Científicos, Hechiceros y Astronautas.

Científico – Orgullo Auroa 6.

Al entrar al gran salón puedo ver que está lleno de gente, no solo vinieron los compañeros del 4to año A y B sino que también casi todos los de 5to y 3er año. Era imposible no llamar la atención de los presentes cuando repentinamente un grupo de diez chicas y un chico irrumpen en el lugar de golpe.

     Todos nos vamos acercando al centro de la pista de baile iluminada por una bola disco que tira luces de colores y es acompañada por una máquina de humo y un DJ colocando música algo fuerte. Mientras más nos acercamos mis amigas se van separando.

     Cade señala a un grupo de altos y musculosos chicos de 5to –Ellos son con los que juego rugby, van a ver que son muy buena onda –explica ella lo que genera una sonrisa en el rostro de Gisela.

     –Eso hay que comprobarlo –indica cruzando sus brazos.

     Así que ellas dos seguidas por Fanny se van con ese grupo de chicos.

     Seguido a eso Ámbar se truena los dedos y el cuello –Llevo dos días practicando en un videojuego de baile para esto – y se va a bailar al centro de la pista.

     –Nosotras nos vamos a ir a sacar fotos al baño Bizantino, nos encontramos en un rato –me habla Milagros con Rosa y Dafne a sus costados –No te hables con ninguna chica, son todas putas –advierte esta última.

     –Está bien –contesté con una sonrisa incomoda mientras veo como ellas se van, aunque Dafne no me despega la mirada hasta que giran por un gran pasillo en la pared a la derecha.

     Al final quedo yo junto a Sabrina, Elsa y Belén, pero al girar mi cabeza para mirarlas y preguntarles que van a hacer Elsa salió corriendo a la mesa con comida para limpiar una mancha de Coca Cola en el mantel blanco – ¿Eso es Cabsha? Yo quiero un poco –la sigue Belén por detrás acompañada de Sabrina.

     –Bueno, a esa si no me la esperaba –hable conmigo mismo, quede sorprendido de que todas se dispersaran tan rápido <Me encanta que todas pueda disfrutar de este evento> observe como Ámbar está bailando en el centro de la pista mientras un grupo de gente se forma en círculos para verla <Creo que yo también tengo derecho a disfrutarlo entonces>.

     Mirando a mí alrededor y a pesar de las luces de colores me es difícil ver por la oscuridad del lugar, me gustaría buscar a algún chico para acercármele y bailar juntos aunque sea, en vez de hacer eso me quedo a un costado de la pista observando como todos los demás bailan y disfrutan del momento. A pesar de que me encantaría ir y hablar con alguien para conocerlo la verdad es que no tengo experiencia en esto y me da mucha vergüenza, de solo pensarlo se genera una extraña sensación de algo comiendo mi pecho <La única experiencia que tengo es sobre series LGBT+ de Netflix y mangas BoysLove que he leído, hmmm y no creo que eso me sirva mucho realmente> me puse a reflexionar. Pero a la vez tampoco quiero quedarme sin hacer nada, me hace sentir tan mal tener estas emociones conflictivas dentro de mí.

     Sin darme cuenta por estar en mis pensamientos no me fije en como un chico de 3er año está bailando para intentar coquetear con una chica, pero debido a sus enredados pasos de baile este se tambalea y casi se tropieza. Por suerte logra reincorporarse en el último segundo, aunque tenía en su mano un vaso de vodka con gaseosa que derramó sobre mí.

     –Lo siento muchísimo –habló asustado de poder empezar un problema.

     –No te preocupes –intente tranquilizarlo –Iré a limpiarme al baño. 

     Abandonando la pista de baile por un momento para entrar por el gran pasillo que hay en la pared a la derecha, todo se encuentra a oscuras a diferencia del pasillo del elevador, con suerte tenues luces de colores con tonalidades oscuras alumbran el lugar.

     Empiezo a buscar entre las puertas de madera blanca alguna con un cartel o algo que me indique que se trata de los baños, dentro del pasillo giró a la derecha y después de caminar un poco a la izquierda –Este lugar si es muy grande –me digo a mí mismo hasta que por fin logro ver un pequeño cartel con un hombrecito –Ese debe ser el baño.

     Me apresure a ir hasta la puerta que resulta estar entre abierta, la luz blanca del interior sale para afuera y el sonido de unas voces masculinas hace que me detenga en seco antes de entrar. Reconozco esas voces, se tratan de unos chicos con los que me tope el lunes y otro que fue el que me invitó a la fiesta –El principito ya ha llegado –dice uno.

     –Encima vi que su grupito de amigas se separó de él –agrega otro.

     –Eso no puede ser más perfecto, nos tomaría mucho tiempo haberlo hecho nosotros. Sí que estamos de suerte hoy.

     <Maldición Sideral>.

     –Aprovechemos esta oportunidad y vayamos a atraparlo para darle una lección.

     Con un creciente temor dentro de mi cuerpo retrocedo unos pasos, pero inesperadamente mi espalda se choca contra algo, eso me provoca un susto lo suficientemente grande como para que las personas dentro del baño se percaten de mi presencia. Gire mi cabeza y otro chico que intentó golpearme el lunes aparece detrás – ¿Vas a algún lado? –pregunta con una estúpida sonrisa en su rostro.

     Él intenta agarrarme del brazo, pero me agacho para el costado y salgo corriendo por el pasillo <Con razón todas ellas se fueron apenas llegamos, era mi maldita habilidad estrella actuando en contra de mi otra vez mas> solo pensar en eso provoca que me enfade mucho, pero todo ese odio va dirigido a mí mismo y nadie más.

     Voy a la derecha al final del pasillo, pero bloqueando mi camino aparece otro tipo que me mira con no muy buenas intenciones, yo me encuentro corriendo y a mis espaldas salen el grupo de alrededor de 4 personas persiguiéndome. Si sigo adelante dejo que él me agarre, pero si me detengo seré carnada de otros cuatro, con eso en mente en vez de desacelerar aumento mi velocidad y empujo al sujeto delante de mí lanzándolo de espaldas al suelo –Lo siento mucho –grite mientras sigo de largo.




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