Nunca se dió a conocer la carta escrita por la señorita Adriana. Después de muchos años, sus amigos y su familia, siguieron su curso.
Laura y Fernando, tuvieron una pequeña hija a la cual llamaron "Adriana" . Fernando, después de leer aquella carta, empezó a apoyar y amar más que nunca a Laura, ella por fin abrió una boutique llamada:"El tulipán de mil colores". Fueron felices junto con su pequeña, viajando por el mundo, dándose la atención y amor que cada uno necesitaba.
Los padres de Adriana y de Harold, se volvieron más amigos que nunca, se reunían en un parque que tanto le gustaba a sus hijos, recordaban la niñez de ellos y, fueron felices a su manera. Recordando el pasado y amando el presente sin dedicar todo su tiempo al trabajo.
Adriana y Harold, deben de estar en la nube más grande que la gente pueda ver, tomados de la mano, seguramente Adriana pudo encontrar la felicidad que tanto anheló. O quizá en otra vida, él se hizo los estudios que tuvo que haberse hecho, tomó algún tratamiento para hacer fuerte a su corazón y se casó con Adriana para poder amarse hasta que murieran siendo viejos... Rodeados de sus hijos y de sus nietos... Pero, bueno, eso nunca lo sabremos...