25–EL SOL SE ASOMA

VICTORIA

A pesar de todo el drama de los últimos dias y sus posibles consecuencias, mi esposo y yo tuvimos que hacer caso omiso a lo que sea que estuviera pasando a nuestro alrededor e ir a la empresa a trabajar, porque resulta que somos adultos responsables y debemos portarnos como tal, mucho mas ahora que le hemos declarado la guerra a Olga por hija de put4, estoy decidida a verla en 6 meses saliendo de edificio con la cola entre las patas, lo juro por mi vida.

He evitado mirar las redes sociales, de hecho tengo el teléfono apagado desde la fiesta, porque no quiero saber nada, no quiero que nadie me llame, en especial algún integrante de mi familia, de seguro mis padres disfrutaron mucho de mi fracaso. Por lo tanto, la única persona que me importa y con quien deseo estar, en este momento se encuentra a un par de metros de mi, en su oficina aprendiendo a gobernar, el que será nuestro imperio.

A medio día la puerta se abre mientras me encuentro concentrada estudiando a cerca de marketing digital, porque créanlo o no, estoy decidida a aprender y dejar de ser una ignorante. Mi esposo entra como perro por su casa, dándome una sonrisa de esas matadoras que el sabe lanzar y yo levanto la mirada quedando embelesada con su hermoso rostro.

—Deja esa tarea aburrida, te invito a almorzar a ese lugar que vende los Brownies que dices que odias pero que te comes a escondidas cuando crees que no te veo.

Sé que ha estado preocupado por mi estado de animo y por eso se inventa cualquier tontería que cree que me hará feliz.

—Estoy ocupada.

Respondo tajante, quiero salir con el, pero mejor me aguanto, no quiero decirle que la verdad es que estoy tratando de esconderme del mundo exterior.

—Vamos Vitto, ya que me siento generoso, los voy a pedir de postre para mi y luego puedes sacarlo de mi plato mientras yo miro para otro lado, así no te da un ataque de culpa por comer tantos carbohidratos. 

Es tan lindo que no puedo negarme, así que acepto encantada, dejo lo que estoy haciendo y lo sigo al ascensor para bajar al estacionamiento donde está su auto porque, si, aun no comienzo mis clases de conduccion, por ende el hombre sigue llevandome a todos lados cómo mi chofer y esclavo personal. Desde que salimos de casa en la mañana se ha esforzado mucho en hacerme sentir bien y por eso estoy muy agradecida por su actitud, mi sin vergüenza sabe como hacer feliz a esta mujer.
Vamos saliendo del edificio cuando veo que los fotógrafos sensacionalistas han vuelto, se atraviesan frente al automovil cuando se dan cuenta que somos nosotros para obligarnos a detenernos y acosarnos, pero esta vez no voy a esconderme, así que le pido a mi esposo que se detenga por completo y me bajo para enfrentarlos.

Inmediatamente me ven, me rodean y comienzan a disparar los flashes de las cámaras y a lanzar su veneno.

"Vitto, estás muy guapa, ¿ya sabes lo que se dice de ti en redes?"
"¿Que opinas de que eres tendencia en la plataforma X?"
"Dicen que tu suegra te odia…"

Guardo silencio mientras los escucho lanzar sus dardos hacía mi una y otra vez, hasta que me hartan y levanto la mano para que se callen y me dejen hablar; después de mucho pensar llegué a la conclusión de que no voy a darle nunca mas el poder a nadie de hacerme daño, soy lo que soy y nada podrá cambiar eso.

—¿Que dicen? ¿Qué soy una trepadora y caza fortunas? ¿Qué enredé al pobre millonetis para robarle su dinero? Par favaaar, es historia antigua, cariño, ya pasa la pagina.

Me siento fuerte y poderosa y nada de lo que digan va a hacerme sentir menos de nuevo. Uno de ellos toma la palabra y me responde entre risas.

—¿No has visto? Dicen que eres la villana de una historia mal contada, que tu suegra es una perra malvada y clasista que se debe ir al infierno, incluso tienes un grupo de seguidoras que te aman.

Hago un mohín de confusión porque no entiendo de que habla el sujeto.

—¿Qué es lo que dices? 

—Eso, que eres tendencia gracias a un movimiento llamado #SomosTrepadorasyque. #VittonuestraPatrona.

No me lo creo, estoy en shock, estaba segura de que mi imagen estaba por los suelos.

—No es cierto…

Arthur quien se bajó del auto detrás de mi, supongo que con intención de protegerme de los paparazzi, saca el teléfono, busca en la web y me enseña. Al mirar, mi quijada casi toca el suelo por la impresión, hay montones de videos editados de la fiesta, algunos de Olga insultándome y otros míos respondiendo, también hay fotos mías que volvieron memes bastante graciosos, hasta hay unos de Olga y Arthur; miro los comentarios y algunos me hacen reír aunque hay otros realmente llenos de odio, pero la gran mayoría está de mi parte, no faltan los que se creen moralmente superiores y me critican, pero no son muchos. Observo las publicaciones embelesada hasta que doy con un hilo en específico, que atrae totalmente mi atención.

“Al menos es honesta, esa es una cualidad que le falta a la gran mayoría de personas” 
“Amo que ni siquiera trata de justificarse, es mi ídola” 
“La mujer tuvo los guevos de enfrentar a su suegra, todos sabemos que quiso humillarla y dejarla por el piso por ser pobre #TeamVittoforever” 
“¿Has visto como se viste? Mataría por ser ella” 
“¿Como se viste? ¿Es que estás ciega? Mira a su maldit0 esposo” 
“Si, el tipo está tan bueno que si se casara conmigo, yo lo mantendría” 
“x2 amiga” 
“Algo es cierto, si tuviera que ser algún personaje en esta historia, te aseguro que sería Vitto” 
“¿La villana de la historia?” 
“Nuestra villana favorita” 

Así como esos hay muchos mas comentarios y miles de respuestas a favor y en contra y me encanta como me llaman Vitto, el apodo cariñoso que me dio Arthur y que no pensé que fuera a gustarme tanto, un escalofrío recorre mi cuerpo y la piel se me eriza por la emoción, me han aceptado e incluso están defendiéndome de los haters.