Parte 3

Asiento de inmediato cuando me pregunta si entiendo todo lo que dice ¿lo hago? No es cierto, muchas de las cosas que me ha explicado no tienen sentido pero ¿tiene sentido que me encuentre dentro de un libro? En resumen todo lo que pude entender es que ellos, lo que sean, son como un gran rosal que ha vivido demasiados años y cuando una de esas rosas muere las demás pueden sentirlo, pero como toda flor su tallo es demasiado importante, Nerium es la base de su especie por ser el único que hasta ahora ha podido utilizar su aroma de adelfa para causar alucinaciones a tal punto que puedes creer que esa es tu realidad, eso explica muchas cosas ¿cierto?

Por supuesto he preguntado cómo alguien que es como un rosal puede ser una adelfa, su respuesta fue simple y vaga: “soy un híbrido”, su padre también lo era, pero cuando pregunte sobre cómo fueron creados o que son en realidad, no respondió.  Espero que con el tiempo pueda entender todo sobre esto, porque a pesar de que sé que estamos atrapados en un libro, todo se siente tan real y cuando lo veo sonreír, quiero llorar sin saber porque ¿Qué sucede conmigo?

- Entonces ¿no puedes controlar el tiempo?- pregunto con curiosidad.

- No.- responde antes de suspirar.

- ¿Puedes volar?- pregunto.

- No.- responde dejando de mirarme.

- ¿Eres a prueba de balas?- pregunto.

- Escucha…- duda antes de hablar.-  somos humanos con rasgos diferentes, crecemos de la misma manera pero envejecemos con mayor lentitud, podemos reencarnar y recordar nuestras vidas pasadas, pero eso no sucede mucho.- me explica.

- Entonces ¿todo es una alucinación controlada?- pregunto.

- Algo así.- responde.- puedo hacerte creer que te encuentras volando pero en realidad estás sentada en una silla por horas.- me dice.

- Pero lo sabrían ¿Cierto?- pregunto.

- Después de  salir de la ilusión si.- responde.- pero por esas horas, pudiste volar.- me dice.

- ¿Puedes hacer llover dinero?- pregunto.

Me mira de inmediato.

- Te dije que no puedo hacer magia, solo soy como una droga alucinógena, así de simple.- responde.

- ¿Simpe? No creo que algo de esto lo sea.- digo.- te vi morir en el baño, lo juro.- vuelvo a decir.

- Estabas dormida.- vuelve a repetir.

- Estaba despierta ¿Por qué no me crees? Estabas disculpándote con Rose y…- me interrumpe.

- No digas su nombre.- me pide.- no quiero creer una conexión entre nosotros porque tienes algo de ella, no eres ella y no tengo tiempo para ello.- me dice.

- No seas un idiota.- le pido con molestia.-  no vine aquí a conseguir un hombre, solo quiero volver a casa con mi esposo.- después de decirlo me arrepiento  cuando luce confundido.

Sujeta mi rostro sorprendiéndome y mira mis ojos con mucha atención.

- Pensé que tu esposo era Nick.- dice con obviedad.

- Cierto.- digo de inmediato.

- No confundas la realidad con la fantasía, lo que sucedió ahí fue cierto, los primeros meses lo fueron, hasta que empecé a repetir el mismo día en sus mentes, él fue real y no has llorado una lágrima por él ¿debería preocuparme?- pregunta.

- ¿Por qué deberías?- pregunto.

- Porque las personas que no pueden amar tienden a ser peligrosas.- responde.- no quiero más peligro.- me dice.

- Quizás yo no puedo amar.- digo con obviedad.

- Todos podemos.- dice antes de alejar sus manos de mi rostro.

Lo veo ponerse de pie  y caminar hacia la ventana de la habitación, mueve las cortinas y puedo ver el amanecer por unos segundos. Miro mi ropa y no quiero preguntarme como la consiguió, unos jeans sueltos y una camisa que luce vieja, es un poco incómodo porque estoy acostumbrada a preocuparme por mi vestuario y como luzco, aquí no me importa en lo absoluto.

- ¿Por qué estoy aquí? Dijiste que me necesitabas.-  le digo, no responde.- Nerium…- dejo de hablar cuando me mira y pone su dedo encima de sus labios.

Me pongo de pie confundida hasta que la puerta es destrozada, retrocedo por la impresión volviendo a sentarme en la cama, miro a Nerium cuando el aroma a rosas me envuelve de inmediato,  veo a dos hombres entrar apuntando con sus pistolas ¿Quiénes son? ¿Qué sucede?  Me quedo quieta cuando uno de ellos apunta hacia donde estoy pero  no me mira ¿Qué demonios? ¿No puede verme? Miro a Nerium sorprendida y veo los destellos dorados en sus ojos, me mira fijamente sin moverse.

Veo a  uno de los hombres maldecir mirando toda la habitación, pongo toda mi atención en el hombre que entra al baño y luego sale con mi vestido en su mano.

- Estaban aquí.- dice con seguridad.

- Demonios ¿Cómo pudo ser tan rápido?- pregunta el otro hombre con molestia.- busca en todos los alrededores, no puede estar tan lejos.- le asegura.

-  Sí, señor.- le responde.

Lo veo caminar hacia la puerta y salir de la habitación quedándose solo uno de ellos, mi cuerpo se tensa cuando toma asiento en la cama a pocos metros de mí, lo veo sacar un celular de su bolsillo y luego marcar algunos números, pone el celular en su oreja luego de terminar, espera unos segundos antes de hablar.