Un día imperfecto

- enserio hiciste eso?- pregunto entre asombrada y divertida

- si, revisa tus redes sociales- señala mi móvil sobre la mesa.

Sobre eso...

- no tengo redes sociales- digo un poco avergonzada, su expresión se vuelve una total sorpresa.

- que? Todo el mundo tiene- dice incrédulo

Si bueno,  no soy todo el mundo

- bueno pero...tu si tienes, muestrame desde tu teléfono la publicación. - incito

 Saca el teléfono de su bolsillo y busca algo en él.

- aquí está- me muestra la pantalla y es...

Le doy un ligero golpe en el antebrazo por chistoso.

- pues no se si te diste cuenta, pero esa es la foto de un mono con peluca, no un anunció de " se busca"- reclamo entre risas.

- no, fijate bien, ahí dice se busca, así que lo publiqué con tu nombré- margarita, la agradable chica de la cafetería llega con nuestro postre, ahora si ordenamos dos, uno para cada uno, tengo un apetito de monstruo.

Wll le dedica un guiño, y ella se lo regresa sonriente

- pero al parecer me he perdido de mucho- sonríe y niega con la cabeza

- solo me agrada - dice viendo al lado por donde se fue la chica - pero volviendo a tu foto,-

Le arrebato su pastel, me mira sorprendido, pues mientras el coqueteaba, yo devoraba mi postre, pero 

Rayos!

Quería más, y el postre que tenía justo enfrente me llamaba a ser robado y devorado.

- debería preocuparme?- sonrió

Ya escuché esa pregunta muchas veces últimamente

- nah, solo lo hago para que lo uses de excusa para que ella vuelva-  me despeina

- oye!!!- replico

- lo siento, verte así- me señala- me parece tierno, eres como la hermana que nunca tuve- sonrió de manera sincera, aún recuerdo la confianza y tranquilidad que sentí la primera vez que lo vi, aún sin conocerlo.

- lo siento- digo avergonzada por robarle el postre

- tranquila, aun me puedes dar esa mitad- señala el plato

Rápidamente lo devoro, dejando a mi acompañante con cara de poker.

Las personas a nuestro alrededor nos miran sorprendidos, hasta que la pareja de enfrente llama nuestra atención.

- tranquilo amigo, cuando el bebé nazca, podrás comer en paz- lo miramos confundidos

- lo mismo pasé yo, - dice la mujer - es normal, lo malo es qué quedamos con libritas de más- hace una mueca.

- de que...- will intenta hablar, pero el sujeto lo interrumpe

- están casados? - pregunta

Will y yo nos volteamos a ver confundidos, 

- no - contesto

Las personas alrededor nos ven reprobatoriamente mientras murmuran quien sabe que.

- bueno...y...es su primer hijo?-.

Ahh ahora comprendo

Uno ya no puede devorar dos postres tres leches porque resulta que ya está embarazada.

Will y yo nos volteamos a ver nuevamente, comprendiendo lo que está pasando.

- les damos de que hablar?- susurra, asiento.

- no, ya tenemos ocho - aguanto la risa

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- viste la cara de la señora de camisa verde- ríe

- si, pero no se compara al rostro que puso la pareja.

- es aquí- señalo apenas llegamos al edificio de sára - 

- aquí?- pregunta extrañado, - dijiste que vivías a las afueras de la ciudad- 

- ah es qué, vengo por mi hija- comienza a toser

- hija?-

- si, tengo una hija- porque eso es

Mi hija

Así lo quiso sára, y yo ya no me imagino sin ella

- tu sola?- pregunta- o es cierto lo que salió en la revista?-

Ya había olvidado ese asunto

- es verdad- confieso - además, estamos casados - le muestro el anillo, - pero will, confío en ti, no digas nada sí-

Lo que menos quisiera es ser el blanco de todos.

- pero tu estás bien? Te trata bien?- pregunta

Sonrío y asiento con la cabeza

- gracias por traerme - me inclino y lo abrazo, me quito el cinturón y antes de salir...- llama a esa chica, y no me refiero para que te lleve el café y un postre, sal con ella- me bajo

Algo me dice que tomará mi consejo

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Gracias por cuidarla tía nat - cargo a mi nena

- sabes que la adoro - 

Claro que lo sé, y cindy a ella.

- es tarde, nos tenemos que ir- me despido

- pero traela mas seguido, si? - asiento y le doy un medio abrazo, para no lastimar a la bebé

- traes auto? - interroga

- no, pediré un taxi- abro la puerta

- espera- entra al cuarto de sára, y rápidamente regresa a mi lado - llevate el auto- me extiende las llaves.

Niego

Ese auto lo compró sára apenas llego cindy a nuestras vidas.

- no, gracias pero...no debería...

- insisto, además esto es tuyo, el apartamento y todo lo que conlleva- dudo, pero al final acepto

Iremos mas cómodas.

Me despido, ella le da un último beso en la mejilla a cindy, quien al sentirlo se ríe y comienza con sus ya constates patadas y balbuceos.

Salgo del apartamento, con toda la intención de ir a casa, preparar algo para cenar, y dormir, ahora daniel tiene turno nocturno, así que solo somos cindy y yo.