Capítulo 2: La amistad que crece
Ya han pasado unos meses desde que Miranda y Gael se conocieron un día en el pasillo del colegio. Con el tiempo, Gael se convirtió en su protector. La esperaba después de clases para caminar juntos hasta la parada del autobús, le explicaba temas difíciles y siempre la hacía reír. Su amistad había crecido tanto que Miranda ya no podía imaginar su vida sin él. Aunque a veces se preguntaba si lo que sentía por Gael era solo amistad o algo más.
—¿Por qué eres tan bueno conmigo? —preguntó Miranda un día, mientras compartían un helado.
—Porque te quiero, pequeña —respondió Gael, dándole un golpecito en la cabeza y sabiendo que era por otro motivo más que cariño.
Ella sonrió, pero por dentro deseaba que esas palabras significaran algo más. ¿Sería posible que Gael sintiera lo mismo que ella? Miranda no se atrevía a preguntar, por miedo a arruinar lo que tenían.
—Oye, ¿vas al partido de fútbol mañana? —preguntó él, cambiando de tema.
—Claro, no me lo perdería por nada —respondió Miranda, emocionada por verlo jugar.
Al día siguiente, Miranda fue la primera en llegar a la cancha. Como le había dicho a Gael, no se lo perdería por nada en el mundo. Se acomodó en las gradas, buscando un buen lugar para ver el partido. Pronto llegó Rebeca, a quien todos llamaban Beca por cariño. Era la mejor amiga de Miranda y se conocían casi desde siempre.
—¡Hola, Miranda! Llegaste temprano hoy —dijo Beca, sentándose a su lado.
—Hola, Beca. Sí, le dije a Gael que vendría, y pues... aquí estoy —respondió Miranda, haciendo un gesto con sus manos y hombros, como dando a entender que no tenía opción.
—De verdad que no sé para qué vienes si ni siquiera te gusta el fútbol —dijo Beca con una sonrisa pícara—. ¿No será que lo que te gusta es algún jugador?
Miranda se sonrojó y trató de disimularla—. Beca, tienes unas ideas un poco locas —dijo, tratando de quitarle importancia.
En ese momento llegó Mateo, amigo de Gael y Miranda. Saludó a ambas, pero Beca hizo un gesto de desagrado que no pasó desapercibido para Mateo.
—Si tanto te molesta, puedes ir a sentarte más abajo —dijo Mateo, con una sonrisa burlona.
—No te preocupes, aquí estoy bien —respondió Beca, cruzando los brazos y mirando hacia el campo.
El partido comenzó, y desde el primer momento, Gael demostró por qué era el capitán del equipo. Corría por el campo con una energía increíble, y Miranda no podía apartar la vista de él. A los diez minutos de juego, Gael anotó el primer gol. La multitud estalló en aplausos, y él, en medio de la celebración, volteó hacia las gradas buscando a Miranda.
Cuando sus miradas se encontraron, le regaló una sonrisa que hizo que el corazón de Miranda diera un vuelco. Beca, sentada a su lado, no pudo evitar notarlo.
—¿Viste eso? —preguntó Beca, con una ceja levantada.
—¿El qué? —preguntó Miranda, tratando de actuar como si no hubiera pasado nada.
—No te hagas de rogar, Miranda. Gael te está mirando como si fueras la única persona en las gradas.
Miranda no supo qué decir. ¿Realmente Gael la miraba así? ¿O era solo su imaginación?
El partido continuó, y Gael anotó dos goles más. Cada vez que celebraba, volvía a buscar a Miranda en las gradas, como si su presencia fuera su mayor motivación. Mateo, que también estaba en las gradas, no pudo evitar notar la dinámica entre su amigo y Miranda. Entre tanto, Beca seguía observando todo con una mezcla de curiosidad y diversión.
—Te lo dije —susurró Beca—. Gael está completamente enamorado de ti.
Miranda no respondió, pero no pudo evitar sonreír. Tal vez Beca tenía razón. Tal vez Gael sentía algo más que amistad por ella. Pero, ¿qué pasaría si se equivocaba? ¿Y si arruinaban lo que tenían? Esas preguntas la atormentaban, pero por ahora, decidió disfrutar del momento. Después de todo, ver a Gael jugar y sonreírle era más que suficiente para hacerla feliz.
Al final del partido, el equipo de Gael ganó 3-1, y él corrió hacia las gradas para abrazar a Miranda. Beca y Mateo intercambiaron miradas, sabiendo que algo especial estaba pasando entre sus dos amigos. Y aunque nadie lo dijo en voz alta, todos parecían entender que la amistad entre Miranda y Gael estaba a punto de dar un giro inesperado
Hola espero que te este gustando mi historia.
Cuentame ¿qué crees tu que este pasando con Gael,será que Beca se esta imaginando cosas?
¿Por qué Beca trata tan mal a Mateo?¿Será que Beca siente algo por Mateo? Cuentame en los comentarios que crees.