Una nube de vapor se esparció por la habitación cuando Mina salió del cuarto de baño. La joven se sentó en su cama y comenzó a secarse vigorosamente la dorada cabellera con la toalla color rosa en la que estaba envuelta al terminar la ducha. Se había quedado varios minutos contemplando como el agua se escurría por el desagüe hasta que se acordó de su escasa cuota semanal de agua para higienización y soltó un par de palabrotas dirigidas principalmente a ella misma. Seguramente recibiria una reprimenda de Amanda, pero eso era lo que menos la preocupaba ese dia. Ahora había dejado de frotarse en cabello y contemplaba la pantalla que ocupaba la parte superior de su escritorio. Las fotografías que se sucedían a intervalos regulares mostraban a sus amigos y conocidos. Ver a Matt en esas fotos era lo que menos quería hacer en ese momento.
-Música. -Dijo y la fotografía de Matt y Manuel sentados a horcajadas de un misil Zentradi desactivado (Ojalá que haya estado desactivado-Pensó Mina-, aunque siendo cosa de Will, no estaba completamente segura) que en ese momento ocupaba la pantalla fué reemplazada por la interfaz de un reproductor de música con una lista de canciones elegidas por ella. El primer tema comenzó a sonar: Diamond Crevasse. Definitivamente el Universo conspiraba para evitar que su ánimo se levantara.
Sheryl Nome era una artista bastante nueva en las listas de música populares. Su primer disco había conseguido que 3 hits ocuparan lugares en los 10 primeros puestos del ranking de la MBS. Para un artista recién consagrada era un logro extraordinario.
Ahora la pantalla mostraba la imagen de tapa del disco de Sheryl mientras una serie de fotografías de la cantante giraban por delante y por detrás del mismo. Mina cerró los ojos y escuchó la música mientras su imaginación flotaba a la lejana flota Galaxy, un lugar maravilloso de donde provenian los mas grandes avances en tecnología y entretenimiento. Lamentablemente se encontraban en, prácticamente, extremos opuestos de la civilización humana. Mientras todas las flotas se acercaban al centro de la Galaxia la Rainbow estaba anclada en el rincón más alejado de la misma.
Mina abrió los ojos y contempló el rostro de Sheryl. Era bellísima y su voz llenaba su corazón de gozo, pero no con Diamond Crevasse, esa canción en particular la hacía pensar en una Sheryl mucho más íntima, mucho más cercana a los sentimientos de tristeza y soledad que a la alegría y desenfreno de la que hacía gala en el escenario cuando su cuerpo saltaba al ritmo de Don’t be Late.
Del otro lado de la habitación una pequeña canasta se sacudió y un animalito salió por la abertura circular. El Kiklo comenzó a estirar sus patas delanteras mientras bostezaba despreocupadamente.
Mina suspiró y tomó un cepillo de encima de una repisa cerca de la cama. Comenzó pacientemente a desenredarse el cabello mientras reflexionaba en los acontecimientos del día. Matt había actuado de una manera extraña, la manera en que se había comportado frente a la inspectora le pareció completamente desconcertante. Al recordar como había apretado los puños y parecía a punto de saltar hacia adelante... Mina no recordaba nunca haber visto asi a su amigo desde que se conocian.
Se sobresaltó levemente al sentir el roce de la piel de Gubaba en sus tobillos. (Al fin y al cabo el Kiklo había sido un regalo de Matt y ponerle ese nombre había sido un gesto de retribución por parte de ella para con él). Levantó una de sus piernas y el animalito trepó por ella hasta la cama donde se acurrucó sobre la toalla que había quedado al lado de la joven.
La situación era la siguiente, pensaba Mina mientras acariciaba al Kiklo. Los planes de Matt de abandonar la Colonia en ese robot dependian enteramente de la ayuda de Will. Su amigo carecia por completo de conocimientos generales de mecánica y si lo que Ralph le habia insinuado era cierto, la armadura no estaba preparada para que la pilotara un ser humano. Se requería una cabina que sirviera de Proxy entre el piloto y la aviónica Meltran... o bien que Mat se sometiese al proceso de Zentranización, cosa que quedaba completamente descartada.
