Capítulo 25

Una vez Glenda controló su euforia, pudieron marcharse a la clínica donde Pandora iniciará su control prenatal, la felicidad de la niña por supuesto los hacía plenamente dichosos a ellos.

―Tu sonrisa tan resplandeciente a mi corazón deja encantado. ―Tristán inició a cantar la canción de Dragon Ball GT “Mi corazón encantado” esa letra que tanto le gusta a la niña, esa sonrisa preciosa de felicidad le llena el alma misma. Su miel, si bien lo amaba, ahora que sabe es su padre de verdad, ha mostrado una emoción única y eso para él ha sido la mejor experiencia de toda su vida.

Glenda acompañó a su padre a cantar y Pandora simplemente los miró con una enorme sonrisa en los labios. Su corazón lleno de aquello que solo sintió cuando tuvo a su hija por primera vez en brazos, se ha incrementado de una manera que se siente tan llena que desea explotar.

Tiene a una familia y para eso no se vio obligada a apartarse de su mejor amigo, trabaja en ese lugar que fue su sueño y ahora puede expresar un poco mas sus emociones. Todo está siendo perfecto y lo adora, es su vida soñada aun cuando decía que era mejor estar sola.

―Vamos, dejen de cantar que ya llegamos. ―Los apremió.

―Ahora que venia mi turno. ―Se quejó Rocket. ―Flor de la adversidad, antes me tenías mas consideración. ―Pandora agrandó la sonrisa.

―Alguien por ahí me dejó en evidencia frente a mi novio. ―Le recordó lo que hizo. ―Yo jamás esperaba algo así de ti.

―¿Lo ves Tristán? Por hacerte un favor estoy en problemas. ―Lo culpó. ―Si hubiese tenido un cuerpo la podría haber visto a los ojos e implorar mi perdón, me debes un cuerpo y una esposa. ―Tristán sonrió.

―Me lo pensaré. ―Lo desconecto una vez pudo. ―Vamos miel, es hora de ver al bebé. ―Pandora tomó la mano de Tristán. ―Miel, escuchaste lo que el director nos propuso, ¿Qué piensas de eso? ―La miró, pensaba dejar el tema para la noche, pero notó la mirada de su hija mientras el director hablaba.

―Me siento nerviosa. ―Confesó. ―Son niños mayores, ¿Qué puedo hacer yo en una clase con niños dos años mas grandes que yo? ―Pandora sonrió.

―Harías de todo, cariño. ―Le aseguró. ―Son niños mas grandes y por ello un poco maduros, ¿No crees que ellos sí valorarán lo que tienes para dar? ―Glenda miró a su madre por unos segundos, en su vieja escuela los niños de los grados más avanzados la trataban bien.

―Creo que puedes tener razón, mami. ―Sonrió finalmente. ―Debo experimentar y vivir ¿No? ―Repitió eso que Gloria le dijo alguna vez. ―Además así demuestro que soy muy… muy inteligente. ―Tristán se sintió orgulloso de su miel, su niña sin duda será mas grande que él y muere por verla llegar a lo mas alto.

―Esa es mi guerrera sayajin. ―Inició a besarle el cuello hasta provocarle cosquillas con su barba y hacerla reír a carcajadas.

―Ustedes esperen aquí, yo iré a anotarme. ―Pandora se alejó de ellos y fue a recepción para poder pagar y anotarse. Ahí estaba ella, embarazadísima por segunda vez y del padre de su hija, aquel pensamiento la hizo sonreír. ―Eres tremendo Tristán. ―Negó divertida, con ese hombre deberá tener mucho cuidado o tendrán más de cuatro hijos.

Una vez se anotó, se reunió nuevamente con su familia, Glenda no se quedaba quieta, quería ver a su hermanito de una buena vez y para ella la espera era eterna. Pandora intentó calmar a su hija y no tuvo mas opción que ponerle algunos problemas matemáticos, pero rápidamente los resolvió.

―Bien, mira este juego. ―Tristán le pasó su móvil. ―Se llama preguntados, el juego consiste en responder preguntas de cultura general, aprenderás mucho. ―Le guiño antes de que la niña se distrajera con el aparato.

―La nueva revolución de la tecnología. ―Pandora y Tristán miraron la tv. ―Japón lo ha vuelto a hacer, un avance que tanto doctores como pacientes agradecerán. Zorgex ha llegado para facilitarle la vida a millones de personas alrededor del mundo, Josh, estamos contigo. ―Tristán se tensó al reconocer el laboratorio Science and Technology tras el reportero, algo en esa noticia no le daba buena espina.

―Muchas gracias, compañera. Me encuentro frente a las instalaciones de los laboratorios Science and Technology y justo en este momento se estará dando la presentación de Zorgex. ―El camarógrafo enfocó la tarima donde un androide estaba siendo encendido.

―Tras muchos estudios y varias encuestas, decidimos crear a un androide capaz de hacer la función de una maquina de resonancia magnética. ―Pandora y Tristán dejaron de respirar conforme el científico daba los detalles de su nuevo proyecto.

Un mes, simplemente un mes y ya tienen una replica exacta del androide A1, ¿Cómo es posible que le hayan robado su proyecto? ¿Cómo es que a ellos si le dan la visibilidad correspondiente?

―Esto está mal. ―Tristán sacó el móvil del bolso de Pandora para llamar a su padre, pero la llamada entrante de Vaden lo frenó. ―¿Estás viendo lo que yo? ―Preguntó al responder, la niña ha estado desviando las llamadas en su móvil.

―Sí, los malditos nos robaron el proyecto y a ellos si les están dando la visibilidad que no nos dieron a nosotros. ―Vaden está realmente enojado. ―La asociación de científicos quieren que demos una conferencia para dejar en claro que somos dueños del proyecto. Pandora y tú deben venir cuanto antes a la corporación, tu padre está que le dan mil ataques. ―Tristán cerró la llamada y miró a su pandita, no pueden irse, no sin que antes ella se atienda.

―Creo que podemos dejar esto para después. ―También lo miró. ―Debemos resolver lo que está pasando, se supone que nuestro proyecto se vendería a muchos países. ―Tristán tenía ganas de maldecir en voz alta, ¿Cómo es posible que esos japoneses le robaran tan descaradamente su proyecto y sobre eso lo han vendido al doble que ellos?

―Debemos asegurarnos de que el bebé está bien, no podemos irnos. ―Se negó poniendo sus prioridades por delante.

―El androide A1 puede darte un informe detallado de mi estado. ―Glenda los miró a ambos. ―Cariño, hoy no podremos ver al bebé, ¿De acuerdo? Prometo que lo haremos pronto, pero mami y papi deben regresar al trabajo con urgencia. ―La niña asintió comprendiendo las cosas.