- Yo he buscado a su nieto por mar y tierra - la señora lo miró asustada- no me malinterprete - dijo Rápido- su hijo es un excelente docente y hay una institución que solicita sus servicios - la señora cambió su expresión y lo miró más tranquila.
- Entonces buscan a mi nieto por trabajo! - Minho asintió.
- Me podría dar su contactó? - ella bajo la cabeza apenada.
- Mi nieto no me habla desde su teléfono móvil, el lo hace des un teléfono público, él.. lo prefiere así - dijo ya roja.
- Lo entiendo, le podría dar mi tarjeta? - dijo entregándole una pequeña tarjeta blanca, la señora asintió y una pequeña esperanza de encontrarlo volvió a él.
Salió del local y entró a su auto, abrió el paquete de galletas para ver si todo estaba en orden, al abrirlo el riquísimo olor a galletas recién horneadas binundó el auto, pero ese olor ya lo había percibido hace poco, no?
Flash back
Todo el vehículo hiba en silencio Minho estaba concentrado en su tablet mientras la Alfa mayor estaba en el asiento delantero junto con el chofer, el pequeño se estaba aburriendo entonces sacó de su mochila un pequeño recipiente, lo abrió y un riquísimo olor a galletas con chispas de chocolate recién horneadas inundó todo el automóvil llamando la atención de todos el pequeño cachorro de Alfa no se dio cuenta y concentrado empezó a comer galletas.
- Eunwoo? - él cachorro levantó la vista y se encontró con la atenta mirada de la alfa.
»- Donde conseguistes galletas? -habló fuerte.
- Jisung-ssi las hizo para mí- dijo sonriendo y llevándose otra galleta a la boca.
- Tira eso no sabe lo que contiene - dijo con un tono fuerte la chica.
- No - dijo el pequeño y Minho frunció el ceño su hijo nunca desobedece a una orden.
- Eunwoo? Dijo que tiraras las galletas - el niño se abrazo al recipiente y en ningún momento dejó que alguien se acercara ya que a cualquiera que lo intentaba le gruñía mostrando sus pequeños caninos.
Fin
Rió, rió por lo irónics que era la vida, reía mientras algunas lágrimas caían de sus ojos, otra vez estaba apunto de perder lo único que le quedaba en su vida, de que servía a verlo alejado tanto tiempo de él para protegerlo, cuando al final por un descuido iba a perder a su pequeño cachorro.
Seco rápidamente sus lágrimas y condujo hacia el hospital nuevamente ya estaba oscureciendo por lo que llegaría cuando el pequeño Eunwoo estuviera cenando, después de eso podría comer sus galletas Y así fue, cuando llegó el pequeño estaba terminando su cena, Minho se sentó a un lado de la camilla viendo como su hijo comía pacientemente, cuando el pequeño terminó, sacó las galletas de su escondite, inmediatamente los ojitos del cachorro brillaron.
- Te traje las mejores galletas del mundo - dijo entregándoselas.
- Saben igual a las que prepara papi jisung! - Dijo emocionado, Minho sentia sus ojos aguados por las ganas de llorar, mientras Eunwoo disfrutaba una a una de sus galletas.
- Eunwoo - habló, el cachorro se volteó a verlo parando de comer para prestarle atención a su padre - Quieres que te cuente una historia de cuando aún era cachorro? - los ojitos de su hijo brillaron con aún más intensidad y asintió, estaba realmente emocionado, podría ser por el momento o porque minho jamás había compartido tiempo con su hijo, pero el niño no podía borrar su sonrisa de su rostro.
- " Cuando tenía 10 años me gustaban mucho las golosinas y también las galleta, yo le pedía a mamá que preparara galletas pero ella jamás ha sido buena para la cocina - Eunwoo soltó una pequeña risita traviesa, tapando su boquita - Entonces yo salía a comprarlas a una tienda donde preparan las mejores galletas del universo.
- Tu solito? - preguntó el pequeño, Minho asintió sonriendo.
- Yo solito tomaba mi bicicleta y pedaleaba hasta que llegaba a ... a.. - Minho se puso rojo ya que había olvidado el nombre de la tienda -olvide el nombre - dijo rascandose la cabeza- pero la tienda era muy bonita, cuando te mejores te llevaré, está bien? - Eunwoo asintió - siempre iba ahí, las galleta eran muy deliciosas, también me gustaba ir ahí para jugar con un pequeño cachorro Omega, que era muy gordito y bonito - Minho detuvo su relató ya que había recordado a ese pequeño cachorro.
Flash Back
- Oye Minho.
-Si? - preguntó.
- Ya estoy aburrido - habían pasado horas enteras viendo como niños mayores que ellos jugaban con sus patinetas.
- No molestes jisung, me gusta lo que ellos hacen - El pequeño mega se levantó de dónde estaba sentado sí corrió a esconderse detrás de unos arbustos.
Cuando los niños más grande dejaron de jugar Minho se percató que Jisung no estaba y comenzó a buscarlo desesperadamente, se escuchaban unos débiles sollozos, pero en su desesperación minho sólo podía gritar una cosa.
- Jisung! jisung! Jisung! - Ni una respuesta, desesperado por los sollozos del pequeño gritó aún más fuerte - Jisung, me gustas mucho! Porfavor no te escondas de mi - los sollozos cesaron.
- Tu dijiste que no te molestara - el pequeño omega salía de su escondite tratando de parar sus lágrimas con un puchero en sus labios, Minho al verlo salir de ese lugar corrió a darle un abrazo.
- No seas tonto, no lo dije enserio- Jisung hizó intentó de escapar de el abrazo del lobezno pero Minho se negaba a dejarlo ir.
- Ven con migo - dijo tomando la mano de jisung para arrastrarlo hasta un puesto de golosinas y juguetes - escoge el que más te guste - los ojos de jisung se posaron en un par de felinos afelpados y los señalo - Esos? - asintió, Minho los tomó del puesto y se los entregó a jisung, después pagó por ellos - te gustan? - jisung asintió por segunda vez - como se llamarán?
- Señor azul - dijo sonriendo, "porque? " Pregunto el lobezno alfa - porque se parece a tí - respondió esbozando una calida y dulce sonrisa.