Ralph afirmaba que Will no podría construir una cabina de ese tipo. Se requeria el acceso a material que no estaba disponible en la colonia.
Claro que siempre podrian comprar partes y equipos por el portal de importación y que la Rio Grande los trajera junto con las demás provisiones del mes, pero importar esas piezas no era económico ni escaparía al riguroso control de Amanda... no, Will no seria tan tonto para hacer eso.
El sonido de un timbre la sacó de sus cavilaciones. Inmediatamente hizo un gesto hacia la terminal del escritorio con los dedos pulgar e índice formando un círculo. La computadora interpretó el gesto y una ventana de video se abrió en el centro de la pantalla simulando la mirilla de la puerta del camarote. Matt estaba en el pasillo al otro lado de la puerta con la cabeza gacha.
Mina se sobresaltó y de un salto se levantó de la cama (tirando la toalla y a Gubaba al piso) y corrió a abrir la puerta. Solo al poner la mano sobre el picaporte se dió cuenta de que estaba completamente desnuda. Dió media vuelta y totalmente avergonzada corrió al guardarropa a buscar algo que ponerse.
Matt aún estaba indeciso sobre lo que le iba a decir a Mina. Habia venido a verla para disculparse, pero sabia que esta vez tendria que sincerarse con ella. La situación ya de por si era bastante mala como para seguir ocultandole sus planes. Akemi tenia razón en algo, se estaba comportando como un idiota con sus amigos. Ellos no se merecian eso.
El problema era cómo explicarle a mina la resolución que había tomado en caso que de que el peor escenario se cumpliese. Estaba seguro que su amiga haría todo lo posible por impedirlo, incluso intercediendo ante Amanda.
Mientras meditaba sobre esto no se percató de que la puerta estaba abierta y que Mina lo estaba mirando. Parecia haber salido hace poco de la ducha y todavía llevaba el cabello húmedo. Tenía puesta una remera gris que le quedaba extremadamente grande, llegandole casi hasta las rodillas.
-Mina yo..
-Esta bien, pasá Matt. -Dijo ella despreocupadamente.
El joven entró despacio a la habitación. Ya conocía el cuarto de mina de memoria, habían jugado en ese cuarto junto a sus amigos en incontables ocasiones. Solo que ultimamente hace tiempo que no entraba; no había más juguetes en los estantes y la habitación estaba pulcra y ordenada al extremo. Mina se dirigió a su escritorio y se sentó en la silla frente a la computadora. Matt se sentó en la cama y levantó la toalla que estaba tirada al costado de la cama cuyo extraño movimiento delataba la presencia de Gubaba debajo. El animalito soltó un chillido al ser levantado pero al reconocer a Matt se puso a ronronear.
-Hola Gubaba. -Dijo mientras se ponía al Kiklo en brazos.
La computadora reconoció la voz de Matt y automáticamente insertó varias canciones de Fire Bomber en la lista de reproducción y “My Soul For You” comenzó a sonar, lo que hizo que Mina suspirara más fuerte.
-Vine a disculparme Mina... me porté como un idiota hoy. -Dijo el joven mientras miraba la espalda de su amiga.
Mina no respondió, siguió manejando la interfaz de la computadora como si no lo hubiese escuchado.
Pasaron algunos minutos en silencio escuchando cantar a Basara. Parecía que ninguno de los dos quería seguir la conversación, tal vez temiendo lo que siguiera a continuación. Finalmente fué Mina quien reunió el valor para romper el silencio. De un empujón se separó del escritorio y giró sobre la silla para quedarse enfrentada a Matt quien se sobresaltó de inmediato.
-Matt escuchame, ya se que Will cruzó la raya esta vez, pero no tienes porque preocuparte. Amanda lo tiene cubierto.
Matt levantó la vista y miró a Mina a los ojos. -No es de Will de lo que vine a hablar Mina.
-Ah.... ¿No? -Atino a articular sorprendida.
-Quería ser sincero con vos, solo eso.
El rostro de Mina se fué poniendo colorado. Realmente Matt no iba a corresponder sus sentimientos ¿No? Al menos no hasta que ella se lo dijera primero ¡Que locura!
