—Puedo preguntar... ¿Por qué decidieron venir aquí?
En está ciudad vive uno de los clanes con el mayor número de cazadores que existen —
—Escuche que aquí podía encontrar a alguien que he estado esperando por mucho tiempo —
—¿Valió la pena?, haber venido aquí sabiendo todo el peligro —
—Si —dijo con una sonrisa.
—¿Ya encontraste a la persona que buscabas? —
El asintió.
—¿Es alguien especial para ti? —
—¿Por qué?, estas celosa —decía para acercarse ha mi.
—Solo es curiosidad —
—Si, es alguien especial —dice al estar a centímetros de distancia—. Pero... eres más especial hr importante para mi —
—No te de vergüenza decir esa clase de cosas, recién nos conocemos —dije un poco avergonzada.
El solo sonrió.
—¿Y qué vas a hacer ahora?, dijiste que tu madre fue a buscar sangre, ¿no?
Por todo lo que paso, no creo que hayan podido conseguir —
—No te preocupes, veremos la manera de conseguir algo de sangre —
—Pero... Ahora están con el clan Grosvenor, pueden pedir que les den algo de sangre —
Me miro algo crédulo.
—Aunque pasamos un mal momento antes, mi padre ayuda a los suyos, aunque no creo que les vaya a dar sangre humana —dije lo último en voz baja.
El parecía pensarlo mucho.
—Si no quieres que mi padre los ayude entonces yo lo haré, lo conseguiré para ustedes —
—No te molestes, eso es algo que nosotros debemos resolver —
—Se que no quieres pedirle ni recibir ayuda de mi clan y menos de mi padre, es comprensible pero tengo que pagarte por haberme salvado —
—Eira... Te salve porqué te amo y quise hacerlo, no por recibir algo a cambio —
Me quede callada por unos segundos por lo que había dicho, pero ignore sus palabras.
—Quiero ayudarte, quiero ayudar a mi familia y el clan es mi familia y ahora ustedes son parte de ella —Me levante del columpio—. Vamos te conseguiré un poco, por favor dejame ayudarte por lo menos por esta vez —
El solo se río un poco y tomo mi mano para levantarse, y fuimos a buscar lugares en dónde vendían algo de sangre.
~ ~ ~ ~
~Le dije a Mael que iríamos a conseguir un poco de sangre, pero no tengo idea en donde podríamos conseguirlo, nunca he ido a lugares en donde venden sangre para miembros Hybters ~
Íbamos caminando sin rumbo, no sabia donde ir pero eso a Mael parecía no importarle ya que no decía nada solo me seguía, cuando estábamos pasando por un centro comercial vi pasar a Alex.
Recordé que el me dio la sangre.
—¡Alex! —Lo llame.
~El debe saber en donde puedo conseguir sangre ~
Como no estábamos muy lejos el me escucho y se acerco a nosotros.
—Princesa, ¿qué hace aquí?, ¿no debería estar en la escuela? —dejo de hablar al ver a Mael—. Por lo que había escuche, tu y tu familia ahora están al servicio de la familia principal, ¿entonces estas de escolta a la señorita? —decía en tono de burla.
—¿Celoso? —dijo Mael sonriendo.
—Basta, Alex deberías estar en el hospital, ¿qué haces aqui? —
Miro con odio a Mael y después me miro.
—No se preocupe ya estoy bien, y vine a comprar algunas cosas —
— Alex necesito que me hagas un favor —
— Es un honor que usted me pida algo, con mucho gusto la ayudare sin importar lo que sea —
—Bien porqué necesito que me digas en donde conseguiste la sangre o en donde puedo comprarla —
—¿Para que necesita sangre?, ¿algo le paso al líder? —preguntaba preocupado.
—No, mi padre está bien, quiero sangre para un amigo —
—Se donde venden, pero —miro a Mael—. Si es para el no le puedo decir —
—Alex, por favor —
—Lo siento princesa, pero no puedo permitir que se involucre con el —
— Alex, el me ayudo y ahora quiero ayudarlo —
— Aún así, el ya es un sirviente del clan.
Usted no tiene nada que hacer por el, al contrario él tiene que servirle a usted —
—¡Alex, es una orden! —dije molesta.
El parecía molesto. —Esta bien señorita, sígame. —El nos guío hacia el centro comercial, entramos a una tienda que parecía algo antigua y al entrar vimos muchos objetos antiguos, solo había un chico sentado muy atento a su lectura.
Alex nos guió por la tienda y entramos a otra habitación que estaba llena de objetos de vampiros, hombres lobos, etc. También habían pociones y además habían cosas raras dentro de frascos.
— Aquí es, el vende lo que sea, aquí puede comprar sangre sin que el clan se entere de ello —
—¿Sangre?, ¿quién de ustedes necesita sangre? —dijo apareciendo un señor, que se veía algo gracioso pero al mismo tiempo un poco aterrador —. ¿Niña eres un vampiro?, ¿cuánta sangre necesitás? —
—Hola, no yo—
—Es una humana común y corriente —dijo Alex interrumpiendo.
No entendí porqué lo hizo, era humana pero también un cazador, pero no le di importancia —. Así es —
—¿Por qué un humano necesita sangre?, ve a un hospital si necesitás una transfusión —
— Señor, creía que usted solo vendía cosas, ¿por qué necesita saber para que lo quiero? —
El sonrió. — Buena respuesta niña, ¿dime cuantas —decía pero se detuvo al ver a Mael y se sorprendió—. ¡Oh!, ¿cuanto tiempo? —
—¿Se conocen? —le pregunte a Mael.
— No, nunca lo había visto tal vez me esta confundiendo —dijo mirando al señor y yo también lo mire.
El señor se encogió de hombros y sonrió. — Si, creo que me confundí —
—La señorita esta tratando de comprar, por favor no cambie de tema —dijo Mael.
—Si esta bien.
Niña, ¿cuánta sangre quieres? —
—Mmm... ¿cuánto cuesta cada bolsa de sangre? —
—Cada una tiene un valor de cincuenta y tres dólares —
—Mael, ¿cuántas quieres? —
—Con una es suficiente —dijo acariciando mi cabeza.
—Creo que será mejor comprar más para que no vuelvan a tener problemas, por lo menos por un tiempo —
—No te preocupes veremos como lo solucionaremos —