Reino de Vordaz

Reino de Vordaz.
Actualidad: Año del crepúsculo 3985.

Bajo la montaña 'Toland' se encuentra el Reino de Vordaz, el más joven de los 5 reinos esparcidos por el mundo, con tan solo 19 años de reinado y una población de menos de 10 mil habitantes. Sin embargo, su reputación está en aumento debido a los extranjeros que llegan para ver los restos de la "Bestia Milenaria", cuya vida fue arrebatada hace 21 años por un grupo de 6 personas convocadas por Vordaz.

La bestia, al parecer, pudo haber estropeado los planes de derrocar al antiguo pueblo que se encontraba debajo de la montaña.

Punto de vista del Príncipe Aron Necrono:

Despierto con el canto de las aves posadas en mi balcón. "Es maravilloso despertar así".

Pero hoy es diferente, la Reina Sariel vendrá al reino ¡Hoy mismo! Mi padre, el Rey Vordaz, me ha encomendado preparar a la Armada Novacrono por si la reina decide atacarnos.

El reino se encuentra en un estado crítico, y todo esto es culpa de mi padre, que ocultó la desaparición de mi hermana Anastasia Necrono.

La paz que se logró con la Reina Sariel estaba basada en el acuerdo de que la Princesa Anastasia se casaría con el Príncipe Eduard Reis al cumplir los 25 años.

Mi hermana desapareció hace 8 años, a los 22 años de edad, cuando mi padre ordenó a unos caballeros explorar un bosque a las afueras del territorio del reino.

Ese bosque es el mismo donde nuestra madre también desapareció. Siempre encontré extraño que mi hermana decidiera ir sin contarme sus planes, como si algo la hubiera impulsado repentinamente.

Mi padre permitió que se fuera, pero envió a 10 caballeros adicionales para protegerla. En total, fueron 20 caballeros los que desaparecieron en el bosque junto con mi hermana. Mi padre, desesperado, envió a la Armada Novacrono, compuesta por los 5 caballeros más fuertes del reino, a buscarlos.

Durante tres semanas, el reino quedó desprotegido, pero regresaron sin encontrar rastro alguno de la princesa ni de los caballeros. Desde entonces, mi padre cayó en una profunda depresión, convirtiéndose en un hombre alcohólico y despreocupado.

Nuestra relación quedó fracturada, y él me despreciaba. Me consideraba un "No deseado", ya que mi título de príncipe ya no tenía valor en sus ojos. Durante semanas, no intercambiamos palabra alguna, pero finalmente, él vino a mí y se disculpó. Tuve que perdonarlo y aceptar la situación en la que nos encontrábamos.

Hace más de 8 años que mi hermana desapareció, y ahora tendría 30 años. Es extraño que la Reina Sariel no nos haya informado sobre el cumplimiento de los 25 años de su príncipe. ¿Le habrá ocurrido algo al príncipe, o por qué no nos avisó?

De todas formas, es mejor estar preparados ante un posible ataque.

Me dirijo hacia la sala del trono, donde se encuentra mi padre, rodeado de consejeros que seguramente están discutiendo los próximos acontecimientos. La sala del trono es imponente, y en momentos como estos, aprendes a apreciar las cosas que tienes.

Salgo de la sala del trono y me dirijo hacia la Sala del Juicio, donde se encuentra la Armada Novacrono. Abro las puertas y me encuentro con los integrantes de la armada: Veirilf El Temido, Agraón El Castigador, Berlion El Sanador, Selin La Emisaria y la líder de la Armada, Kelly La Salvadora.

"Kelly, necesito hablar contigo. Por favor, sígueme", le digo.

"Estaré encantada de hacerlo, príncipe", responde Kelly, saludándome.

La llevo fuera de la sala del juicio y fuera del castillo. Una vez afuera, le pregunto: "Necesito saber si alguno de tus compañeros pertenece al Reino de Sariel".

Kelly se muestra sorprendida y preocupada. "Vaya, estás asustado. No, ninguno de mis caballeros tiene relación con el Reino de Sariel ni con ningún otro reino", responde.

"Ni siquiera con este reino", agrego.

"Correcto, todos ellos son los más fuertes más allá de los demás reinos, ubicados en las afueras del continente", explica Kelly.

Eso me tranquiliza. "Me alegra escuchar eso, ya que nos enfrentaremos a la Reina Sariel hoy mismo".

Kelly queda impactada. "¿En serio? ¡Maldición!", exclama.

"Es cierto. Prepárate y prepara a tu armada. Les pagaremos el doble si logramos sobrevivir, ya que hoy podría ser el último día que veamos el cielo azul", le confieso.

Kelly asimila la información y se va corriendo. Mi trabajo está hecho, ahora solo queda rezar y esperar que mi padre sepa lo que está haciendo.

...

Han pasado seis horas desde que le informé a Kelly sobre la situación.
La Armada esta oculta por toda la Sala del trono, preparandose por si las cosas se salen de control... En la sala del trono no hay nadie mas que Mi padre y yo, un Area tan grande se ve tan vacia que me da escalofrios... Esto con el fin de saber que hara la reina Sariel.

Según una carta de un cuervo, faltan tan solo 30 minutos para que la reina y sus caballeros lleguen.

Maldición, no puedo hacer más que rezar y esperar que la paz se mantenga, aunque es difícil creer en ello. Maldición.

Los 30 minutos han pasado y, como decía la carta del cuervo, la Reina Sariel y sus caballeros han llegado al reino.

Me encuentro equipado con una armadura ligera pero resistente y una espada, ya que la magia no será efectiva contra la reina. Según mi padre, ella puede disolver cualquier tipo de magia, ya que posee un tipo desconocido capaz de contrarrestarla.

En ese momento, un caballero entra a la sala del trono, asustado, desorientado, confundido y agitado, para informarnos de la llegada de la reina.

"La reina ya ha llegado", dice el caballero, y las puertas de la sala del trono se abren para dar paso a la entrada de la Reina Sariel acompañada de un grupo de caballeros. 

Vestida de blanco con un abrigo de piel y su distintiva corona, irradia una aura de intimidación que llena la sala. Todos los hombres, incluyendo mi padre, apartan la mirada al encontrarse con sus ojos.