CAPITULO 6

Terminé mis tareas en la mansión y luego me dirigí a reunirme con Charles-Henri.

(Ya que hoy habíamos elegido un momento, sería divertido sorprender a Charles con un regalo.)

Él siempre me hacía sonreír, así que quería traer algo de emoción a su vida. Puede que no sea una emoción genuina, pero incluso una pequeña sorpresa estaría bien.

MC- ¿Qué le gustaría a Charles...?

Cuando las palabras salieron de mis labios, una fragancia floral llegó hasta mí en la brisa. Era tan tentadora que me giré y seguí mi olfato. El aroma provenía de un gran carro rebosante de flores de todos los colores, con un hombre de pie junto a él.

(Un florista... ¡Es perfecto! ¡Le compraré flores a Charles!)

MC- ¡Disculpe! Me gustaría comprar unas flores.

HOMBRE DE OJOS CARMESÍ- ......

El hombre se volvió hacia mí y sus ojos se abrieron ligeramente.

CRIMSON-EYED MAN- ...¿No nos hemos visto antes en algún sitio?

Me devané los sesos, pero no recordaba haberme encontrado antes con este hombre.

MC- Lo siento, pero creo que no.

(Seguro que recordaría una cara tan bonita como la suya)

HOMBRE DE OJOS CRIMSON- Perdone la pregunta. Dijiste que querías unas flores. ¿Son un regalo?

MC- ¡Sí! No es una ocasión especial ni nada, pero me gustaría regalarle algo.

HOMBRE DE OJOS CRIMSON- Qué bonito pensamiento. Después de todo, no hay ninguna regla que diga que necesitas una razón especial para regalarle flores a alguien. Veamos... ¿Sabes cuál es su color favorito?

(Su pelo me recuerda a los lirios de resurrección, así que tiendo a asociar ese color con él, pero en realidad nunca se lo he preguntado).

Negué con la cabeza. El florista me pidió que describiera al destinatario para poder crear un ramo a medida.

(Es la segunda vez hoy que alguien me pide que describa a Charles...)

MC- Se comporta como un gato amistoso... Y hace lo que puede para ayudar a los demás. Y tiene la sonrisa más bonita. Sólo con verla, todas tus preocupaciones desaparecen.

Está claro que te preocupas mucho por él.

MC- Bueno... Claro que me preocupo por él, pero... Charles y yo no estamos, ya sabes, juntos...

¿Charles?

MC- ¿Pasa algo?

CRIMSON-EYED MAN- No... Sólo estaba pensando en lo bonito que era ese nombre. Pues bien. Haré el ramo perfecto para tu persona especial.

Sonrió, entrecerrando sus ojos rojos como la sangre, y empezó a arreglar las flores. Sus manos se movían con la gracia fluida de un bailarín.

HOMBRE DE OJOS CRIMSON- Et voila. Un ramo de lirios rosas de la resurrección. ¿Qué te parece?

MC- ¡Oh, es perfecto! Exactamente lo que imaginaba.

Me alegro de que te guste. Aqui tienes...

Extendí la mano para coger el ramo terminado. En ese momento, una repentina y violenta ráfaga de viento me hizo tropezar. El florista me tendió la mano para sostenerme.

MC- ¡Lo siento mucho! Me he sobresaltado...

HOMBRE DE OJOS CARMESÍ- ...

MC se marchó con paso ágil y el ramo de lirios de la resurrección cogido con cuidado con ambas manos. Vlad la miró marcharse, con los ojos entrecerrados, pensativo.

VLAD- Puede que no recuerde tu cara... pero recuerdo tu calidez. Sabía que eras tú...

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¿?- No estás sola.

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VLAD- La mujer de esa mansión que Charles ha estado viendo... Se llamaba MC, ¿no? Nunca soñé que fuera la misma persona...

El viento fresco que agitaba los cabellos plateados de Vlad traía consigo una premonición de lluvia.

VLAD- ¿Por qué me siento tan agitado?

Impulsado por aquella inquietud, Vlad regresó a su castillo. Se detuvo ante otra puerta, casi idéntica a la de la mansión del Conde.

VLAD- ......

Con la mirada de quien necesita la confirmación de una teoría, empujó la puerta. Sus ojos se abrieron de par en par, momentáneamente sorprendidos por el vacío retorcido que se extendía más allá; luego, sin pensarlo más, saltó a través de la puerta. Era imposible saber cuánto se había alejado en el espacio-tiempo, pero no pasó mucho tiempo antes de que el campo de visión de Vlad se ampliara. Un espacio tranquilo, iluminado a través de vidrieras... empañado por el penetrante olor a sangre. Vlad recuperó el aliento ante la visión arrancada de los remolinos del espacio-tiempo.

VLAD- Esto... Esto es...

Me apresuré hacia el lugar donde habíamos quedado, con el ramo en la mano. Vi que Charles-Henri ya estaba esperando, apoyado contra una pared. Charles-Henri se apresuró a acercarse, parecía contento de verme.

CHARLES-HENRI- ¡MC! Qué suerte tengo de volver a verte hoy.

Saqué el ramo de lirios de resurrección de mi espalda y se lo tendí.

MC- Son para ti, Charles. Son lirios de la resurrección.

CHARLES-HENRI- Vaya, ¿de verdad has traído este precioso ramo para mí? Me alegro mucho, MC, ¡gracias!

Charles-Henri las cogió como si fueran un raro y delicado tesoro.

(Jeje. Al verlo tan feliz, siento que soy yo quien recibió un regalo hoy)

CHARLES-HENRI- ¿Cuál es el motivo, MC? ¿Por qué ese regalo tan bonito?

MC- Por nada en particular. Pensé en darte una sorpresa y ver si podía hacerte sonreír.

CHARLES-HENRI- ¿Pero de qué te sirve eso? Si hay algo que quieras, o algo que quieras hacer conmigo, dímelo. No tienes por qué ser tímido. Por eso estás siendo amable conmigo, ¿verdad? No te preocupes, MC... Haría cualquier cosa por ti. Cuando alguien te muestra amor, necesitas mostrarle amor a cambio. Sé cómo funciona.

(¿Qué estás diciendo?)

Por un momento, me quedé sin palabras, incapaz de procesar lo que Charles-Henri estaba diciendo.

NIÑO 1- ¡Son el doctor y la señorita MC! ¿Habéis venido otra vez a jugar con nosotros?

CHARLES-HENRI- Ahahah, ¡hola! Claro, jugaré con vosotros, si MC dice que está bien.