Tras la muerte de su padre, Malory Savage, como única heredera, quedó a cargo de la empresa familiar. Savage era una marca de indumentaria femenina conocida en Inglaterra y en el resto del mundo. Miles de mujeres asistían a las tiendas a gastar todos sus ahorros aunque fuese en una sola prenda. Todas querían estar a la moda y Savage podía concederles sus deseos.
Malory pasó de ser una joven universitaria a ser la jefa de un gran imperio. Pasó de ser una chica que solo se encargaba de criar a su gato, a tener bajo control a más de cien empleados. Se encontraba perdida en un mundo que no estaba hecho para ella.
Con el trascurso del tiempo se fue adaptando a su nueva vida hasta convertirse en alguien totalmente diferente. Se había transformado en una mujer que durante el día solo usaba vestidos o trajes, cuyo objetivo de vida era armar una familia con su prometido, estricta, exigente, con aires de grandeza y fría.
Toda su estructura rígida se fue desmoronando poco a poco con el regreso de Hunter Shepherd al país, el hombre que le había tocado el corazón a los dieciséis años.
Malory y Hunter se conocieron en el primer año de secundaria, fueron mejores amigos y luego el amor surgió entre ellos. Cuando llegó la hora de ir a la universidad, sus caminos se separaron. Él decidió marcharse a Estados Unidos a estudiar, mientras que ella se quedó en Londres. Malory sufrió muchísimo con su partida, a tal punto que logró odiarlo. Le costaba entender el motivo de por el cual eligió irse a otro continente cuando en su propio país podía estudiar la misma carrera.
Pero ahora él había vuelto, haciendo resurgir en ella aquellos sentimientos de su adolescencia.
#42506 en Novela romántica
#6923 en Chick lit
romance amor drama secretosdefamilia celos, amor adulto, primer amor drama
Editado: 24.05.2019