CAP 3

Valentino se miraba con frustración al espejo, no sabía que hacer ni mucho menos quería ir al instituto para ser inculpado de otra cosa – Jueves, jueves… Que excusa puedo poner para no asistir un jueves? Siempre hay algún evento – Tomo su cabello con desesperación y permaneció en silencio un par de minutos – Estoy castigado – Recordó lo que sus padres le habían impuesto al enterarse del infortunio con el director – Estoy castigado! Jaja.
Luego de confirmar con sus padres que debería hacer las compras mensuales, procedió a pasar gran parte de la mañana sin hacer nada, tomo un baño y salió dispuesto a cumplir con su castigo. Más tarde al volver a su casa, tomaría un snack y descansaría en su cama, pero al dirigirse a esta se encontró con un teléfono.
Esto no estaba aquí antes – Y no cualquier teléfono, era de su hermana y justo se estaba cargando una foto de cuando ella era pequeña – “No se porque me creo tanto si era tan escuincla antes” Que? – Su hermana lo iba a matar, trato de parar la publicación de eso foto, pero entonces el teléfono decidió pedirle la contraseña (la cual obviamente no conocía) – Oficialmente estoy muerto.

En la tarde…
Teléfono – Julia estiró la mano hacia su hermano, estaba parada en la puerta de la habitación con un semblante muy furioso, el chico le entrego el objeto.
Julia yo- Ella puso su otra mano frente a su rostro como señal de que no hablara – Yo no…
Shh! – Lo apunto amenazante – Esto no se va a quedar así – Y se fue dejando a Valentino con un mal sabor de boca.
Cerró la puerta y soltó un grito de angustia – Mierda!

Al día siguiente sería el cumpleaños de su mejor amiga, llevo con el una rosa falsa ya que ella decía que las reales olían mal. Y también su dulce favorito, la Nutella, esperaba que hoy nada saliera mal.

No sabía que tenías novia Lentin -Lorenzo lo abrazó de los hombros mientras bromeaba – Tu y esa enanita ya están saliendo? Le gustan los ladrones con carita de ángel? – Valentino con algo de disgusto se apartó lentamente de el.
No, somos mejores amigos y está cumpliendo años – Se acomodo el cabello y suspiro – Este es su , eso es todo.
El moreno lo miro con arrogancia y lo detuvo en seco frente a la puerta de su salón – Lo de Julia no se va a quedar sin resolver Lentin, no sé cómo alguien tan bobo como tu le pudo hacer algo así a su propia hermana.
No fui yo.
Lorenzo lo soltó se fue – como digas.
Al entrar todos le aplaudieron mientras le entregaba su regalo a su mejor amiga, ellos llevaban un año y medio siendo amigos por lo que era el primer cumpleaños de la chica en el que estaban juntos – Feliz cumpleaños Sky – El chico la levantó para abrazarla, ella parecía muy anonadada.
Eh, eh gracias – Sonrió algo apenada – Muchas gracias Val, son hermosas – se separaron, tomaron sus respectivos asientos y siguieron su clase con normalidad.

Pareciera que Dios me escucho – Decía Valentino con alegría a la hora de la salida – Hoy no pasó nada, que bien, solo debo ir a la fiesta de Sky con tranquilidad.
Enserio no eres tú el culpable de tanto desastre? – Le dijo su hermana con algo de ironía.
Te lo juro, me conoces con transparencia total desde que me adoptaron – Explico algo exaltado.
Ella lo miro con dudas – Tienes razón, pero… quién estaría inculpándote de robo y diatriba hacia un profesor? Y porque lo haría?
El la miro sin saber que responder, ella solo volvió su mirada a su celular – No lo sé – susurro desanimado.

Más tarde ese día…

Vas caminando? – Su hermana lo despedía en la puerta de su casa – No es algo lejos?
No tranquila, camino rápido y no es tan lejos – Se despidieron con la mano y el empezó su camino.

Durante el camino el chico alto pensaba en lo agradecido que estaba de tener una amiga cómo Sky, tan comprensiva, tan amorosa, atenta y que se preocupaba por el, su felicidad y su bienestar. Era en definitiva su mejor amiga, y no había más nadie tan importante como ella en su vida.
Al llegar se detuvo cerca de la casa, la miraba con anhelo, estaba feliz, quería entrar y pasarla bien con su amiga en el primer cumpleaños que compartían juntos, que tuviera un gran cumpleaños y se divirtieran por completo, pero justo cuando iba a dar el primer paso hacia la calle alguien lo jala a la oscuridad.
Que? – Enseguida sintió como su cuello fue rodeado con algo parecido a una cuerda e instintivamente tomo el objeto con sus manos para intentar quitarlo – Ahg! Ayuda! Ayu-Ah – Apenas si podía pronunciar una palabra, tal vez quien lo estaba asfixiando era más bajo que el ya que se encontraba algo inclinado hacia atrás, lo cual hacía más difícil que se liberará – No… po-porque? – Desesperadamente movía sus piernas para tratar de liberarse, aruñaba su cuello en el vano intento de retirar lo que le impedía respirar, quería gritar, quería hacer algo pero lo único que su ser podía darle era algo de esperanza.
Su último aliento se estaba aferrando a la vida, a la idea no morir tan joven, no quería irse sin antes haber aprendido cosas nuevas, tener grandes experiencias, estar muchos años al lado de su familia y sus amigos, se aferraba a no perder la felicidad que tenía, se arrepentía de haberse quejado por tener días monótonos, se arrepentía de decir que quería otra vida, se arrepentía de no pedirle a su hermana que lo acompañará camino a la casa de Sky – No… No – Lagrimas salían de sus ojos como un amargo sentimiento de que sabía que moriría, moriría solo en la oscuridad, su vida había terminado antes de empezar y eso nada ni nadie lo podría cambiar. Ahora mismo se estaba rindiendo ante todo lo que alguna vez anhelo, su cuerpo ya no podía, se sentía pesado, y sus pulmones ya no recibían oxígeno – Ayuda – La esperanza era lo único que se perdía, ahora lo entendía.
El hueco en su corazón por recuerdos, las lágrimas saladas no sólo por la desesperación de la falta de oxígeno si no también por lo no cumplido, lo que nunca iba a experimentar, esos sueños desconocidos que nunca cumpliría. El querer saber… quien era el soplo que apagaba su vida.
La desesperación de tocar la puerta, un pequeño esfuerzo más y lo podía lograr pero al final le ganó la aceptación de que no pudo, “si te hubieras esforzado más”…
Valentino había muerto.