Casualidad O Causalidad

CAPÍTULO 26: JUSTICIA POR MIS MANOS

https://www.youtube.com/channel/UCdne_uqAP1XJgS4BT9_1lTw?view_as=subscriber

Cuando las sombras del dolor nos persiguen, queremos hacer sentir lo mismo o incluso más de lo que estamos sintiendo, pero no hagas justicia propia, ¡espera! porque no hay peor castigo que caer en manos del dueño de todo lo que nos rodea para que, sea Él quien se encargue de hacerlo. Ama a tus enemigos, a todo aquel que te ha lastimado y perdona tantas veces debas hacerlo y así nada oscurecerá tu ser; ten compasión de quién te ha causado heridas porque si esa persona no reconoce sus errores que ¡Dios se apiade! Y tú, busca siempre ser bendición para los que te rodean. Deja todo en manos del cielo y veras que, los planes de él siempre serán mejores.

 “No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor”

Romanos 12: 19-21

 

- ¡Uy pero que castigo le ha dado la vida! -Dijo Tifani. –Nadie esperaba esto.

-O sea que, si no le hubiese pasado eso, ¿no te habría seguido?

-No lo sé, Luna. –Respondí.

-No te habría buscado. Analiza: Él dice que te siguió para contarte su desgracia y si ello no hubiera pasado, a la hora del accidente él no había estado allí y hoy estarías… -Su voz se quebró.

-No pienses eso, tal vez me habría salvado otra persona o tal vez si Ryan y yo hubiésemos salido un poco antes de la finca, no habríamos pasado en el momento que las rocas empezaron a caer; pero, ya de nada vale pensar en esas posibilidades porque el pasado no podemos cambiarlo.

-Pues no me duele lo que le pasó. Se merece todo lo malo que deba pasarle.

-No hables llena de odio, hermanita. El niño que venía en camino no merecía eso.

-Ustedes tampoco merecían todo lo que les hizo, ¿o no, Tifani?

-Luna, a mi si me duele lo que le pasó a ese bebé. Yo soy madre y no puedo imaginar mi vida sin Felipe; quizá tú no comprendes este hermoso sentimiento, pero cuando seas madre entenderás. Los niños son lo más sagrado que hay.

-A lo mejor. –Respondió en tono grotesco. –Pero ¿Quién iba a pensar que al rey le tocaría sufrir de esa manera? -Inquirió.

-Sí, Luna y por eso chicas, no me siento con autoridad moral para seguir en pie con nuestro plan.

- ¿Qué? ¡No es cierto Sara! Me hiciste perder mi sueño y convencer a mis camarógrafos de venir hasta aquí tras de nada ¿Tienes idea de lo que me costó lograr que, ellos aceptaran hacer ésta grabación? ¿Tienes idea de la gran cantidad de dinero que me tocó pagarles para que aceptaran grabar a Daniel desnudo?

-Lo sé, Luna; pero piensa que así nos evitamos un lio. Inicialmente no lo íbamos a grabar y esa idea fue tuya.

-Sí, pero porque quiero ayudarte. -Dijo Luna, reclamando.

-Bueno, no vamos a discutir. Ya no importa quién dio la idea principal, quién dio la central o, ¡las ideas qué sea! lo que importa es decidir si seguimos el plan o no.

-Debemos seguir, Ti. –Habló Luna.

-No, no debemos seguir. -Dije.

-Entonces elige tú, Tifani. -Dijo Luna, enojada.

 

Mi plan consistía en hacerle creer a Ismael que, aún lo seguía amando y seducirlo hasta que se dejara quitar la ropa; una vez estuviera desnudo, vendaría sus ojos y ellas dos llegarían hasta el lugar, le hablarían y le harían creer que todas estaríamos con él esa noche (algo que seguramente le hubiese encantado a su mente retorcida) Mientras ellas le hablaban coquetamente, le colocaríamos unas esposas y lo amarraríamos en la cama y allí, los camarógrafos lo grabarían, le quitarían la venda de sus ojos y él al ver que estaba siendo grabado sentiría vergüenza de pensar que, su video se haría viral en todas las redes sociales.

Ese plan pesado fue perfeccionado por Luna, porque como ella no estaba enamorada de él, era más fría para actuar; pero al final de todo, nunca pudimos hacerlo ¡Fue un completo fracaso! Y gracias a Dios fue así, porque estábamos cometiendo una falta ¡Gravísima! ¡Esa era su intimidad!

Aunque sabíamos que jamás dejaríamos que el video se publicara, nunca se sabe si podría caer en las manos equivocadas.

 

- ¿Y entonces? -Preguntaron al unísono.

-Abortamos misión, espérenme afuera. El plan lo inicie yo, por tanto, decido que, no continúa. Salgo en unos minutos. –Dije, finalizando la llamada.

 

Al salir del baño, Ismael me miraba un poco extraño y preguntó: - ¿Todo va bien? Te demoraste un poco.

-Sí, todo va bien. Es que este vestido es un poco complicado de acomodar.

-Es mejor entonces si no se acomoda ¿No crees? –Dijo, tomándome entre sus brazos.

-No creó. -Contesté.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.