Capítulo 5

Nos encontrábamos en la escena haciendo preguntas a los testigos y recaudando información, iba junto con Anny, Marina y Jon cuando escuché a la morena gritar, no le tome mucha importancia y seguí con lo mío ya que no había escuchado muy bien lo que grito. Una vez que terminé me reuní con mis dos compañeros para saber si habían obtenido algo útil.

 —Estuve preguntándole a los vecinos y no hay nada relevante de mi lado —Marina fue la primera en hablar mientras miraba sus notas. 

—Una señora me dijo que vio dos autos uno plateado y el otro azul de marca Hyundai minutos antes de escuchar los disparos —Jon fue el segundo en comentar, era un avance. 

—¿Dónde está Anny? 

—Vio a Emma y fue corriendo —mire a la castaña y luego gire buscando a Anny. 

Cuando la encontré sonreí y me quedé viendo al par de amigas por unos minutos, sabía que necesitaban un tiempo para hablar pero debíamos seguir con el caso.

—¡Anny! —grite captando la atención de ambas. 

Le sonreí a Emma en forma de saludo y ella me sonrió de regreso, se veía muy linda.A los minutos se despidieron y nuestra alocada amiga llegó corriendo. 

—¿Qué me perdí? —pregunto una vez estuvo a nuestro lado.

—Revisamos la información que habíamos obtenido y ya nos íbamos a la estación —mientras que mi compañero hablaba ella tenía la mirada fija en mí, me estaba poniendo un poco nervioso.

 —Bien, vámonos ya.

 Agradecí internamente a Marina y nos subimos a los autos, me preguntaba porque Anny me miraba expectante, posiblemente fuese porque fui a casa de Emma sin decirle.

 —¿Pasó algo entre Anny y tú? —Jon interrumpió mis pensamientos y lo miré por unos segundos.

—No que yo sepa.¿Por qué preguntas?

—Note que te veía fijamente, como si quisiera matarte.

—Si sentí su mirada más no la vi, ¿Era la mirada que mata? 

—Sí, sea lo que sea estás en problemas.

 Me acomode en el asiento y apreté un poco el volante, cuando Anny se molesta sabes que recibirás un buen regaño o de lo contrario un paliza, cuando es lo segundo debes correr todo lo que puedas. Fuimos los últimos en llegar a la oficina, mientras subía las escaleras podía ver a mi gran amiga con los brazos cruzados mirándome detenidamente, estaba muerto 

—¿Por qué no me dijiste que ibas a casa de Emma? 

Me detuve a un metro de ella, era pequeña a comparación mía pero daba miedo, pocas veces la había hecho enojar hasta el punto de querer asesinarme,más ahora no había hecho nada malo...creo. 

—Lo olvidé, fue de imprevisto y Will es el de la idea —trate de no mostrarme nervioso o asustado.

 —¡¿Fueron los dos?!

—Sí, queríamos verla y saber cómo estaba, cómo iba con su… —ella levantó un dedo haciendo que parara de hablar. 

—Si ella no me lo dice ni me entero, sabes que quería ir a verla… —su mirada cambió a una triste y melancólica— me duele Jay.

 —Deja el drama, lo siento por no avisarte pero no es necesario esto. 

Su expresión cambió de nuevo a una mirada de enojo, lo había arruinado.

—Eres uno de mis mejores amigos —empezó acercarse haciendo que retrocediera— no estoy enojada porque hayas ido a casa de Emma —la miré confundido. 

—¿Entonces? 

Llevó su mano hacia donde estaba su arma, empecé a sudar frío y veía a los demás buscando ayuda, ellos veían divertidos la situación...malditos. 

—Anny por favor, no hice nada malo. 

Me topé con una pared y traté de pegarme lo más que pude a esta, cerré los ojos esperando el golpe cuando la escuché reír, fruncí el ceño y abrí los ojos para ver a Anny muriendo de risa seguida de los demás.

—Debiste ver tu cara,estás pálido. 

—No es divertido, me diste un buen susto —bufé enojado— ¿Por qué el teatro? 

—Sí me molestó un poco que no me avisaras, además debía devolverte la broma de la otra vez. 

—Te odio. 

—Yo también te quiero. 

Ella sonrió divertida y yo negué con la cabeza para ir a mi escritorio, debíamos seguir con el caso.