Caso Cerrado© También es tu madre

El Demandado

Dra. Polo.

—Estamos de regreso amigos. Aquí tenemos a Manuel que está demandando a su hermano Paúl, para que él se haga cargo de su madre de 90 años una vez que Manuel emigre para España, o la suma de $500.000 para llevarse a la madre de ellos a España a una especie de Home adecuado para la señora. Entonces Manuel, ¿cómo calculaste esa cifra?

Manuel.

—Aquí tiene una copia de la página Web de los apartamentos a que me refiero, –le entregó la hoja a la doctora Polo–. El costo varía entre 3.000€ a 4.500€ mensuales según el servicio que se requiera. Suponiendo que cueste 4.000€ al mes, al año sería un total de 48.000€. A eso hay que sumarle el costo en medicamentos, porque ella debe pagar el 50% del costo, esos nos da otros 32.000€, quizás más, para un total de 80.000€. Si sumamos otros 20.000€ por gastos de comida, traslados, médicos especialistas, enfermeras privadas, emergencias nos da 100.000€. Estoy calculando con mucha fe 5 años.

Dra. Polo.

—Okey. Es tu turno Paúl, explica tus razones para no hacerte cargo de tu madre.

Paúl.

—En primer lugar, como lo dijo mi hermano, yo soy 12 años mayor, y por lo tanto él puede atenderla mejor que yo. En segundo lugar, aquí los hospitales son muy costosos, y los medicamentos también, y yo apenas tengo dinero para sobrevivir.

Manuel.

—¿Tu esposa no tiene? Se pudre de dinero, explícame cómo es eso que me dijo mamá que tienes dos hipotecas sobre la casa, y tienes tu otra casa alquilada.

Paúl.

—Yo no puedo pedirle a ella que se encargue de mi madre, sabes muy bien que no la soporta.

Manuel.

—Pero si pudiste cuidar a tu suegra, darle de comer en la boca y literalmente limpiarle el trasero, mientras tu esposa supuestamente salía a trabajar, cuando gracias a tu visa de empresario, tienen seguridad social, lograron la residencia y luego la ciudadanía, eso te ganaste, que ella no cuidara a su madre, ¡por favor!

Paúl.

—Deja la envidia, tú pudiste hacer lo mismo que yo y te quedaste cómodamente en tu casa.

Dra. Polo.

—Paúl, habla conmigo.

Paúl.

—Lo que no le ha dicho él es que ha pasado toda su vida en un psiquiatra, que le ha gritado a nuestros padres, ellos le compraron carro, apartamento, mi esposa le pagó la recepción de la boda, es un vividor.

Manuel.

—¡Dile por qué estuve 30 años con un psiquiatra! ¡Díselo cobarde!

Paúl.

—Porque estás loco, yo que sé.

Dra. Polo.

—Manuel, a qué edad comenzaste a ir al psiquiatra.

Manuel.

—A los 20 o 21 años, no recuerdo bien.

Dra. Polo.

—¿Por qué?

Manuel.

—Debido al maltrato psicológico constante que mi madre me hacía, con el permiso de mi padre, mi conducta social era muy difícil y yo era insoportable, y un día una muchacha lanzó una mentira en la facultad, lo que hizo que ningún estudiante de cualquier semestre me dirigiera la palabra. Me sentía como un fantasma y caí en una profunda depresión, tenía planeado suicidarme. Los vecinos de mis padres vieron mi comportamiento y avisaron a mis padres, y ellos buscaron un psiquiatra, y cual perro me tiraron con él. Imagínese que les pidieron a mis padres una terapia familiar y mi madre salió ofendida sin volver a regresar, y mi padre lo tomó como el capricho de un niño mimado. Nada cambió en la casa.

Dra. Polo.

—Paúl, ¿tú sabías esto?

Paúl.

—Mi madre me dijo que era un ataque de histeria.

Dra. Polo.

—¿Fuiste a verlo cuando eso sucedió? ¿Hablaste con él?

Paúl.

—No Dra. Polo, como lo que tuvo fue un ataque de histeria, no vi la necesidad, y él siempre ha sido un niño mimado, mi papá lo cuidaba demasiado.

Dra. Polo.

—No tanto si permitió que la madre de sus hijos lo maltratara de esa manera, uno se da cuenta de esas cosas. ¿Tu madre no hizo lo mismo contigo?

Manuel.

—Dile por qué te negaste a estudiar en la universidad gratuita, una universidad reconocida a nivel internacional.

Paúl.

—Porque quería graduarme en 5 años, no en 7 años como tú, esa universidad vive más tiempo en huelga que trabajando.

Manuel.

—Di la verdad, di cómo te pegaba con lo que tuviera en la mano, ah, dile la forma tan salvaje como te golpeaba, por eso no regresaste desde que cumpliste 18 años, volviste a venir obligado por tu esposa.

Dra. Polo.

—Manuel, ¿A ti no te golpeaba?

Manuel.

—No Doctora, cuando tenía 3 o 4 años, mi hermano le podrá explicar mejor, mi madre me golpeó como una fiera en mi fiesta de cumpleaños, y los padres de mis invitados la detuvieron y supongo que la amenazaron. Realmente no lo recuerdo, pero mi padre o mi padre lo dijeron varias veces.



#7368 en Fanfic
#26774 en Otros
#8376 en Relatos cortos

En el texto hay: maltratofamiliar, juicio, anciana

Editado: 24.03.2019

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.