-Y ahora desapareció de nuestra vista- bajo la mirada Jules porque ya tenía rato que no lo veía.
-Debes de ver con mas cuidado. Aunque eso sí, sabe esconderse bien- sonrió Klaus demostrando que él era de los pocos o hasta el único que podía seguirle la pista a Dastan.
-Sabes a qué me refiero. Con todos es lo mismo, se esconde de todos en esta casa. En si solo faltabamos nosotros y ahora...
-Jules, el está bien. El es de las personas más fuertes que conozco. Solo tiene miedo a que alguien lo vea con los mismos ojos que tú padre o que hasta tu padre lo lastime- lo trato de calmar.
-Me preocupa- bajo la mirada.
-No eres el único. Todos se han preocupado por él.
-Hay un motivo Klaus. El se esconde por algo y todos lo vemos o cuando mi familia se va o cuando tiene una recaída o cuando mi padre quiere verle.
-Jules...- Entiende, se que no es su culpa. Pero... mi padre lo trata como si fuera un monstruo y se lo ha dicho. Cuando el trata de esconderse mi padre solo se burla de el, aún cuando el está enfrente. El se obligó a tener esa actitud vacía desde niño por el.
-Pero...- El Dastan de verdad es el que sonríe, el que es noble. No ese que solo hace lo que mi padre pide sin mostrar humanidad- se fue a la ventana y vio el cielo.
-¿Sabes que hizo mi padre cuando pudo deshacerse de los amigos de sus padres?- preguntó Jules y al no obtener algún sonido como respuesta suspiro.
-Lo único que le quedaba a Dastan y podía hacerle frente a mi padre eran 2 mosqueteros amigos de su padre y hasta compañeros de lucha. Eugene y Travis, ellos si Dastan caía lo levantaban. Trataron de calmarlo mientras mi padre lo trataba horrible. Hasta Giselle en su época hacia eso.
~Hace unos años a ellos les llegó un decreto de que debían irse a una misión, ellos se fueron solo un par de semanas pero eso basto para que mi padre empezará su plan. Aunque bueno ese plan ya había empezado desde hace mucho- paro Jules con lágrimas en sus ojos. Esa época fue la primera vez que pudo conocer hasta donde podía llegar su padre y a su vez la primera vez que sintió pena por alguien.
-¿Cuál plan?
-Eliminar a los Teyssiere del mapa, hacer que se olvide el apellido. Empezó quitando las cosas que eran de Antonie, después siguieron cambios como de los muebles y al final servidumbre. Cuando Gisselle murió el proceso se aceleró, haciendo que lo que el hacía en semanas o meses, en máximo un mes se consiguiera. Pero cuando los mosqueteros se marcharon esas semanas empezó con la parte de Dastan y después hizo el cambio brusco al lugar que hoy está aún presente.
-¿Que hizo exactamente tu padre?- preguntó Klaus viendo como eso le afectaba a Jules.
-Ellos se marcharon a mediodía, lo recuerdo porque Dastan no sabía si insistir para acompañarlos o quedarse por su rostro. Pero decidió lo segundo.
~Mi padre empezó a tratarlo mal, le gritaba, le decía de todo, le aventaba cosas. Cosa que nunca había pasado antes y más en su cara. Pero no fue hasta esa noche que mi padre lo llevo a la bodega y lo dejo ahí prácticamente solo encerrado. Todo gracias a como los mosqueteros fueron avisados un par de días antes, el limpio la bodega.
~Esas semanas fueron muy duras. Mi padre decía varias cosas de Dastan y había prohibido que alguien se acercara a la bodega. Pero Amelie y unos pocos que conocían a Dastan decidieron ayudarle, dándole algo que comer y cosas para pasar la noche.
~Yo era un niño cuando paso, pero te juro que podía ver todo y sentir pena por el. El día que ellos llegaron mi padre les dio a entender cómo que se había ido y hasta los corrió de la casa con todas sus cosas. Ellos se fueron tristes de la casa, se veían esperanzados cuando lo buscaron, pero al no tener éxito...- paro. Recordando como los mosqueteros se marcharon de la casa, desanimados y decaídos.
-¿Cuando saco a Dastan?- preguntó Klaus preocupado.
-El día siguiente... Lo saco, bueno abrió la puerta por primera vez. Recuerdo que yo fui porque mi padre dijo que debíamos aprender como se debía tratar y reconocer a un monstruo… Yo no quería ir, pero tuve que. Mi padre aventó una capucha y le dijo que tenía trabajo que hacer, que no hablara con nadie y que no quería verle su rostro- paro.
-¿Cómo estaba?- preguntó Klaus recordando como lo trataron de pequeño cuando lo alejaron de sus padres.
-Sin comida, ni agua. Ni algo que lo arropara bien en ese lugar frío y húmedo. Y también la bodega es oscura, Dastan se la vivió esas semanas mal y se vio cuando mi padre fue a sacarlo. Estaba más delgado, pálido, se ve que no podía dormir. Los ojos rojos de tanto llorar y con una actitud que se me quedó grabada en mi memoria, porque jamás creí ver a alguien así de decaído.
