La historia con la que crecí

La vida es lo que hacemos de ella. Los viajes son los viajeros. Lo que vemos no es lo que vemos, sino lo que somos.
— Fernando Pessoa

Tomo un último sorbo de mi taza de té mientras me dirijo a la puerta de mi oficina, recientemente había comenzado el día y del otro lado ya me esperaba Monica con el expediente de un nuevo paciente ingresado el día de ayer en la mano.

—¿Que tenemos hoy? —Le preguntó mientras ambas avanzamos por los pasillos del Hospital Psiquiátrico.

—Un hombre, de entre 35 a 40 años, lo encontraron desnudó en la calle, asegura viajar en el tiempo. —Me dice como si nada y la verdad es que después de pasar años trabajando en el Hospital se hace recurrente escuchar historias poco posible, con el tiempo terminas acostumbrándote.

—Muy bien, Gracias Monica —Monica asiente mientras se da la vuelta de regreso a su lugar.

Continuó caminando por el pasillo hacia la sala de interrogatorio, sacó la grabadora de mi bolsillo y oprimo el botón para que comience a grabar mientras leo el papel.

—Informe de ingreso del paciente NN, hora de ingreso 9:20 viernes 21 del octubre del 2022, numero de ficha clínica 63. Examen físico, hombre aproximadamente de entre 35 a 40 años, trigueño con textura mesomorfa, sin identificación. El paciente fue encontrado desnudo en la vía publica y derivado a la unidad de psiquiatría por delirio con agitación marcada, comportamiento violento y confusión. Diagnóstico, psicosis paranoide con ideaciones y pensamientos delirantes inconexos con la realidad que se organizan en la idea central de que proviene del futuro. Tratamiento y manejo se procede a estabilizar su psicosis con antipsicóticos de segunda generación, olanzapina 500 miligramos endovenoso y haloperidol, se evalua y el paciente se tranquiliza. Se indica una terapia conductual y grabaciones de las sesiones para su posterior evalucacion por el comité de psiquiatría. Doctora Elisa Aldunate.

Justo cuando termino de hablar e llegado a la puerta, la abro despacio para ver al paciente sentado detrás de la mesa justo al medio de la habitación, el paciente sigue cada movimiento que hago pero intento no mirarlo mientras me apresuro a sentarme frente a él.

Colocó la grabadora a un costado y mi libreta frente a mi mientras la preparo para comenzar a grabar.

—Hora 10:30 del 22 de octubre del 2022, primera sesión caso 63 para el registro, cuando suene el bip comenzamos.

Lo miro.

—¿Cómo quiere que lo llame?

—Hola, buenos días — Me responde, su voz suena tranquila y algo áspera.

—Buenos días, ¿me puede decir cómo quiere que lo llame?.

—Por mi nombre o cómo caso 63 según veo ahí, me da igual.

—Diga su nombre y su edad.

—Me llamó Pedro, Pedro Roiter, tengo 39 años.

—Diga por favor para el registro de donde viene.

—Vengo de México. —Levantó mi mirada de la libreta.

—¿Y lo que mencionó?

—Vengo del año 2062.

—Eso es en el futuro.

—Para usted, si —Susurra.

—¿Perdón?

—Que para usted, si es el futuro.

—Ok, entonces usted dice venir del futuro. —Parece saber cual es mi siguiente pregunta cuando me responde.

—No tengo pruebas Doctora...

—Aldunate, Doctora Aldunate.

—No tengo pruebas Doctora Aldunate, lo siento.

—No le parece que con una afirmación tan inusual debería estar acompañada de alguna prueba... para poder creerle digo.

—No me interesa que usted me crea, no se ofenda pero no, no es mi objetivo, por lo menos no es mi objetivo principal. —No quitaba su mirada de mí mientras continuaba escribiendo, la forma en la que hablaba, se veía serio y seguro.

—Pero estará de acuerdo conmigo que es una afirmación no muy usual.

—Si, pero usted esta acostumbrada Doctora, supongo que no soy el primero en esta sala que viene con delirios extraños, lamentablemente creo que no soy el primero en su vida, ¿o si?

—¿Perdón? —Suelta una pequeña risa mientras pone ambas brazos sobre la mesa.

—Paciente delirante me refiero, asi que no me haga caso, anote ahí en su cuaderno —mueve su mano fingiendo escribir. —Que soy un hombre con algún tipo de disfunción mental que está en con brote un de psicosis y los dos quedamos felices, le parece.

—¿Usted esta conciente de que tiene un brote psicótico?

—Usted tiene que decidir eso, no yo... Doctora usted ya tiene su diagnostico preconcebido hace horas. —Vuelve a recostarse en la silla sin quitar ambas manos de la mesa. —Todo esto, la grabadora, esta conversación, este show para que parezca científico algo que usted y yo sabemos que es tan efectivo como un cura haciendo un exorsismo o un medico brujo agitando ramas, los dos sabemos que usted hace este juego para seguir el protocolo, poder tener el diagnóstico, poder ponerme un número, llenar esa ficha y asi dormir tranquila, no, no me interesa jugar a eso, usted no es la importante en este juego.