Cassie and Victoria

¿Qué es la depresión?

¿Qué es la depresión?

Y

¿Cómo muchos en la sociedad lo perciben?

¿Crees que estaré bien?—Vuelve a formular la pregunta dando la quinta vuelta entre las sábanas.

Es la primera ves en dos meses que decide salir de su habitación para confrontar la situación.Mejor dicho intentarlo. Tuve que forcejear un poco durante un gran periodo de tiempo pero al final se logró y aquí estamos.

—Esparas bien nena.—sacudo la cabeza a los lados afirmando entre suspiros.(Eso creo.)

Sus ataques se hicieron más frecuentes en esos días y tengo miedo de que vaya a tener uno en la calle y no poder ayudarla. Uff...! me aterra tan solo pensarlo.

La miro por segunda vez antes de caminar hacia la puerta de la habitación.Sus ojeras son muy notorias, no se molestó en cubrirlas con un poco de maquillaje, trae puesto solo un vestido azul oscuro una chaqueta de cuero y unas botas. Conociendo a Cassie esto no es para nada una buena señal. La rubia ya no cuida su imagen ,parece que ya no le importa y la entiendo.Tuvo que pasar por mucho durante esos últimos meses.

—Vamos.—Pasa a mi lado,bajamos las escaleras juntas hasta llegar a la puerta. Suspira e intenta poner los pies afuera,cierra sus manos en un puño a los costados,está muy tensa y su respiración se agita.

—Vamos nena,puedes hacerlo.—Digo agarrando su mano derecha para ayudarla.

Cuando por fin salimos de la casa voltea a mirar. Dedica una sonrisa dando a entender que se siente aliviada, le devuelvo el gesto. Nos dirigimos hacia el carro y nos ponemos en marcha.

Llegamos al parque en cuestión de minutos. Compramos helados cada una,de nuestros savores favoritos. Ya sentadas en un banquito cerca del lago ella hace la siguiente pregunta:

—En algún momento... —toma pausa y piensa. —Las cosas que el me dijo ¿Crees que por lo menos una vez fue sincero conmigo?

La miro de reojo y hago pausa para pensarlo.En este momento sé que está muy frágil y este tema es muy delicado.Cualquier respuesta de mi parte puede llegar a herirla y créeme no quiero esto. Quiero decirle la verdad pero no puedo, no puedo hacer eso. A veces la verdad duele demasiado como para aceptarla. Ella ya sabe la verdad,ya le dolió lo suficiente.

—No lo sé, tal vez.—Logro pronunciar entre suspiros.No hay necesidad de recordarle lo idiota que fue. No es necesario decirle una verdad que ya sabe, sería como ponerle más sal a una herida. No entiendo cuál fue el propósito de su pregunta.

Ella solo se limito a mirar el hermoso paisaje frente a nosotras sin decir nada.

La harmonía entre el atardecer y los bellos colores naranjas y rojo que refleja este sobre el lago, los patos nadando tranquilamente y nosotras dos en este preciso momento,es una de las cosas más maravillosas que podríamos tener aparte de nuestra amistad. Esa paz y belleza tan efímera como la vida cuando se desvanece y solo queda oscuridad y las almas perdidas en ella.

Se acerca sigilosamente para reposar su cabeza sobre mi hombro.

—Es hermoso,¿verdad?

—si, lo es.

De pronto la veo,analizo su situación y empezó a pensar en todas las personas que no entienden lo que le está sucediendo, que dicen que los trastornos psicólogos no son reales puras mentiras, formas de llamar la atención. He escuchado de todos:

«Uy si ¡qué difícil salir de casa! »

«Superalo y ya.»

«Estás loca »

«Todos tenemos vidas difíciles, deja el drama ya. »

«La depresión es solo una excusa para no hacer lo que en verdad importa.»

Siempre me he preguntado por qué a algunas personas les cuesta tanto entender que nuestra mente también se puede enfermar como nuestro cuerpo.Cuando alguien tiene dolor de cabeza nadie dice " solo piensa en otra cosa y pasará " cuando tiene una pierna rota " solo tomate unas pastillas "¡ no! en estos casos siempre exigen que hay que ir al hospital.

Pero no saben o no entienden que cuando estás deprimido, lo que puede ser una herida física no es nada comparado a lo profundo y complejo que es la depresión y otros problemas mentales y psicológicos. Esas mismas personas que dudan de tu honestidad son las que luego se muestran tan sorprendidas cuando alguien se suicida, alegando que nunca lo vieron venir, que habrían ayudado si lo hubieran sabido.Si en verdad quieren ayudar a crear conciencia sobre la salud mental solo tiene que escuchar y tratar de entender cuando alguien necesita ser escuchado y dejar de ignorar el dolor de los demás como si fuera a desaparecer sólo porque figen no verlo.Sé que mucha gente no quiere ser ayudada, tal vez porque sienten que no vale la pena o simplemente por el miedo a ser juzgados y créeme lo entiendo, deciden no dar señales de que algo anda mal mientras mueren por dentro. Pero hay otros que si lo hacen, que gritan por ayuda pero son ignoradas y forzadas a luchar para validar lo que sienten.

«Si lloras,eres débil. »

«Si pides ayuda, eres un necesitado.»

«Si te haces daño a ti mismo, estás loco, paranoico...»

«Cuando te suicidas,se sorprenden.»

Oigan la depresión no es una decisión, nadie decide estar triste por qué si.

A ver dime ; ¿Quien en su sano juicio desearía vivir cada puto día y minutos de su vida de una forma tan dolorosa y asfixiante?(Lo pregunto de la manera más gentil posible.)

—Estoy orgullosa de ti. —Digo al reconocer todo el dolor y sufrimiento que está sintiendo.

—Volvamos a casa, tengo sueño...

Nos fuimos del lugar. Al llegar a casa hacemos todo lo posible para evitar encontrarnos y hablar con su madre, pero como dicen por allí " mientras más lo evitas, más te persigue "Para ser específica la ley de Muphy "Mientras más temes que algo suceda más probabilidades tiene de suceder."

—!Ya ves a qué hora llegas a casa y decías que tienes depresión, estás enferma y un montón de mentiras más para justificar la mierda que hiciste.! — Habla la voz chillona de su madre detrás de nosotras. Cassie suelta un suspiro al saber lo que viene.




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