~La siguiente temporada la cosa empeoró, padre decidió hacer fiestas a cada rato para celebrar su logro. Dastan empezó a esconderse y a hacer todo lo que mi padre le pedía evitando mostrar sus emociones. Mi padre le obligó a hacer todo lo que aún hace, lo de esconderse y no mostrar emociones. Si el hacía algo que demostrara que era humano o hacia algo que no le parecía, lo castigaba.
~Por eso se contrato al verdugo que anda con Amelie, solo para demostrar que tenía poder sobre Dastan y el jamás hacia nada, por miedo a que mi padre le hiciera algo más doloroso. Y no lo culpo recuerdo lo que pasó cuando a mi padre se le ocurrió buscarte.
-Amelie me contó. Me contó la que tú me diste pero le faltaban detalles, porque al parecer tu padre como que la amarró a la cocina. Y también me contó lo que pasó, como lo torturó hasta que cayó inconciente- lo calmo. No se creía capaz de verlo contar esa otra historia.
-Mi padre lo odia- soltó y Klaus le limpio una lágrima que corria por su cara, como si fuera algo muy importante.
-Cuando era niño y aún estaba mi mamá yo me alejaba de ellos. Muere ella y seguíamos distanciados porque no me gusta como actuaba tanto el como Eric y ellos me alejaban por costumbre, y por no ser como ellos.
~Llega Gisselle y intente tratarla, pero siempre se la pasaba con Dastan y hay que ser honestos. De los 3 ella prefería estar conmigo, me trataba bien y la llegué a querer, pensando en que podía ser un buen sustituto de mi madre. Pero no vivió lo suficiente como para que eso se logrará y eso que ya faltaba algo. Aunque también en esa época mi padre me alejaba de ellos más que nada por Dastan y por como ella demostraba su odio hacia el- paro recordando esa época cuando Gisselle seguia viva. La época más feliz que tuvo en esta casa.
-Gisselle debió ser magnífica. Siempre que alguien habla de ella, siempre la ven como una diosa amorosa y buena- dijo Klaus recordando a su madre, la cual era como Gisselle y por eso sentía que podía saber perfectamente como era ella.
-Ella trataba a Dastan de una forma tan dulce que pareciera como si en esos momentos Dastan tuviera su cara bien.
-Debio ser un golpe duro perderla.
-Si a mi me dolio, imagínate a Dastan que la perdió y después a lo que podría considerarse a la única familia que tenía.
~Recuerdo cuando Gisselle y padre se conocieron por primera vez. Todos sabíamos que tenía un hijo, pero no lo llevo y mi hermano y yo no sabíamos porque. Después Eric le pregunto a el cuando ella se marcho y le llamo monstruo, que era un ser despreciable y sin valor. Que ni valia la pena siquiera recordar que existiera. Esas palabras vinieron en parte de el y de los padres de ella.
~Despues al verlo supe el motivo... Por esas cicatrices ni su familia lo quería. Solo lo querían los sirvientes que lo vieron crecer y ella. Porque de los mosqueteros más bien era algo diferente... A el lo ven como un héroe, como un ejemplo a seguir. Todos los mosqueteros que conozco saben la historia, todos parecen tomarlo como un santo. En cambio los demás...- paro.
-Esas cicatrices no son algo fácil, de hacer ni de tener. La gente cuando ve algo así lo toma como debilidad, pero cuando se sabe la historia la cosa cambia y se convierten en algo de te marca como un heroe- le calmo Klaus.
-Te das una buena idea de lo que pasa, desde que te conozco he visto como ves a Dastan. Cómo si lo viera un mosquetero o Amelie.
-Las cicatrices como esas en mi cultura podrían representar que su dueño es un guerrero y al conocer más a Dastan me doy cuenta que lo es. Y más porque puede lidiar con lo que idiotas como Gustave o Eric ven, donde ellos ven debilidad, yo veo fortaleza. Jules, Dastan es la persona más fuerte que he conocido desde que me alejaron de mi familia o hasta de toda mi vida.
-Dile eso a todos esos idiotas. Yo puedo ver eso, Dastan…- paro. Sentía que ya había dicho todo y que Klaus entendía todo.
-Es algo complejo, aún tengo mi acento. Y si suelto más a ese tipo de personas que no dice que me pueden hasta matar por ser danes- bajo la mirada Klaus.
-¿Porque llegaste a Francia desde Inglaterra?
-Soy danés, eso fue mi condena. En Inglaterra se sabía mi origen, cuando me traían para aquí decidí esconder eso. Lo que viví en Inglaterra lo empecé a ocupar para hacer que lo que yo soy se pierda y cree la versión con la que llegue a su vida. Pero sobretodo a tu vida, después llegó lo demás y déjame decirte que tú y Dastan son los primeros a los que me he delatado de una forma tan completa... Pero sobretodo me he abierto a ti- contesto tratando de evitar acercarse a Jules, porque sabía que en la casa era mala idea hacer todo lo que deseaba.
-Odio esto- cerró los ojos Jules. Viviendo con su padre y su hermano jamás podría tener la libertad que siempre soñaba.
-Por lo menos vivimos juntos.
-No se cómo ver eso.
-Ire a ver a Amelie, nos vemos más al rato- se despidió Klaus y se marcho. Esa ida tenía 2 motivos, el primero ayudar a Amelie y segundo el miedo a que alguien lo viera con Jules.