No quiero llorar

La verdad después de haber salido de la oficina de mi padre, solo me hice la interesada en el plan ya que después de esa noticia o mejor dicho después de que me dijera sobre mi viaje no tenía cabeza para pensar en más nada y aunque mi libro es uno de los más conocidos creo que la mayoría de personas creen que lo escribe un hombre nunca había hecho una conferencia de prensa o firma de libros pues por el simple hecho que no me gusta hablar con otras personas, pero creo que ese día llegaría mañana en unos meses o incluso años, pero debía pasar estaba tan concentrada en mis pensamientos que ni me di cuenta cuando terminamos el trabajo, después de cambiarme vi como Ethan y Matías se acercaban a mi en ese momento pensé que era para decirme lo que pasó cuando entraron en la oficina del señor José o eso pensaba yo en ese momento debido a sus expresiones deduje que era para hacerme preguntas o para reclamarme algo eso pensaba.

-Oye niña dinosaurio, ¿Que te pasa?- Dijo mirándome.

-No la llames así- Insinuó Matías.

-No pasa nada no se preocupen- Dije mirando a la nada.

-Estas segura desde que saliste de la oficina de tu padre estas rara- Afirmó Ethan.

-No pasa nada estoy, no pueden solo olvidarlo o dejar pasar esto- Dije con un tono algo alto.

-No tienes que responder así Ethan solo estaba preguntando- Dijo Matías.

-Señorita Charlotte, podría venir a mi oficina ahora mismo- Exclamó el señor José.

-tks... lo que me faltaba que este tonto quiere terminar de dañarme el día- Respondí.

-Porque tienes que responder así que tienes- Dijo Matías algo enojado y serio.

Sé que está mal que le responda así, pero pónganse en mis zapatos una chica como yo enfrentándose a sus miedos y preocupaciones y en esta situación de estrés es muy agobiante tanto que puede hacer que desahogue mi ira o estrés con otros, pero será mejor que valla ahora mismo a la oficina del señor José.

Mire a los chicos y me di la vuelta dirigiendo a la oficina del señor José cuando llegue a la puerta la toque y escuché como decían pase entre, cerré la puerta y me senté en una de las sillas.

-Charlotte, te llamé para preguntarte qué pasó dentro de la oficina del señor Lucas- Pregunto mirándome fijamente.

-El señor Lucas no regaño por lo que se estaba pasando y nos pidió que no se repitiera y menos en la entrada de la compañía- Respondí algo nerviosa.

-Entiendo, si eso es todo te puedes retirar- Afirmó.

-Esta enojado por eso, si es así de verdad lo siento- Afirme apenada.

-No solo quería saber- Dijo algo serio.

-Señor José quería pedirle un favor- Dije mirándolo a los ojos.

-Claro que sería-

-Mañana o pasado tengo que viajar a California y quería saber si me podía dar permiso- Dije tímida y con la mirada en el suelo.

-Primero confírmame que día, segundo si demora mucho y es urgente entonces cuenta con el permiso- Dijo serio.

-En serio, gracias- Dije emocionada y soltando una pequeña sonrisa.

-Ya puedes retiraré... ah antes de que se me olvidé este es mi número escríbeme y confirme el día de tu viaje- Dijo mientras me daba un papel el cual contenía su número.

-Claro, gracias de nuevo- Dije mientras salía de la oficina.

-Como te fue, cierto debería preguntar por qué la niña dinosaurio está que mata a todos con la mirada- Insinuó Ethan.

-Lo siento con ambos es que no me gusta la idea de viajar y menos de hablar me frente de muchas personas y creo que desquite mi enojo con ustedes y no se lo merecían, lo siento mucho- Dije llorando.

-No queríamos hacerte llorar, mira lo que hiciste Ethan- Mencionó Matías.

Salí corriendo de ahí sin mirarlos y corrí hasta la oficina de mi padre abrí la puerta y el me miró preocupado ya que era la primera vez desde la muerte de mi madre que lloraba de esta manera.

-Charlotte, ¿Que pasa?¿Estas bien?- Dijo levantándose de su silla para abrazarme.

-!!Papá¡¡- Dije gritando y llorando.

Cuando dije eso abrieron la puerta de la oficina eran los chicos junto con el señor Arturo, Laura y el señor José.

-Eres la hija del dueño- Dijo confundido el señor José.

-Esta bien señorita Charlotte- Pregunto el señor Arturo.

-No no estoy bien, estoy cansada de no decir cómo me siento, extraño a mamá- Dije llorando.

-Hija ella ya no está- lo interrumpí.

-Lo se y eso es lo que más me duele, y el haberme desquitado con mis únicos amigos me duele más todavía, señor Arturo podría llevarme a casa no quiero estar aquí- Dije mientras limpiaba mis lágrimas y salía de ahí.

Ya no podía seguir escondiendo lo que siento, esto me estaba haciendo mal y todo lo que había pasado este día creo que fueran las gotas que derramaron el vaso, un vaso que creí haber superado hace años pero que al parecer todavía me consume y entre más quiero esconderlo más termino mostrándolo.

Cuando me disponía a salir Laura me tomo del brazo.

-Charlotte si quieres hablar con alguien sobre lo que sientes puedes- No la dejé terminar cuando mencioné lo siguiente.

-Tu no eres mi madre y nunca lo serás y prefiero tragarme mis sentimientos y palabras a contarte como me siento nunca ocuparas su lugar y no quieras interesarte por mí vida porque no me voy a desmoronar no lo hice hace años y mucho menos ahora se controlarme y reprimir lo que siento no quieras hacerte la heroína ahora por favor- Dije mientras me soltaba para después salir de ahí dirigirme al auto.

[Creo que fui un poco cruel, pero eso fue lo que sentí, no quiero llorar no quiero que me tengan lástima y mucho menos que crean que soy una persona que no es capaz de controlar lo que siente, me e desahogado gritando y llorando y dejando salir mi enojo pero e herido a todos y eso me hace sentir mal.

-Bájate de esa nube Charlotte crees en serio que ellos te volverán a hablar después de lo que hiciste y como los trataste eres una tonta si crees que eso pasará me dije a mi misma, limpie mis lágrimas y vi como el señor Arturo subía al auto y emprendimos el viaje a casa]