En teoría, todas aquellas Irregularidades Sobrenaturales que decidieran voluntariamente cooperar con OCCI y siguieran sus órdenes obtendrían beneficios. Se le conocía como Iniciativa Oblivion Sobrenatural a esa iniciativa, los Portadores de Tecnología Oracle son unas de esas Irregularidades que aceptaron esta propuesta.
Debido a eso es que, a pesar de ser vistos más como herramientas por la organización, de todas formas conservaban ciertas cualidades humanas y el Comité de Ética exigía que debían tener días de descanso aunque sean androides alienígenas que no lo necesitaban. Claro que las amenazas al mundo no se toman descansos y ellos no lo hacían todos juntos, se turnaban para eso.
Hoy se le había asignado a Ezequiel su día de descanso, el Quinto Portador elegido por una Llave Centient hace casi 50 años. Su piel morena y corto cabello blanco daban la impresión de ser alguien joven, pero el agente de OCCI en realidad solo había dejado de crecer y desarrollarse después de fusionarse con la llave que vino del espacio exterior.
Al principio no sabía qué hacer con sus días libre, los otros Portadores tampoco tienen mucha idea de hecho, pero con el tiempo Ezequiel logró encontrar algo que le hacía sentir bastante satisfacción. El joven caminaba por el costado de una gran plaza verde, era carente de árboles pero abundaba en juegos de plásticos como toboganes, columpios y demás.
El cielo gris traía consigo un aire frio, uno que obligaba a la gente a abrigarse. Él no lo necesitaba pero de todas formas llevaba un suéter y guantes de lana tejidos por la Dra. Dana para ocultar su antebrazo y mano robóticos. En su espalda cargaba una mochila y en su brazo una bolsa de tela llena de comida: específicamente galletas, alfajores, papas fritas, gaseosa y otros postres.
<Y todavía me queda dinero> pensó al ver la bolsa llena <No esperaba que me pagaran tanto por los trabajos> una cosa eran los días de descanso pero la paga sí que le había sorprendido. Ahora él es una androide alienígena, no necesita alimentarse ni darse ese tipo de gustas por lo que todas esas cosas que había comprado no eran para él.
El celular de su bolsillo comenzó a sonar de repente y una idea le surgió al instante <Sera María, esta de suerte. Todavía estoy a tiempo si quiere que compre algo más para los niños> sacó su celular pero en la llamada vio que no aparecía la foto de la mujer encargada del orfanato sino una figura humanoide con piel blanca como la leche y esferas azules flotando alrededor de su cuello. No lo pensó dos veces y cortó la llamada.
Sin embargo no pudo llegar ni a guardar el celular antes de que volviera a sonar, solo que esta vez fue pirateado y la llamada se contestó –Esto no es una broma Ezequiel –dijo la conciencia digital sonando algo fastidiosa.
–Qué raro, normalmente suele serlo. Y hoy es mi día libre asi que no estoy de humor.
–Esto es serio, mis drones de vigilancia detectaron un incidente con una Irregularidad. El Equipo de Respuesta Inmediata ya se encuentra en camino pero tú estás muy cerca asi que necesito que te encargues.
Quizás antes eso le hubiera preocupado, solo que sin darse cuenta el Quinto Portador había ido perdiendo parte de su humanidad (como es normal en las personas como él) –Pero hoy es mi día libre –repitió sin darle mucha importancia al asunto.
–Ya ha matado a una persona y parece querer hacerlo de nuevo, tienes que detenerla antes de que ocurra Ezequiel –insistió Acrep, sonaba preocupado incluso.
Lamentablemente su trabajo siempre tendría que ir primero que todo, o bueno, que casi todo ya que sobre su trabajo de OCCI tenía otro mucho más importante. El joven moreno soltó un suspiro –No pensé que te meterías tanto en el papel, creí que era solo un juego para ti.
El ser de apariencia fantasmal soltó una carcajada –Después de las décadas le desarrolle cariño a jugar a esto –declaró a la par que el portador abría la mochila de su espalda para meter la bolsa dentro. Acto seguido la dejó al lado de un banco de madera en la plaza.
– ¿A dónde es? –quiso saber el agente de OCCI.
–De hecho, calculando su ruta ella debería pasar por esta plaza dentro de siete minutos. Se encuentra volando.
Los dientes de Ezequiel rechinaron –Me hubieras dicho antes eso.
La conciencia digital se alarmó al notar eso – ¿Qué haces?
–Claramente quiero acabar con esto rápido –le contestó molesto –Asi que ahora sal de ahí, ya sabes que hacer –antes de actuar como una inteligencia artificial, antes de obedecer las órdenes de los jefes de departamento e incluso de la Comandante de OCCI. Acrep solo debía servir y ayudar al Receptáculo del Crepúsculo del planeta Tierra, ya que debido a que se fusionó con una Llave Centient no podía acceder por su cuenta a la magia de dicho Aspecto.
Como si se tratara de una ventana Acrep atravesó la pantalla del celular para manifestarse físicamente al lado del Receptáculo –No destruyas la Irregularidad, es muy importante para OCCI y todavía la están analizando – seguido le mostró una mueca para terminar unificandose con el cuerpo y mente del Receptáculo. Varias líneas blancas aparecieron por toda su piel, como si se trataran de circuitos, y las esferas azules que orbitaban alrededor del cuello se transmutaron en manzanas doradas. Frutos de la Discordia.
Una vez hecho Ezequiel caminó más hacia el centro de la plaza y tomó varias piedras en sus manos, los cálculos de Acrep eran perfectos y con la Matriz de Procesamiento del portador pudo contar exactamente los segundos que pasaban. El mismo instante en el que llegó a cero una figura apareció volando en lo alto del cielo gris, era difusa y negra.
Ezequiel pensó que la gente común podría confundirla con un OVNI o algo raro de lo que podrían sacar mitos o rumores para hablar en internet, solo que su vista mejorada y potenciada le permitieron saber que era una chica de cualidades jóvenes. Otra vez apoyándose en la tecnología que tanto odiaba pudo hacer los cálculos en su cabeza con exacta precisión y lanzó una de las piedras como si su brazo fuera una catapulta.
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Editado: 28.12.2023