Caso 63

Jemmy Button

No viajes en el tiempo al pasado vagando por los matices como si pudieran cambiar, no marques las páginas que has leído.
—James Altucher.

 

 

 

 

—Para el registro, doctora Elisa Aldunate sesión número 7, caso 63, 28 de octubre del 2022, nos acompaña Andrés Gómez, doctor en física de la Universidad de Chile, con un post doctorado en el MIT, señor Roiter, además de ser físico, Andrés es un gran amigo mío, por eso le pedí que me acompañara en una de mis sesiones.

—Veo que cada día trae a alguien nueva doctora, me siento halagado.

—Hay preguntas que simplemente no sabría hacerle y Andrés está acá para hacerlas.

—Ajá, Jemmy Button.

—¿Perdón? —Andrés mira a Pedro.

—En 1830 mientras cartografiaba a los canales de Tierra del Fuego, el capitán Robert FitzRoy capturó a unos fueguinos y lo llevo a Londres, uno de ellos cambiado por un botón de nácar. Fue despojado de su nombre impronunciable y le pusieron Jemmy Button, porque fue comprado por un botón.

—Sí, sí sé la historia... —Andrés parecía confundido y a la vez divertido con lo que Pedro le decía.

—De los canales del fin del mundo a Londres, para Jemmy fue como viajar al futuro, lo interrogaron, analizaron y midieron, parece que ese es el destino de los viajeros en el tiempo, ser sujetos en exhibición.

—Me dice Elisa que, según usted gracias al descubrimiento de una cultura ancestral en Marte, el viaje en el tiempo es posible o, mejor dicho, será posible.

—Correcto.

—Y le explicó algo sobre la alteración de la gravedad mediante.

—Láseres.

—Láseres, si me podría explicar el procedimiento por favor

—¿Para qué?

—¿Para qué? —Andrés me mira.

—Si le voy a explicar cómo viajar en el tiempo quisiera saber qué piensa hacer con esa información.

—Bueno, compararla con los conocimientos de la física actual y ver si lo que dice tiene sentido.

—¿Y si tuviera sentido?

—Si tuviera sentido, se derrumbaría la segunda ley de la termodinámica.

—Y eso lo incomodaría.

—No, sinceramente creo que eso sería imposible, quizás podríamos teóricamente viajar al futuro, ¿viajar al pasado?, la entropía de un sistema aislado nunca puede disminuir, eso es lo que sé. Pero estoy aquí para que me convenza.

—Cómo no, ¿Tiene un lápiz y un papel o algo donde anotar?

—No.

—Toma Andrés. —Le paso una hoja y un lápiz.

—Bueno mire, anote ahí, todo se basa en el condensador del flujo del modelo Braun.

—¿Qué es? —Pedro parecía divertido explicando esto y Andrés más irritado.

—En la clave, es una caja con 3 pequeñas lámparas incandescentes centellantes colocadas en forma de y situada detrás de la máquina del tiempo, nosotros usamos un auto deportivo cuando el automóvil se aproxima a una velocidad de 140 km/h, ocurren muchas cosas, sigo, ¿no?

Andrés deja de escribir, aprieta la mandíbula mientras suspira irritado, lanza la hoja en la mesa mientras ve a Pedro quien no ha dejado de sonreír.

—No, no es necesario, todos vimos esa película. Elisa, gracias por invitarme, pero no quiero perder mi tiempo ni hacerles perder el suyo. —Andrés se pone de pie.

—Creí que el tiempo no podía perderse, hemos hecho un progreso.

—Pedro, por favor, dígale lo que me dijo, láseres circulantes, la gravedad es la clave explíquele, por favor...

—Usted jamás podría comprender una sola palabra de lo que hablo, ¿sabe lo que es la gravedad, realmente? ¿sabe lo que es un typed de fragmentos de bucles?, ¿sabe lo que significa un dominio retrógrado causal transtemporal?, ¿sabe lo que es un tobogán tardis?

El Pedro sonriente y burlón había desapareció y ahora se veía molesto, Andrés que aún seguía en la habitación se da la vuelta para acercarse a él.

—No, no sé, lo único que sé es que usted es un fraude, lo siento Elisa, pero yo no voy a aguantar esto, me voy.

Pedro no se inmuta mientras Andrés sale de la habitación.

—Entonces, señor Roiter, ¿Cuál es la idea de burlarse de mi amigo?

—¿Su amigo?

—Si, mi amigo.

—Yo elegiría mejor a mis amistades, ¿Quién es?, lo Note dominante y seguro de sí mismo, dos indicadores de estupidez, en todo caso se comportó como si quisiera validarse frente a usted, usted le gusta.

—Eso no importa. —No entendía a que venía eso. —Lo que importa es que yo estoy tratando de ayudarlo, a usted.

—Exhibirme como Jemmy Button en las Cortes Victorianas no es la solución de su problema, buscar a otros para creer, no debe importarle lo que otros crean, lo único que debe importarle es lo que cree usted.




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