Cimientos de guerra

Capitulo 24. Una nueva selección

El sonido de los casquillos al caer es lo último que se oye, al desaparecer su metálico sonar deja en su lugar una tensión palpable. El cuerpo de Esteban cae al suelo en un golpe seco, la sangre empieza a caer desde arriba a sus pies creando un pequeño charco; la entidad da unos pasos atrás mientras Esteban se incorpora de a poco tosiendo, al fijar su vista en la personalidad frente a él nota como la sangre fluye de su pecho por  lo que se extraña con la escena por su reacción me acerco a su lado.

 

—Esteban ¿Estas bien? — digo mientras noto el moretón que ha quedado en su cuello por el efecto del estrangulamiento.

 

—Si… cómo… ¿Qué hiciste? — mira el arma en mi mano. — ¿De dónde lo sacaste?

 

—Ah… esto, lo tenía mi madre. Antes de dejarla le pedí que me lo diera, tenia balas imbuidas con el poder del neutral así que asumí que sería útil en algún momento crucial.

 

Esteban da una pequeña sonrisa ante mi aclaración, la entidad al ver su sangre fluir de su cuerpo balbucea palabras amenazantes y lanzar maldiciones al aire que no quiero pronunciar, saben que han perdido una vez más contra su hermano, contra Cimientos y sobre todo contra nosotros. Su cuerpo cae inerte en el suelo convirtiéndose en cenizas que revolotean en un remolino en el aire para luego caer y desaparecer en la tierra como siendo absorbida por esta, he de pensar que Cimientos tomo sus poderes. Siento la mirada de Esteban sobre mi y de un impulso lo abrazo, cosa que el corresponde; le agradezco por ayudarme, a pesar de tener conocimientos de lucha como parte del entrenamiento para ser líder aun así tenía miedo y al parecer el también lo siente así, ya que al estar tan cerca puedo escuchar los latidos de su corazón en frenesí.

 

Al alejarnos noto que quiere decirme algo pero el ruido de las sirenas que se escuchan de distintas áreas del bosque invade el lugar. Los bomberos, la policía y las ambulancias de distintos territorios llegan al lugar, cumpliendo con sus deberes de rescate y manteniendo la zona segura del fuego hacen que pueda relajarme un poco. Los estudiantes, profesores y personal son atendidos; Kevin es transportado rápidamente a una de las ambulancias para atender su herida de bala, de igual forma Erick para revisar su condición, mi cuerpo se tensa al ver a mi mamá con Max  acompañando a los paramédicos rápidamente para atender la seria condición de mi hermano, Esteban que estaba a mi lado me incita a moverme para vaya también con ellos.

 

Al llegar a ellos subo a la ambulancia, cierran las puertas tras de mí y sin esperar se ponen en marcha, Max me comenta que hace poco fue que Menrip despertó de su desmayo pero su condición no está ni cerca de mejorar. Los paramédicos monitorean constantemente sus signos vitales e indican que lo mejor en este momento es que sea intubado ya que su respiración está muy por debajo de los niveles normales, a lo que Max está de acuerdo. Menrip no quiere y quitándose la máscara de oxigeno me mira para hablar.

 

—Ma… ri… nep…— con cada silaba noto que sufre un inmenso dolor,  le digo que no hable pero él hace caso omiso. —Cuenta…me acerca de… tu día… libre— ¿Se refiere al día que fui al parque de diversiones? ¿Por qué lo recuerda ahora? —Dijiste que… me contarías.

 

No sé que pretende, le digo que le contaré pero primero acomodo su máscara de oxigeno y tomo su mano. Cuento en detalle lo que hice ese día, cada atracción a la que subí, cada comida que disfruté, las cosas que hicieron Esteban y Kevin ese día y como acabó todo; de vez en cuando mi hermano sonreía como también apretaba mi mano a la par que su cara se contraía por el dolor, por ultimo le describí como aquella hermosa noche subida en el carrusel vislumbre en aquel cielo oscuro las estrellas brillando y el cómo quiero que vayamos juntos algún día. Al terminar de hablar, Menrip me indica que me acerque para susurrarme algo a mi oído, ante sus palabras quedo atónita mis ojos se abren de la impresión y antes de responderle algo, este comienza a toser ensuciando su mascarilla con sangre.

 

Max me aparta para ver su condición, al notar que no respira le da señal al paramédico para que se apresure en llegar al hospital más cercano. Llegamos al hospital en el territorio de Antirda, al bajar noto como los médicos ya estaban esperando para tratar a su líder moviéndolo a urgencias de inmediato.

 

Pasado dos semanas después del incidente en el instituto que dejo muchos muertos y cientos de heridos, los noticieros no han dejado de hablar de los últimos acontecimientos acerca de que los nuevos gobernantes han sido elegidos y los lideres para representar a los territorios de Irop y Esia han sido seleccionados; de igual manera también abordaron lo que pasó con fallas en las políticas internas de los territorios que convirtieron una paz contenida en una guerra desbocada en corrupciones y avaricias. Reflexionando con lo ocurrido, los territorios decidieron evitar otro conflicto de tal magnitud que recordando la historia versada en los libros de no ser por la unión entre tierras la lucha entre estas hubiese sido devastadora.

 

***

 

—Cimientos antes de irme, quiero que respondas algo



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En el texto hay: fantasia urbana, conflictos, escolar

Editado: 11.03.2021

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