-¡Pero Matt! -Dijo con un tono nervioso mientras miraba para otro lado. -¿De que estas hablando? Vos siempre fuistes sincero conmigo!.-Realmente el corazón le estaba latiendo con fuerza.
Matt pareció inhalar profundamente un segundo.
-Estamos construyendo un Queadluun para salir al espacio.... hace tiempo que Will y yo guardamos este secreto de ustedes y... Mina.. ¿Estas bien.?
Mina se había echado hacia atrás en la silla dejando caer los brazos a los costados. Se hubiese caído hacia atrás completamente pero recordó que no llevaba ropa interior debajo de la remera, por lo que se puso erguida enseguida. Tenía ganas de tirarle algo por la cabeza a Matt pero sabía que era inútil... al final iba a tener que ser ella la que se le confesara... ¡Qué incordio!
-¡Te lo iba a decir, en serio! -Matt se había puesto colorado. -Es que realmente quería salir al campo, al menos una vez.
-Matt pedazo de... -Mina trató de tranquilizarse respirando profundamente. -Ya se lo tu maldito robot en el Astillero cuatro... Manuel y Akemi también lo saben.
El joven abrió los ojos como platos ante la revelación de su amiga.
-No pongas esa cara tonto. -Dijo la muchacha. -Solo nuestro grupo lo sabe (Y Ralph quiso agregar, pero mejor mantener eso en secreto). -Cuando ayer insinuaste que querías meterte de polizonte en uno de los transportes para salir al campo yo ya sabía que estabas probandonos para ver qué opinábamos..
-Entonces...
-Sigue siendo una estupidez Matt. -Dijo tajantemente Mina. -Vas a poner en riesgo tu vida ¿Y todo para que? ¿Para imitar a Basara? -Señaló con el dedo índice hacia una de las paredes, pero Matt sabía que en realidad apuntaba hacia afuera, al Campo. -En el Campo no hay nadie a quien le puedas cantar Matt... ¡nadie! Solo chatarra y cadáveres momificados. Estaba molesta y se dió cuenta que estaba siendo muy dura con él, que sólo había venido a disculparse... pero no podia dejarlo ir sin dejarle ver su equivocación.
-Mina... yo no..
-Matt, escuchame. -Mina se levantó de la silla y se sentó en la cama junto al jóven. -Tu música es hermosa, no necesitas ponerte en peligro para probar nada. -Sin pensarlo tomó las manos de Matt y las apretó con fuerza. -Por favor Matt, no quiero que te pase nada.
Ambos guardaron silencio en lo que pareció una eternidad, simplemente siguieron tomados de la mano sin decir nada hasta que de pronto un tema de Sharon Apple comenzó a sonar quebrando el momento de inmovilidad. Parecieron darse cuenta simultáneamente y se soltaron las manos de forma avergonzada.
-Yo... -Comenzó a decir Matt con las mejillas sonrosadas. -Lo que quiero decir es que no quiero ponerme en peligro por nada Mina. Lo que estoy buscando es una respuesta que no puedo hallar aquí, entre las paredes de la Colonia.
Mina todavía no se había repuesto y respiraba agitadamente. Miró a Matt intrigada. -¿Que estás buscando entonces..? -Dijo finalmente.
-No se Mina... pero.. -De pronto guardó silencio y bajó la cabeza.
-Matt... viniste a ser sincero conmigo. ¿No?
El joven levantó la cabeza y miró a su amiga a los ojos. -Es cierto, a eso vine.
-Entonces confía en mi. -Dijo mientras ponía una mano sobre su hombro. -Yo voy a estar siempre al lado tuyo, puedes contarme todo.
Matt pareció de pronto más aliviado, como si hubiese tomado una resolución y estuviera en paz con ello. -No se muy bien lo que estoy buscando Mina pero... hoy cuando vi a esa Joven extranjera...Cinthya... es como que el corazón me empezó a latir mas fuerte y supe que habia algo mas allá de la Colonia que tenía que experimentar... algo como... no se como expresarlo.
Mina permaneció unos segundos sin saber que decir, solo apretó un poco mas el hombro de Matt y bajó la mirada.
Ella si sabía lo que Matt no podía expresar.