos. Sus ojos me miran con una intensidad, que hacen que me tiemblen las manos. —Así que...

» Aria Elizabeth Evans McCabe, te pido de corazón, que aceptes este anillo en símbolo de un nuevo comienzo junto a mi, Elizabeth ¿Aceptas ser mi esposa?

Silencio. Eso fue todo lo que quedo luego de sus palabras. Mi mente esta en shock, a pesar de que sabía que nos casaríamos, no pensé que se molestaría haciendo algo como esto. De cierta forma, era romántico que quisiera hacer esto.

—Elizabeth...

—Mmmm...

—¿Si sabes que no puedes decir que no verdad? —la pequeña broma me hizo reír, aligerando el ambiente.

—Si, acepto casarme contigo. —se para, y me ayuda a ponerme el anillo. Veo como este brilla en mi mano, y.…simplemente es increíble. El estruendo de la bocina del auto nos hace reaccionar.

—Esa es mi señal. —lo acompaño hasta la puerta, me quedo en el umbral de esta. Veo como se devuelve.

—¿Se te olvi—

Beso. No duro más de 15 segundos, pero si lo suficiente para que me quedara congelada.

—¡¿No te basta con que te vas a casar con ella, y ahora la besas en nuestras propias narices?! ¡Estas muerto, Morgan!

—Nos vemos mañana.

Se van, y yo sigo en el mismo lugar. Siento que alguien me observa, pero no veo a nadie, cierro la puerta, paso por la cocina y apago las luces, y voy al piso de arriba.

Cuando entro, me encuentro con dos adolescentes dando vueltas por toda la habitación.

—¿Qué están haciendo? —ambas tienen un desastre en toda la habitación.