No podía creerlo, estaba furioso ¿cómo pudieron saber que nos habíamos ido? era casi como una mala broma.
— ¿Gabriel? Cálmate.
—Esto es una mierda ¿Karina cómo demonios supieron que nos habíamos ido?
—No lo sé, quizás nunca hubo nada aquí.
—No, no, aquí hubo algo de eso estoy seguro.
Salimos del lugar y yo acelere a todo motor rumbo a mi casa.
Estuve varias horas sin dormir buscando explicaciones en mi cabeza hasta que una idea cruzo por mi cabeza, ¿y si revisaba "El diario"?
Hace varios años David y yo estuvimos encargados de desaparecer a un brujo ingles que había huido de Londres a Latinoamericana y por alguna razón que no recuerdo me quede con su diario de hechizos.
Busque durante un buen rato hasta que logre encontrar un ritual que me ayudaría a revivir el pasado, una vez con todo listo salí de regreso al lugar.
Me escabullí en el lugar y dibuje un enorme ojo de tiza en el centro luego de eso le puse una vela que en vez de dar luz daba sombra y repetí lo que venía escrito en el diario.
—Llamo a los espíritus perdidos entre las sombras y les pido que me ayuden para contactar los entes que van más allá del conocimiento terrenal y mundano—pause mis palabras un momento al notar como un frio viento entraba de la nada pero decidí continuar—les ruego seres exteriores me permitan un ápice de su conocimiento infinito para desentrañar los misterios del presente, pasado y futuro.
En ese momento miles de pequeños murmullos y risas comenzaron a llenar la sala y pude notar una tremenda vibración de energía recorriendo mi ser, retrocedí instintivamente y entonces vi como la vela se des-materializaba, acto seguido el dibujo de ojo parpadeo y comenzó a seguirme con su vacía pupila.
El ambiente era tétrico como si le hubieran extraído la vida y el color, voltee a ver a mí alrededor y note cientos de fantasmas merodeando libremente por toda la habitación, murmuraban y reían diabólicamente al verme. Entonces comenzaron a recrear todo lo que había sucedido en ese espacio, desde masacres de la era de la conquista hasta hace tan solo unas horas, todo en tan solo unos segundos.
Vi a varias personas trabajando, recibían la droga, la empaquetaban y en uno de esos momentos vi al vampiro que había perseguido días atrás.
-Pase madmua...
Fui interrumpido por el ataque de un enorme monstruo parecido a Mitran (el depredador de David) pero este en lugar de una armadura de madera parecía tener piezas de metal pesado que emergían de su cuerpo y en lugar de tener cabeza parecían estar decapitados con una especie de jaula para pájaros hecha de acero negro saliendo grotescamente de su cuello.
Vi su enorme puño acercase literalmente en cámara lenta todo parecía ir en cámara lenta hasta que su puño golpeo súbitamente el piso dejando un enorme hoyo en él.
Me aleje y comencé a dispararle, deje caer sobre el tres rondas de mi revolver pero no parecían afectarle en lo más mínimo, se movía animalesca y erráticamente todo lo que podía hacer era esquivar sus golpes y mantenerme alejado pero tampoco podía huir. Le deje caer todas las bombas que pude sacar de mi sombrero pero aun así era inútil.
El primer golpe que me asesto me lanzo contra la pared y probablemente me había roto algunos huesos, Por algún motivo toque mi pierna y sentí un frasco el cual le aventé sin pensar, segundos después un enorme caballo negro como la noche entro a toda velocidad rompiendo la ventana.
El caballo era negro como la noche más oscura, aventaba fuego por la nariz y su jinete era un charro con sombreros y pañuelo negros que con un látigo engancho el monstruo de la jaula y lo arrastro afuera, luego de eso con una enorme revolver negra lo acribillo con unas balas que parecían ser de puro fuego, era un espectáculo sublime y entonces de la nada galopo y desapareció en fuego.
Como pude llegue hasta el auto y maneje hasta donde David estaba.